Youssouf Fofana, de repartidor de pizzas a jugar un Mundial
Youssouf Fofana, mediocentro del Mónaco e internacional francés, ha tenido un camino duro hacia la élite. Tuvo que compaginar el fútbol con repartir pizzas.
Dentro de las historias inolvidables, espectaculares y sorprendentes que nos deja el Mundial, una de las más emocionantes es la de Youssouf Fofana. El centrocampista, de 23 años, no tuvo un camino de rosas hacia la élite y necesitó compaginar varios trabajos, entre ellos repartidor de pizzas, para proseguir su sueño de ser futbolista. Actualmente en el Mónaco, sus inicios no fueron brillantes.
Antes de erigirse como un fantástico jugador en el Estrasburgo, Youssouf Fofana pasó por el INF Clarefontaine, el brillante centro de formación que, entre otros muchos, formó a Kylian Mbappé. Su falta de regularidad y de talento le obligaron a recular dentro del fútbol amateur, buscando un trabajo que le permitiera vivir para no dejar definitivamente el fútbol. Fofana fue repartidor de pizzas y vivió de primera mano lo que es la cultura del esfuerzo, ese que no te garantiza el éxito de forma absoluta.
“Cuando no te cogen en un lugar como Clairefontaine, las dudas aumentan.. Y como hay esas dudas, hay que pensar en hacer otra cosa, hay que seguir adelante en la vida. Te haces mayor y necesitas dinero, así que repartir pizzas en su momento era la mejor manera de ganar dinero y seguir intentando cumplir mis sueños”, declaró Fofana a dos días de jugar contra Inglaterra los cuartos de final del Mundial.
El Estrasburgo decidió darle una oportunidad muy pronto y el parisino la cogió con una fuerza atronadora. En 2020, el Mónaco le fichó y durante dos temporadas formó junto a Tchouaméni una dupla brillante. Con este último traspasado al Real Madrid, Fofana asumió galones en el Mónaco y recibió en septiembre su primera convocatoria con Francia, antes de, merecidamente, ser llamado por Deschamps para disputar el Mundial de Qatar.