Aprobados y suspensos del Real Madrid contra el Valencia: vuelven los fantasmas de Vinicius

Courtois: salvó dos ocasiones en la primera parte, aunque sólo una era válida. Ambas a remates de Cavani, que estaba en fuera de juego en la segunda ocasión; pero aun así, ahí estaba el belga para negarle el gol. Poco que hacer en el 1-1, estaba vendido con Lino prácticamente rematando a un metro de él. Vivió el resto del partido en relativa tranquilidad; el Valencia dominó, pero sin llegada. Hasta que en la segunda parte de la prórroga, Fran Pérez se plantó ante él y tuvo que volver a aparecer, despejando con el cuerpo lo que era el 1-2, que hubiese dejado al Madrid en la lona. Y de propina, le paró el penalti final a Gayá en la tanda, sellando el pase a la final. Se llevó el MVP del partido.

Lucas Vázquez: le costó profundizar en la primera parte, tuvo que estar atengo ante las subidas de Gayá y Samuel Lino. No pudo empezar peor la segunda parte: se durmió en la marca y Lino se coló en su espalda para hacer el empate. Y para colmo, en una jugada posterior se hizo daño en la rodilla tras caer de forma aparatosa y tuvo que ser sustituido por Carvajal en el 68′.

Militao: sufriendo un poco en carrera cuando el Madrid se lanzó al ataque, Cavani y Kluivert dieron trabajo en la primera parte. Se sacó de la chistera un pase espectacular para Benzema, que luego provocó el penalti que acabó en el 1-0. La primera ocasión blanca fue un cabezazo suyo que se fue alto. Despejó un tiro peligroso con la cabeza, lo que le dejó algo aturdido y paralizó el partido unos segundos. Pudo continuar, pero 20 minutos después se sintió desorientado y fue sustituido por Mendy, en el 74′.

Rüdiger: como Militao, con algunos problemas corriendo hacia atrás en la primera parte y también por alto, ante un rematador experto como Cavani. En la segunda parte probó a incorporarse algo más al ataque al principio, pero el Valencia hundió al Madrid en su área y le tocó guardar más la posición. Bastantes problemas para sacar el balón jugado, no es su fuerte.

Nacho: en la izquierda le cuesta mucho profundizar en ataque, y más con Vinicius como acompañante; el brasileño monopoliza el juego cuando a la cal. En defensa, tuvo encontronazos con Lato y Cavani le dio problemas en los balones aéreos, pero ahí apareció Courtois para solventarlos. Casi hace el 2-1 de cabeza a la salida de un córner; le faltaron centímetros para encontrar portería.

Valverde: buena primera parte del uruguayo, con mucho recorrido y trabajo, y también llegando. Filtró un balón perfecto para Rodrygo que el brasileño no pudo aprovechar y luego se asomó al gol con un latigazo desde la frontal que se fue a centímetros del palo. En la segunda parte, con el Madrid grogui, sacó al equipo del letargo con una internada y posterior centro que casi convierte Benzema en el 2-1. Intentó evitar la prórroga con un disparo desde la frontal que le salió algo centrado. Apareció además para evitar el potencial 1-2 del Valencia, rebañándole un balón a Fran Pérez cuando se disponía a chutar o a dar el pase final, casi en el área pequeña. Agotado, le dejó el sitio a Ceballos en el 106′.

Kroos: muy bien con balón en el primer tiempo, oxigenando el juego blanco. Pero sufriendo sin la posesión, como le suele pasar cuando tiene que hacer de Tchouameni. No está en la genética del alemán guardar la posición y el Valencia lo aprovechó para salir en carrera más de una vez. En la segunda parte perdió el control del balón y el Madrid lo notó. Pudo adelantar al Madrid en la prórroga con un chutazo desde la frontal que volvió a repeler Mamardashvili. Marcó su penalti de la tanda.

Camavinga: revolucionado en la primera parte, vio una amarilla algo absurda que le condicionó y luego soltó un pisotón que pudo costarle la segunda; Ancelotti lo vio claro y le retiró en el descanso para dar entrada a Modric. Dinamiza el juego en el medio, pero le falta saber medirse. Partido para sacar un aprendizaje.

Rodrygo: tuvo la primera gran ocasión blanca tras un pase buenísimo de Valverde, pero no le alcanzó la gasolina en la carrera y su tiro se fue desviado. El resto de la primera parte, poca cosa, y la misma tónica en la segunda, hasta que Ancelotti le retiró en el 84′ para dar entrada a Asensio.

Benzema: buena primera parte, bajando a recibir constantemente e intercambiando posiciones con Vinicius para generar espacios. Se cocinó él solo el 1-0: buen desmarque ante el pase largo de Militao y penalti de Cömert, que él mismo transformó engañando a Mamardashvili. Tras el 1-1, cocinó una buena jugada, pero no disparó cuando tocaba y perdió la oportunidad. En la segunda parte pudo evitar la prórroga con un cabezazo a centro de Valverde que habría sido el 2-1; se le fue alto. Bajó con el paso de los minutos; aún no está al 100% y se nota. Anotó su penalti en la tanda, lo que siempre es difícil tras haber lanzado ya uno en el partido.

Vinicius: sin mucho acierto en la primera parte, le costó desbordar a Thierry hasta que lo logró con uno de sus clásicos engaños, pero luego se le hizo de noche, sin apenas ángulo. Con el paso de los minutos y viendo que no le salían las cosas, se metió en batallas inútiles y reclamaciones arbitrales que no le hacen ningún bien. Y con todo, tuvo en sus pies el 2-1 y evitar la prórroga: mano a mano, Mamardashvili le achicó el espacio. En el inicio de la prórroga volvió a tenerla, esta vez con un disparo colocado desde la frontal ante el que Mamardashvili también le frenó con una estirada al límite.

Modric: entró en el 46′ por Camavinga para conservar una ventaja que apenas duró segundos, pues Lino marcó nada más arrancar la segunda parte. Le costó adaptarse al ritmo del partido y además vivió los peores minutos del Madrid, dominado por el Valencia. Tampoco él ayudó a sacarlo del letargo, estuvo algo lento para distribuir. Marcó su penalti de la tanda.

Carvajal: entró en el 68′ por el lesionado Lucas Vázquez. Estaba siendo reservado para la final, pues salía de una pequeña lesión, pero el guion obligó a que tuviese que jugar. Dio bastante profundidad por la derecha, con Asensio centrando mucho su posición y dejándole el carril para subir cuanto quisiera.

Mendy: entró en el 74′ por Militao, desorientado tras el pelotazo que se había llevado 20 minutos antes. No se entrenó en la previa por una sobrecarga muscular, pero las circunstancias obligaron a que jugase. Bien en defensa y escaso en ataque, lo habitual en él.

Asensio: entró en el 84′ por Rodrygo. Ancelotti vio, con el Madrid atascado, que sus potentes zurdazos podían ser la solución. No frecuentó demasiado la banda y centró mucho su posición para intentar el remate, sin fortuna. Marcó su penalti en la tanda.

Ceballos: entró en el 106′ por un Valverde agotado. No desentonó.