Aprobados y suspensos del Real Madrid ante el Mallorca: ya se añora a Tchouameni
El francés decantó el duelo con un golazo y firmó un encuentro completísimo, pero no podrá estar en Mánchester. Bellingham no encuentra la chispa, pero sí el remate. Lunin aparece cuando toca.
El Real Madrid se impuso por la mínima en Mallorca (0-1) en un duelo trabajado que decantó un golazo de Tchouameni, que firmó un encuentro estupendo. Ancelotti reservó a Vinicius y Rodrygo y le dio una hora a Bellingham para que recuperase sensaciones. El inglés se encontró con el larguero.
Lunin: apenas tuvo trabajo ante un Mallorca con un planteamiento que pasaba por rematar pocas veces e intentar acertar en esas. Raíllo le remató de cabeza tras un córner, pero el ucraniano reaccionó bien. Y en la segunda parte llegó su gran intervención, con una parada estupenda a voleón de Darder. Se llevó un buen susto con ese remate final de Muriqi, aunque pareció ser objetivo de falta antes.
Lucas Vázquez: intentó profundizar, pero le costó, como a todo el equipo blanco, en el primer tiempo. Y tuvo algunos problemas en defensa con Lato, que le ganó la espalda con facilidad en una de las grandes ocasiones locales, que acabó en un remate de Abdón Prats que llevaba veneno. Se fue en el 90′ por Militao.
Rüdiger: día de trabajo duro en la oficina teniendo que bregar con Muriqi, un nueve incansable de los que va al choque. Pero el alemán lo controló bien y dominó el espacio aéreo para evitar males mayores.
Nacho: como Rüdiger, estuvo fino para cubrir a Muriqi y para abortar las llegadas bermellonas, que no fueron demasiadas. Pero tuvo un papel fundamental bloqueando un tiro de Abdón Prats que tenía pinta de acabar en el 1-1. Buenos minutos para cargarse de confianza de cara a Mánchester.
Mendy: mucha seguridad en defensa, como siempre, muy poco en ataque, como siempre. Con él, el Madrid se asegura poco peligro por su banda, pero a cambio sacrifica llegada, y se notó en el primer tiempo.
Tchouameni: gran partido del francés, en labores de recuperación y también, y esto es menos habitual, con balón. No sólo por el gol, que fue un golazo, aunque rozase en un rival y cambiase de trayectoria; tenía pinta de chut dificilísimo para el portero del Mallorca de cualquier modo. Además, se mojó mucho más que de costumbre en los pases verticales, superando líneas, tomando riesgos y mejorando las jugadas. Está a buen nivel si juega en su sitio y el Madrid puede echarle de menos en Mánchester.
Valverde: despliegue enorme del uruguayo, una vez más. Parte desde la derecha, pero es omnipresente, sobre todo cuando toca compensar momentos de desajuste defensivo. No anduvo tan fino con balón como en otros momentos, pero el planteamiento del Mallorca tampoco le ayudó en este sentido. Pero pudo marcar, tras una buena jugada de Vinicius en la que él cazó el rechace, regateó con una finta y remató; le sacó el balón bajo palos Nastasic.
Modric: minutos de titularidad para el croata, que se pasó todo el partido buscando huecos en la intrincada defensa bermellona. Le faltó claridad en la primera parte, y el Madrid lo notó. Y mejoró en la segunda, cosa que el Madrid también agradeció. Le sirvió un gol hecho a Brahim que este no supo embocar. Pudo rematar en esa, quizás se pasó de generoso el croata. Se fue en el 86′ para que entrase Carvajal.
Bellingham: una hora para el que inglés recuperase sensaciones de cara a Mánchester. Misión cumplida sólo a medias: su primera parte fue muy pobre, como la del resto, aunque en los minutos que jugó de la segunda mejoró con balón. Pero al menos de demostró que sigue teniendo llegada, aunque no marcase: soltó un chutazo al larguero en la primera parte y otro remate más centrado en la segunda. Se fue en el 63′ para que entrase Camavinga.
Brahim: fue el atacante que más meneó el árbol en el primer tiempo, se presentó varias veces en posiciones de remate con sus conducciones vertiginosas, pero no tuvo el día en la definición. En su primer tiro, le salió muy centrado; y luego Modric le sirvió un gol en bandeja que el malagueño no supo aprovechar, se atragantó en el control y el portero del Mallorca despejó cuando ya se cantaba el 0-2. Se fue en el 63′ para que entrase Vinicius.
Joselu: si la primera parte del Madrid fue mala, la suya fue simplemente de inexistente, simplemente porque no le llegaron balones con los que hacer cosas. En la segunda eso cambió y comenzó a repartir juego recibiendo de espaldas y dando salidas. En una de esas, filtró un balón exquisito a Modric que casi acaba en el 0-2, pero Brahim no acertó con todo a favor. Pudo rematar al fin en el tramo final, pero le salió blando y centrado.
Vinicius: entró en el 63′ por Brahim. Pitos en cada balón que recibió tras lo sucedido el curso pasado, pero demostró chispa. En su primera jugada, dejó a varios rivales atrás y puso un balón peligroso que nadie remató. Y luego en una arrancada habilitó a Valverde para que casi hiciese el 0-2. Probó el remate siempre que pudo, se nota que sabe que en Mánchester el Madrid necesitará sus goles.
Camavinga: entró en el 63′ por Bellingham. Mucha movilidad en el centro del campo, aunque sin influir demasiado en el juego.
Carvajal: entró en el 86′ por Modric. Seguridad en el lateral derecho para atar el resultado.
Militao: entró en el 90′ por Lucas Vázquez. Un central para dar seguridad en los instantes finales, pero queda claro que no está para Mánchester aún.
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