1x1 del Atlético: Oblak guarda el botín de Memphis
El equipo rojiblanco se impuso con un solitario gol del neerlandés pese a la expulsión de Savic en el 69′. Dos grandes manos del esloveno.
Oblak: En la primera parte apenas había tenido que intervenir para despejar un disparo lejano que no iba entre palos, pero en la segunda mitad fue salvador al igual que en Pamplona. En el minuto 56 le tocó dejar una doble parada de mérito en un mano a mano de Aspas. En dos tiempos, sacó la manopla final sobre la línea. El delantero también se estrelló con el larguero en la falta de la roja a Savic. Y en los últimos minutos un remate de Reinildo hacia su propia portería obligó a una gran manopla de Oblak. Carles Pérez le buscó constantemente. Acabó aquejado de molestias, pero como héroe.
Nahuel Molina: El argentino ha crecido enormemente aún en partidos grises. Ya no desentona lo más mínimo en defensa y suele sumar cuando aparece en ataque, aunque le cueste encontrar rematador en sus centros. Se entiende bien con sus compatriotas De Paul y Correa y hay que ir potenciando la conexión con Llorente. Cuando le toca cerrarse en campo propio lo hace cada vez mejor.
Savic: Tres rojas en 2023 son un lastre enorme para el equipo. Aunque Morata pensará la cantidad de veces que le hacen lo mismo que el montenegrino a Seferovic y no pitan a su favor. Un forcejeo con agarrón incluido le mandó a la caseta a los 69 minutos. En la primera hora de partido no estaba sintiéndose especialmente comprometido, bien con balón y seguro en el juego aéreo.
Hermoso: El Atlético claramente tiene una mucha mayor intención de salir jugando la pelota desde atrás. Arriesgar algo más, pero no rifar la pelota arriba. Y para ello es importantísimo el madrileño, con esa capacidad de romper líneas y no ponerse nervioso en una zona comprometida. Es más, la jugada del gol de Memphis la inicia con una gran apertura para Carrasco. No le hizo ningún favor a Savic en la jugada de su expulsión, con una peinada hacia atrás que dejó un balón dividido entre Seferovic y el montenegrino.
Reinildo: Vio una amarilla en la primera mitad fruto del enorme trabajo que le ocasionaba Carles Pérez, tan peligroso encarando como predecible chutando. Pero no se resiente ni en situaciones de máximo riesgo, cortando varios balones y contras del Celta prácticamente como último hombre. Oblak le salvó de marcar en propia, pero siempre es un seguro en defensa. Ahora se le exige más con balón en la salida desde atrás.
Koke: Mucha responsabilidad como pivote para iniciar los ataques y robar. Sufre mucho cuando los rivales le cogen con espacio y metros para correr. Con balón está más fino, dejó un pase enorme a Memphis que evitó Iván Villar. Un futbolista mucho más productivo cuando se juega en posesión que cuando el rival ataca en oleadas. En la segunda mitad entró Witsel para situarse en esa faceta de ancla, pero la roja de Savic le mandó atrás y no pudo liberar a un Koke que acabó sustituido. Ya es el jugador con más partidos de Liga en la historia del club.
De Paul: Completamente asentado en el once para generar fútbol y aportar una salida de pelota. Al equipo le faltó precisión para encontrar a ese jugador mejor situado. El argentino arriesga con la intención de dar el último pase, algo fundamental para un equipo al que le cuesta esa faceta, pero tampoco consiguió encontrar a Morata o que el delantero le entendiese. Enorme despliegue físico, en ocasiones parece que corre demasiado, pero su corazón hace mucho bien al equipo y parece más comprometido que nunca con la rojiblanca.
Pablo Barrios: Nueva prueba en el once para el canterano atlético. Como en Pamplona, Simeone modificó su medio para que Barrios se juntase con Koke y De Paul en la salida de balón. La pide y se muestra. Tiene que jugar para crecer y Simeone tiene claro que es uno más del primer equipo. Le faltó cierta precisión, no complicarse en alguna ocasión y a la hora de jugar con el cuerpo se nota que todavía tiene que crecer. Sustituido al descanso.
Llorente: Partió prácticamente como extremo derecho, muy abierto en banda y con la clara idea de pisar área y llegar, con un remate donde acabó actuando Tapia para arrebatarle el gol. Sin embargo, costó encontrarle más de lo deseado, con pocas acciones de atacar el espacio en ventaja. En una de sus pocas apariciones dejó un buen balón atrás para Morata que acabó salvando Iván Villar. Sustituido por Correa pasada la hora de partido, era su primera titularidad desde la lesión.
Griezmann: Simeone modificó su esquema y el francés se situó en la izquierda, lo que le resta radio de acción, aunque tenga libertad de movimiento hacia adentro cuando el guion del partido se lo pide. Para el Atlético siempre es mejor noticia que Griezmann esté omnipresente, el jugador con más calidad y claridad de la plantilla, aunque en los últimos meses le cueste encontrar portería. Y el Cholo buscó corregirlo en el descanso, dando entrada a Carrasco en banda y liberando al francés de esa cadena que le pegaba a la cal. Sustituido en un partido en el que estaba siendo poco trascendente.
Morata: Fue el mejor representante de la primera mitad del partido, con intención, intensidad y ganas de hacer daño, pero muy impreciso a la hora de intentar llevarlo a cabo. Le sacó muy pronto la amarilla a Aidoo por su viveza para adelantarse y salir. A la salida del descanso tuvo una ocasión clara, pero se topó con el guante de Iván Villar. Sustituido a la hora de partido, su trabajo es indiscutible, pero las cifras de goles en la delantera rojiblanca se hacen escasos.
Memphis, resolutivo
Carrasco: Su entrada tras el descanso dio vértigo y velocidad al ataque colchonero, pero se fue evaporando pasados los diez mejores minutos del equipo. Luego volvió a esa versión que parece más fría y apática y si nada más salir hacía una cobertura fantástica, ya después le costaba taponar a Reinildo y colaborar en su banda. Recibió de Hermoso y buscó el desequilibrio individual en la jugada que acabó en gol de Memphis tras su disparo repelido.
Memphis: Simeone ha elogiado la evolución del neerlandés en los entrenamientos y le recompensó con media hora. Y el neerlandés respondió con el gol del triunfo girando sobre su eje y superando a Villar. Da la sensación de que todavía tiene que crecer en lo físico y el entendimiento del fútbol con sus compañeros, pero tiene más chispa que semanas anteriores para correr al espacio. Gol para sumar confianza y dar puntos al equipo.
Correa: Su salida siempre da vitalidad al equipo. Nada más entrar giró y generó peligro. Se entrega, aunque no pudo tener excesivo protagonismo con balón. Buscó combinar con Memphis.
Witsel: Entró para situarse como pivote, pero la expulsión de Savic le trasladó al centro de la zaga. Y ya está totalmente asentado en esa labor. No es un parche, es un futbolista veterano que conoce el oficio atrás.
Saúl: Salió por Koke en los últimos minutos para dar músculo a un centro del campo que sufría con uno menos. Poco después llegó el gol y el equipo supo replegarse bien.