Aprobados y suspensos del Madrid ante el Cádiz: Rodrygo es un escándalo

El Madrid sufrió, y mucho, para lograr batir a David Gil, pero finalmente derribó el muro gracias a un Nacho que fue lateral izquierdo, derecho y también goleador y a Marco Asensio, que confirma su matrimonio con la portería rival y sigue gritando renovación a base de goles. Rodrygo estuvo sublime y solamente la gran actuación del meta rival evitó su matrícula de honor. Aún así, MVP del duelo.

Courtois: Un espectador que estuvo atento cuando tuvo que intervenir. Alcaráz le probó cuando tenía los guantes fríos con un chut que hizo un extraño, pero Tibu no se complicó. Manoplas duras. Dibujó un par de desplazamientos en largo que muestran su confianza con el balón en los pies.

Lucas: Partido solvente en ataque y con alguna sombra en defensa. El poco peligro del Cádiz llegó a sus espaldas, como un disparo del Pacha Espino que estalló el palo de Courtois. Fue el primer cambio de Ancelotti, pues cedió su lugar a Camavinga.

Militao: Cómodo y superior. Militao estuvo inexpugnable, tanto en el juego aéreo como en las escasas ocasiones que tuvo que replegar. Además va tachando tareas de su lista. Si su debe era la salida de balón, ahora se permite hasta regalar asistencias como el pase en largo a Rodrygo que David Gil desbarató. Va a más y eso es mucho cuando su nivel de partida ya era muy alto. Imperial.

Rüdiger: Seguro al corte, se encargó de hacer las coberturas a Nacho cuando Bongonda, el futbolista más imaginativo del Cádiz, dejaba al canterano atrás. Menos brillo que Militao, pero sólido en un día donde debía demostrar justo eso. Si Ancelotti le necesita, está listo para rendir.

Nacho: Una navaja suiza. Por la izquierda, por la derecha... y como goleador. Le tocó la papeleta complicada, con Bongonda, y no le hizo demasiadas cosquillas. Cuando se marchó Lucas, se colocó de lateral derecho y descorchó el partido con un derechazo propio del mejor atacante. Nacho ‘vale para todo’, también para marcar.

Valverde: Partido físico de Valverde en el que fue de menos a más. En la primera parte no se lució tanto, pero tras el refrigerio de desfogó. Le dio un pase de la muerte a Rodrygo en una fantástica incursión que el brasileño no pudo abrochar y poco después casi sorprende con un centro-chut cargado de veneno. Cada día más cómodo como centrocampista.

Tchouameni: De puntillas. No se encuentra a sí mismo Aurélien. La exigencia no fue extrema y no tuvo ningún error de bulto. Al contrario, estuvo sobrio y superando el 90% de acierto en el pase. Pero a Tchouameni hay que exigirle más y no hacerlo sería hacerle un flaco favor. De ahí que Camavinga le haya comido el terreno. Muy tímido rompiendo líneas e incorporándose al ataque, dos características que le hacen un pivote diferente.

Ceballos: Voluntarioso, bravo e incisivo. Quizá demasiado en algunas ocasiones, porque Ceballos se perdió en alguna protesta de más. Cuando se centró en los futbolístico estuvo estupendo. Con presencia en área rival y muy generoso en el esfuerzo. Condujo en exceso en algún tramo, algo que cada vez es menos habitual.

Asensio: Asensio gritó renovación. Una vez más y no sólo a base de goles, que también, sino de juego. Desde el pitido inicial estuvo muy móvil y combinativo. En la primera parte enganchó una volea que se topó con el meta rival. En la segunda parte estuvo rápido e inteligente en un córner que casi termina en 1-0 de Valverde ante un Cádiz despistado y le puso el lazo a su partido con otro tanto. El décimo de una temporada donde se ha puesto la eficacia por montera.

Benzema: Pudo dar varias zancadas en pos de cazar a Lewandowski en la lucha por el pichichi, pero se quedó en demasiados ‘uys’. Un larguero en la primera parte, dejó tiritando el palo en la segunda... No obstante, su nivel se asemeja mucho al Benzema dorado. Se entiende a las mil maravillas con Rodrygo, se gustan. Hace escasas fechas le faltaba precisión en sus combinaciones y ahora es parte del pasado.

Rodrygo: El partido de Rodrygo hubiera sido de matrícula de honor si hubiera logrado descerrajar a David Gil. Aún así, sobresaliente. Comodísimo en la izquierda, su demarcación fetiche aunque él afirme sentirse más cómodo de ‘diez’. Las conexiones con Benzema fueron una constantes. Mejoró casi cualquier balón que llegó a sus pies y enfiló la portería rival con inteligencia. El problema fue que David Gil le ganó un par de manos a mano. Dejó un regate escandaloso que irá a su lista de highlights. MVP.

También jugaron

Camavinga: Sustituyó a Lucas para colocarse como lateral izquierdo. Titularísimo y cuando no lo es, primer cambio.

Hazard: Tuvo poco tiempo y no lo aprovechó.

Modric: Presencia anecdótica de Luka para dar descanso a Valverde en el tramo final.