Alejo: el campeón de malambo que se convirtió en un gran cabeceador
De niño, el nuevo delantero del Sevilla destacaba en esta típica danza folclórica de Argentina. Mascherano y el Tottenham le tienen mucha fe.
Alejo Véliz (Gödeken, Argentina, 2003) fue la gran sorpresa del final de mercado de enero sevillista. El espigado (1,86) delantero llega a Nervión cedido por el Tottenham inglés, que el pasado verano entre traspaso y bonuses pagó a Rosario más de 20 millones de euros por él. El Sevilla no se quedó ninguna claúsula de compra, opcional ni obligatoria: en Londres le mantienen la fe aunque le haya costado adaptarse (ocho partidos, 1 gol) a la City. Precisamente cuando anotó su primer tanto, a finales de diciembre, sufrió una lesión de rodilla que le ha tenido de baja ya varias semamas.
En Rosario Central debutó muy pronto, con apenas 18 años, y a los pocos meses de ese estreno ya andaba rompiéndola en las redes canallas: 17 goles acumuló en 50 duelos oficiales, a pesar de su juventud. El exbarcelonista Javier Mascherano, seleccionador de la Sub-20 albiceleste, le convirtió por ello en su 9 de referencia. A Alejo le costó arrancar, pero luego se desataba: de los 0 goles en el Suramericano, hace justo un año, pasó a marcar tres en cuatro partidos en el Mundial de la categoría celebrado el pasado verano, cuando Argentina quedó apeada por Nigeria en los octavos de final.
Como ariete de área que es, esquiva el regate y medirse en velocidad. Pero en la caja de los truenos se mueve como pocos a su edad. Para muchos expertos, Alejo se había convertido en el mejor cabeceador de la Primera División de su país antes de emigrar a la Premier. Y esto tiene alguna base lógica: de pequeño, Alejo fue bailarín semiprofesional y ganó el primer puesto en el Festival Nacional de malambo, una danza folclórica argentina que se fundamenta en el zapateo.
Esa facilidad para medir los tiempos antes de darle con la testa le harán competir con Youssef En-Nesyri, que acaba de volver tras ser eliminado con Marruecos en la Copa de África. Dice Alejo que aún no puede jugar, pero que la próxima semana ya se incorporará al grupo en los entrenamientos. Habrá que comprobar esos tiempos. Pero si Quique Flores consigue juntar a Youssef y a su nueva incorporación, el Sevilla ganará mucho en las áreas rivales... y en la propia, donde no ha parado últimamente de recibir goles a balón parado.
Llevará el 10 de Maradona y Éver Banega
Cosas del destino, la marcha de Ivan Rakitic a Arabia ha permitido que Alejo Véliz herede durante estos meses de cesión el dorsal 10 que varios argentinos de mucho tronío vistieron antes en el Ramón Sánchez-Pizjuán. Nada menos que Diego Armando Maradona y Éver Banega llevaron ese número en el Sevilla, pero también otros internacionales albicelestes como Diego Pablo Simeone o Diego Perotti, que no lo hicieron nada mal en Nervión. El mágico dorsal también ha pertenecido a otros mitos blanquirrojos, ya no argentinos, como José Antonio Reyes, Toni Polster, Vassilis Tsartas o el brasileño Luis Fabiano.