Aprobados y suspensos de un gris Espanyol
El error de Fortuño en el gol del Atlètic Lleida condicionó todo el partido


Fortuño. Un error tremendo condicionó todo el partido, tanto el suyo como el de todo el equipo. El primer balón que tocó se lo sirvió en bandeja al delantero del Lleida. Tuvo poco trabajo, pero no transmitió seguridad. Es cierto que el error fue gravísimo, pero también que es un chico joven que jugaba su primer partido oficial con el primer equipo. Calma.
Omar. Con más protagonismo de lo habitual, puso un excelente centro para el segundo gol de Kike Garcia. Se prodigó mucho más en ataque, generó peligro y desbarató las acciones del Lleida que rondaron su parcela. Buen partido.
Rubio. Poco trabajo para Miguel Rubio que, junto a Calero, formaron una pareja muy sólida en el eje de la defensa. Es cierto que el rival no le exigió.
Calero. Impecable. No cometió ni un solo error en todo el partido. Atento, seguro y superior a los delanteros del Lleida.
Salinas. Bien al inicio, más discreto hacia el final, no tuvo ningún tipo de problema por su banda. Prácticamente no tuvo ninguna incidencia en ataque.
Urko. Partido discreto del vasco, que tampoco tuvo mucho trabajo. Es difícil que un jugador de su perfil brille en un partido donde el Espanyol tiene más el balón y no le exigen ni en transiciones ni en estático, pero al igual que con sus compañeros en el centro del campo se echó de menos que combinara más.
Pickel. Le bastó su superioridad física para controlar el centro del campo. Ningún problema en defensa, bien en los despejes, pero poco con el balón en los pies. En un partido más complicado de lo que se podría prever, se echó de menos algo más de control del balón.
Terrats. Lejos de la versión del curso pasado en Getafe, algo que se podía intuir dado que no está teniendo oportunidades en Liga. No firmó un mal partido, pero tampoco se reivindicó. Gris, en la línea del equipo.
Koleosho. Un partido con más sombras que luces. Estuvo activo y participativo, pero no le salió nada. Desperdició un uno contra uno muy claro, perdió balones, falló regates… ante un Segunda RFEF. No se le puede reprochar nada en cuanto al trabajo, pero debe aportar más si quiere tener presencia en este Espanyol.
Javi Hernández. Muy buenas sensaciones en su regreso, y debut, con el equipo. Muy fino, técnicamente dotado y con chispa. Aprovechó su oportunidad y demostró que puede ser un jugador muy válido a lo largo de la temporada.
Kike. Dos ocasiones y media, dos goles. El primero de un penalti que se fabricó con un intentó de sombrero, el segundo de cabeza al segundo palo. No es ningún secreto que Kike es de los que factura a la mínima ocasión y que se mueve como pez en el agua en partidos trabados, con un césped cuestionable y ante rivales agresivos.
Antoniu. Muy poco de Antoniu en los minutos que disputó.
Roberto. Luchó como siempre. No tuvo ni una sola acción de gol.
Dolan. Tiró desmarques sin que le llegaran balones decentes.
Ferran. Sacó un balón peligroso en una acción de ataque en el Lleida. Debutó con el primer equipo.
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Edu Expósito. Sin incidencia.
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