Aprobados y suspensos de un Girona al trantrán

Gazzaniga: Forzó demasiado, en algunos momentos, jugar el balón con los pies y provocó nerviosismo en la afición del Girona. Estuvo seguro cuando tuvo que intervenir e hizo, en el 34, una gran parada para detener el disparo de Brahim. No pudo hacer nada en los tantos de Bellingham, Güler y Mbappé. En el 51′ firmó una excelente parada ante el cabezazo de Tchouameni.

Arnau Martínez: Míchel le pidió, en más de una ocasión y con mucha insistencia, que intentase cambiar la orientación del juego porque cuando tenía el balón, Miguel y Bryan Gil siempre estaban en superioridad.

David López: No lo tuvo sencillo, le tocó seguir de cerca a Mbappé y el central cumplió. El francés no paró de lanzar desmarques para ganarle en la carrera y David López no desfalleció. En la segunda mitad, con el físico al límite, sí que sufrió un poco más. Pero lideró en todo momento a la zaga.

Krejci: Fue el encargado de tomar mayor responsabilidad en la salida del balón. En el 13′ demostró su calidad, y rapidez, para ir al corte y envió al limbo una posible ocasión de Mbappé. En el 0-3 ya no le pudo frenar. Se desquitó en el 84′ al arrebatar el balón a Endrick cuando ya encaraba a Courtois.

Miguel Gutiérrez: Se movió por todo el campo y siempre con acierto. Movió al equipo, destilando mucha calidad en el pase. Gran visión de juego y puso centros que siempre llevaron peligro. En defensa eso sí, sufrió más de la cuenta y tuvo la mala fortuna de aparecer en la fotografía de los dos primeros goles. Primero fue quien despejó (flojo) el balón que aprovechó Bellingham para hacer el 0-1 y no acercó a taponar la carrera de Güler en su tanto.

Oriol Romeu: Parece un jugador lento y que le cuesta la distribución del balón, pero todo lo contrario. Siempre aparece en el momento justo para cortar el balón y fue el encargado de hacer nulo el espacio entre el centro del campo y la defensa.

Iván Martín: Da la sensación de que no ha olvidado el fallo en la clara ocasión contra el Sturm Graz, en la Champions. No se le notó con la chispa habitual y tampoco logró superar las líneas de presión del Real Madrid. Perdió el balón que acabó en el 0-1 de Bellingham.

Van de Beek: Se le vio insistente y intención de poner en vuelo a su equipo cada que se hizo con el balón. En el 29′ disfrutó, tras un gran pase filtrado de Asprilla, de una buena ocasión, pero disparó demasiado alto.

Bryan Gil: Cuando se hace con la pelota acostumbran a pasar cosas (buenas). Buscó una y otra vez a Luca Vázquez y su asociación con Miguel Gutiérrez provocó ver bajo el foco a Courtois. Fue, junto a Miovski, el primer cambio de Míchel.

Asprilla: Regresó tras lesión y demostró que puede ser muy importante en este Girona. En la primera mitads realizó un par de acciones repletas de calidad. Míchel le pide un paso adelante y se le vio sin miedo ni presión. Tiene confianza en su disparo desde fuera del área y, aunque sin acierto, lo intentó. Suyo fue el primer, y casi único, tiro a puerta del Girona.

Miovski: Pasó más bien desapercibido. Se vio superado por Rüdiger y Tchouameni en todo momento. No acabó de cazar ningún buen balón en el área para poder disfrutar de alguna oportunidad. Se le vio frío durante todos los minutos que disfrutó.

Abel Ruiz: Sin incidencia. Apenas tocó el balón y no disfrutó de ninguna ocasión de gol.

Danjuma: No aprovechó la oportunidad. Y ya van unas cuantas. Sí que intentó sorprender a Courtois con un disparo desde dentro del área, pero se le vio muy distante con sus compañeros.

Portu: En su primera acción demostró más que el resto de cambios, Abel Ruiz y Danjuma. Le pone intensidad a todo lo que hace y es de agradecer.

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