Almirón: “Me siento más fuerte que la primera vez que fiché por el Elche”
El técnico argentino asegura que “no esperaba la llamada de Bragarnik”. “No miento, porque cuando me tocó salir no lo hice en buenos términos con el propietario”, matiza.
Regreso: “He visto mucho al Elche, como a otros equipos donde dirigí, y conozco a muchos jugadores de este plantel. He seguido el proceso. Mi primera etapa fue bastante arriesgada con el cambio de Pacheta, que era querido. No fue un proceso natural. Ahora vivimos otra situación, tras la pandemia. Tuve jugadores con experiencia casi nula en Primera. Ese proceso fue avanzando, con futbolistas que no tenían de continuidad de 90 minutos y ahora son una realidad diferente. Proceso y club son otros. Es un equipo de Primera que ha crecido mucho, que vive una realidad diferente. Christian (Bragarnik) vio y negoció otras alternativas, pero esta es una situación no agradable para otros entrenadores. Me siento con mucha confianza. Entiendo que la gente me vea con resistencia. Todos los rivales serán difíciles, pero partimos con la idea de cambiar la racha desde ya”.
Por qué acepta el reto: “Para mí siempre es un privilegio estar entre los 20 mejores entrenadores de LaLiga. Ahora viene el Valencia y el equipo necesita que el cambio sea ahora. La llamada fue una sorpresa por el momento. Hay un partido inminente y se deben tomar decisiones rápidas. En ningún momento dudé. Sé lo que han hecho estos futbolistas por el club y sé que vienen de realizar un buen trabajo con el anterior entrenador”.
Autocrítica y errores: “Hace dos años se vivía un proceso nuevo. El equipo ascendió y hubo cierta resistencia a mi llegada, con jugadores afianzándose en Primera. El equipo siempre compitió y estos futbolistas han pasado por muchas fases ya. La expectativa era otra y el fútbol es dinámico. La motivación es muy subjetiva cuando los resultados no se dan. El entrenador necesita líderes en la cancha y en el vestuario. Hay que recuperar la confianza en el campo para dar la mejor versión de cada uno. El partido del sábado será duro, ante un Valencia con un entrenador duro y con espíritu muy competitivo. Luego, ni más ni menos que el Real Madrid. No hay tiempo para nada. Espero un buen resultado desde este sábado. La autocrítica la hablé con el propietario. Me resistí a mi primera destitución porque hicimos 18 puntos, los mismos que el siguiente entrenador (Escribá) al que se vio como exitoso. Yo tenía 14 jugadores que seguían de Segunda, sin experiencia en Primera, y con once refuerzos que llegaron en la quinta fecha del calendario. Creo que me quedé a mitad de camino”.
Más experiencia: “He pasado por muchos momentos como entrenador y como persona. O te afianzas o no te puedes dedicar a esto. Los momentos como profesional te hacen crecer y ser mejor. Me siento más fuerte que la primera vez que fiché por el Elche. La confianza que puedo transmitir espero demostrarla en el terreno de juego”.
Estilo de juego: “Llevamos sólo un par de días con el equipo. Vi una línea de cinco ante el Real Mallorca, con un equipo bien parado y conservador, pero arriesgando poco, siendo sólido y poco problemático. Nada te asegura ganar, pero quiero que tengamos una identidad. Buscamos agarrar confianza”.
Críticas de la afición: “Primero fue el cambio con Pacheta, y después no se pudo ganar durante mucho tiempo (16 jornadas). No es el mejor momento ahora. Cuando hay un cambio, la afición quiere acercarse a entrenadores con nombre y la gente puede llegar a tener dudas, pero espero revertir esa imagen como mejor carta de presentación. El equipo deberá ir demostrándolo”.
En qué falló en primera etapa: “Son momentos diferentes. En mi primer partido no pudimos ni completar el banquillo. A los 14 minutos, un desgarro muscular que nos hace armar una línea de cinco con Josan y Fidel como carrileros, donde nunca lo habían hecho. Poco a poco fuimos dando solidez en cada partido, salvo ante la Real Sociedad y el Celta de Vigo, mi último encuentro. Hay que volver a competir y no ser vulnerables, que no recibamos goles es lo primero para afianzar a un equipo. Poder volver a competir es mi primer objetivo. Reconstruir al equipo en base a confianza”.
Más herramientas, según Bragarnik: “Los jugadores son lo más importante para que se adapten a ciertas indicaciones. Hoy estos futbolistas tienen más experiencia y muchos partidos en Primera. Son jugadores con mayor jerarquía. La situación es de más desconfianza y uno se encuentra esta situación para revertirla. Dependemos de la afición ahora más que nunca para sentirnos respaldados. Las herramientas dependerán de cómo vamos viendo al equipo y la situación es más emocional. Debemos volver a ser sólidos”.
Valencia y Real Madrid, próximos rivales: “Se dio la situación así, en este momento. Me siento un privilegiado. En Primera todos los partidos son muy complejos. Valencia está muy bien, en un buen momento. son directos y agresivos. Tienen muchas cosas que le ha dado su entrenador. Todos conocemos el espíritu combativo de Gatusso. Ya vimos sus situaciones y no hay tiempo para estar débiles. Sabemos a lo que vamos a enfrentar”.
Plantilla: “Conozco a muchos jugadores y hay otros que necesitan partidos. Contra el Real Mallorca vimos detalles que son solucionables con más comunicación. Hay aspectos tácticos a mejorar, pero la calidad técnica de los jugadores es muy buena. Collado es un jugador que me gusta. Ellos deben adquirir confianza en base a partidos para poder mostrarse. Deben ser sólidos y fuertes. En eso vamos a trabajar”.
Apuesta de Bragarnik: “No, no esperaba la llamada de Bragarnik. No miento, cuando me tocó salir no lo hice en buenos términos con el propietario. Han pasado dos años y hemos hablado de muchas cosas de fútbol. Siempre estuvimos en comunicación y la decisión la charlamos, objetivamente, y se tomó la decisión en dos días”.
Sello de Almirón: “El equipo tiene que recuperar el espíritu sólido y ser competitivo. Adaptándonos a las virtudes del rival por momentos. Vamos a empujarnos ahora en la parte emocional”.
Pastore: “Es un jugador de mucha jerarquía y el equipo debe acompañar, jugando bien. Hacerle correr es limitar sus virtudes y hacerle daño a él y al equipo. Necesitamos que los futbolistas den todo. Las distancias son largas y los rivales son fuertes. La parte física es importante y la calidad dependerá de que pueda conectarse con los compañeros”.