Alivio en Valdebebas
El Madrid toca madera: ni un lesionado en el parón. Valverde y Vinicius son los más cargados, pero sin sustos. Sí hay tres descartados para Butarque.
Ni un lesionado. Sensación de milagro prenavideño. Porque en el Madrid se lo toman con ironía pero, en el fondo, suspiran. La situación se volvió crítica justo antes del parón: Militao, Lucas Vázquez y Rodrygo cayeron en una misma tarde (sumándose a Courtois y Tchouameni). Houston, esto no es un problema, sino mucho más. Con ocho internacionales y sus 16 partidos por delante, el asunto era susceptible de empeorar. Dedos cruzados. Que no haya más bajas. Y no las ha habido. Bala esquivada y varios golpes a la madera. Alivio.
Rüdiger descansó en el segundo partido (Alemania se aseguró la primera plaza al golear a Bosnia; 7-0), Camavinga, ídem (estaba apercibido y vio una amarilla en el primer partido). Para Bellingham la situación será similar, pero pospuesta (no podrá jugar el primer partido del próximo parón, en marzo, al estar sancionado; de ser convocado, sólo participará en el segundo), aunque esta vez jugó los 180′. Casi como Modric (168′) y Brahim (126′ y un parón espectacular: cinco goles). Todos ya se encuentran en Madrid y han entrenado esta mañana sin un ápice de molestias.
Güler, agridulce
Pero aquí llega el apartado delicado. En lo emocional, Güler. Ha sido un parón de dar un paso al frente en materia de liderazgo, pero con un duro revés en lo deportivo: Turquía se la pegó ayer ante una Montenegro que no se jugaba absolutamente nada (3-1) y se quedó sin ascenso a la Liga A de la Nations. Una debacle estrepitosa. En el país se elogia la actitud del madridista que, de hecho, pidió voluntariamente salir a dar la cara tras la derrota. Ha vuelto a jugar, a coger ritmo, a demostrar que tiene fútbol para mucho más de lo que está participando en el Madrid (17′ en los últimos cinco partidos). Pero el varapalo nacional coleará en su tierra. A nivel de molestias, al menos, no hay nada.
A la espera de dos
Sólo hay dos futbolistas algo aquejados en este sentido: Valverde y Vinicius. La zona delicada de este parón internacional. Ambos disputaron los 180′... y en dos encuentros exigentes. Colombia (victoria 3-2) y Venezuela (un duro empate, 1-1), respectivamente. Porque en el segundo partido, se enfrentaron. Un combate que terminó en tablas (1-1) y con abrazo, pero una considerable carga de minutos. Son los únicos futbolistas que todavía no han llegado a Valdebebas: en estos momentos se encuentran volando, aterrizarán esta tarde. El Madrid entrenará mañana a las 15:00h y, ahí, se les espera. Supervisando su estado físico. Por lo que transmiten ellos y las federaciones, están cargados, pero nada más. Apuntan a Butarque.
Tres bajas para Butarque
La enfermería, que por momentos preparó utensilios, ha terminado viendo cómo se vaciaba en este parón. Hay tres jugadores descartadísimos para Butarque: Lucas Vázquez (evoluciona favorablemente, pero aún le queda, mínimo, una semana), Tchouameni (algo más: se le estiman unas dos semanas) y Rodrygo (ya toca balón, apurando sus opciones para Anfield, pero no jugará en Leganés, eso es seguro). El otro nombre propio, Courtois, también se encuentra fuera de duda: lleva días trabajando con normalidad, recuperado, al 100%. Ancelotti prepara la salida del domingo con este panorama. Tres bajas seguras y una ligera incertidumbre con Valverde y Vinicius. Mañana, cuando se incorporen, habrá más detalle. Y, salvo sorpresa, el suspiro definitivo. La sensación es de alivio. Ni un lesionado en el parón.