50 años del debut de Cruyff
Tal día como hoy, Johan acudía al rescate de un equipo que estaba a un punto del descenso y que acabó ganado la Liga. Dos meses parado, jugó ante el Granada y ya nada fue igual.
La casualidad ha querido que El Clásico entre el FC Barcelona y el Real Madrid se juegue hoy coincidiendo con el 50 aniversario del debut del futbolista que cambió la historia del club blaugrana. Hoy se cumple medio siglo del debut de Johan Cruyff con la camiseta del Barça.
El 28 de octubre de 1973 el Barcelona entrenado por Marinus Michels daba pena y llevaba siete jornadas de Liga lamentables. De hecho, estaba a un punto del descenso. En siete partidos jugados, sólo había ganado dos, había empatado otros dos y había perdido tres.
Una situación complicada para un equipo que había fichado a Cruyff en agosto procedente del Ajax, pero que no podía hacerle jugar a causa de las trabas que ponía el presidente del Ajax, Jaap Van Praag, para facilitar el transfer del mejor jugador del mundo en esa época y que encadenaba tres Copas de Europa seguidas.
El lunes 13 de agosto de 1973 en Amsterdam Johan Cruyff firmaba su contrato para ser jugador del FC Barcelona en presencia del entrenador blaugrana Rinus Michels, de su suegro y representante Cor Coster, del gerente del club catalán, Armand Caraben y del presidente del Ajax, Jaap van Praag. Parecía que con esa firma se ponía el punto final a un culebrón que ya duraba tres años, pero que no acabaría ahí. Una historia que nada tiene que envidiar a seriales actuales como los casos de Mbappé, Kane, Neymar o Dembélé. Que sepan las nuevas generaciones, que esto de “los fichajes interminables” hace mucho tiempo que está inventado.
El tema del dinero no era menor. En 1973, en plena dictadura franquista, la trasmisión de divisas debía pasar por el control del IEME (Instituto de Moneda Extranjera) y los jugadores de fútbol no estaban en la legislación. La solución la encontró Manuel Ortínez, amigo personal del presidente Agustí Montal, que tuvo la idea de catalogar la transferencia como si fuera para comprar “ganado semoviente”, es decir, vacas o caballos.
Jaap van Praag retuvo el transfer internacional de Cruyff y amenazó con no cederlo hasta 1974. Después de muchas negociaciones y presiones, la situación no se desbloqueó hasta octubre, por lo que Cruyff estuvo dos meses y medio sin poder jugar. Debutó finalmente el 28 de octubre ante el Granada. Marcó dos goles y el Barça ganó por 4-0 y no volvió a perder hasta proclamarse campeón de Liga en Gijón después de ganar al Real Madrid en el Bernabéu por 0-5. Desde ese 28 de octubre, el Barcelona ya fue otra cosa. Mucho mejor.
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