Aprobados y suspensos de un mortal Espanyol
El conjunto blanquiazul pierde por la mínima cinco partidos después
Joan. Jugó el partido de cada domingo, seguro por arriba y con paradas dignas de la ‘parada del mes’, pero falló en el gol del Villarreal. O, por lo menos, no salvó a su equipo como lo hace siempre. No es que fuera una ‘cantada’ pero con lo bien acostumbrada que tiene a la afición puede considerarse un error. Un error para un portero de nivel mundial, claro.
Omar. Corrigió algún error de Kumbulla y prácticamente no se le vio en ataque. Partido correcto, como siempre, pero sin destacar especialmente. No sufrió y trabajó por el colectivo. Omar siempre suma.
Kumbulla. Sufrió en velocidad contra Barry, algo entendible por sus características. Pero se mostró mucho más vulnerable que en los últimos partidos, generando algunas acciones muy peligrosas para los intereses del Espanyol. No fue el central insuperable de otras tardes.
Cabrera. De largo el mejor de la defensa. Está en un momento físico excepcional, como demostró en algún ‘sprint’ volviendo tras alguna jugada a balón parado. Por arriba sigue siendo inexpugnable y muy solvente en los centros laterales.
Romero. Se le vio con ganas de reivindicarse, de jugar un buen partido contra su club, pero no fue su mejor tarde. Apareció mucho en fase ofensiva, algo que siempre es de agradecer, ofreciendo alternativas en ataque. No es que realizará un mal partido ni mucho menos, sino uno bastante plano.
Kral. Entró en el once por Pol Lozano, en una posición que seguramente le beneficia. No disputó un mal partido, pero no es Pol. Mejor en defensa que en ataque, pecó de cierta pasividad en el primer gol del Villarreal. Se notó su ausencia cuando fue sustituido, lo que no deja de ser un elogio.
Urko. El mejor del centro del campo. Su llegada ha sido una bendición para un equipo que ahora sí es capaz de salir con cierto criterio. De más a menos, genera mucho cuando consigue avanzar unos metros con el balón controlado. Hoy por hoy, es insustituible.
Expósito. Con él en el campo el Espanyol toma otro cariz. No solo porque sea el mejor jugador para lanzar al equipo, sino porque es el que tiene mejor pie. Y eso, en las jugadas a balón parado, es una bendición. Cada córner que sirvió le generó incomodidad al Villarreal.
Antoniu. El elegido en lugar de Jofre, le falta experiencia. Algo completamente normal en un jugador que está sacando la cabeza en Primera, pero eso le condiciona. Sobre todo porque le falta la confianza para disparar o encarar más, porque calidad tiene y la demuestra en cada partido.
Puado. Tuvo la más clara de la primera parte en un disparo muy lejano con el portero fuera de posición, pero se precipitó. Tuvo la más clara de la segunda, pero erró en el remate. El gran problema de Puado fue que jugó muy lejos del área rival y eso le convierte en un jugador menos peligroso. Disputó un buen partido que hubiese sido excelente con un poco más de puntería.
Roberto. Luchó bien como siempre y dio salida al equipo, pero le faltó una punta de velocidad, de frescura. Entendible, pues lo está jugando todo. No generó peligro por arriba pese a los buenos centros de Expósito. Tuvo una clara de cabeza para empatar en el 87’. Pudo ser el héroe.
Jofre. La idea era buena, corrió bien al contraataque, pero la ejecución fue deficiente. Sólo logró sacar córners a favor, nada más de peligro.
Aguado. Sin incidencia pese a tener bastantes minutos.
Véliz. Luchó pero no remató.
Hinojo. Debutó en Primera.
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Pol Lozano. Entró tarde y aún dio algún pase con criterio.
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