Varane vuelve a ser Varane
Tras una temporada irregular con el Manchester United, el defensa ha recuperado de sobremanera su mejor nivel. Se siente líder del vestuario.
Raphaël Varane forma parte de esa estirpe de jugadores que se transforman, de sobremanera, cuando visten la camiseta de su selección. El central está disputando su segundo Mundial, el primero como jugador del Manchester United, después de una temporada irregular en la que todavía no ha conseguido imponerse en la Premier League. Sin embargo, su rendimiento con Francia está rozando la perfección, erigiéndose como un líder dentro y fuera del campo que, a su vez, contagia a un equipo joven y que necesitado del liderazgo del exjugador del Real Madrid.
El cambio de status de Varane en la selección es total. En 2018 fue campeón del mundo siendo un jugador trascendental, pero todavía no era líder. Ahora se atreve a incluso espabilar a sus compañeros, como en el descanso del partido ante Polonia, recordándoles que el sueño de ser otra vez campeones del mundo podía desvanecerse y que todos debían remar en la misma dirección. Palabras que, evidentemente, refuerzan todavía más su figura dentro de la selección francesa.
“Respecto a mi discurso ante Polonia, tenía que hablar porque estuvimos un poco menos concentrados en el partido, quizá porque era el comienzo de una nueva competición (octavos) o porque suele haber bajones. Sentía que había que revitalizar el equipo. No es algo que haya trabajado, simplemente lo siento, lo hago. Si creo que el grupo lo necesita, lo haré. Siempre he asumido mi parte de responsabilidad”, reconocía el defensa este lunes en rueda de prensa.
En todo el Mundial, Varane es, seguramente, el defensa que aporta mayor seguridad a la selección francesa. Upamecano, que es el menos experimentado de los cuatro, se vio superado por Harry Kane ante Inglaterra, siendo el del United el jugador que le cubría la espalda y salía al quite cuando su compañero no podía contener al extraordinario delantero de la selección inglesa.
Los números de Varane, asimismo, son significativos. Apenas acumula un duelo por partido en el Mundial (1.5, con un 46 % de éxito), suma un duelo aéreo por encuentro, encargándose Upamecano de dicha faceta, pero sí que tiene un más que notable 89 % de acierto en el pase. Interpretando la estadística, se deduce que estamos ante un defensa que, como ya demostró sobradamente en el Real Madrid, evita el contacto para hacerse fuerte yendo al corte limpiamente. En el Mundial, Varane aporta serenidad, tranquilidad y, sobre todo, contundencia en los momentos clave, como ya se vio ante Inglaterra.
El central, de 29 años, fue duda hasta última hora en el Mundial. Comenzó la temporada con dos dolorosas derrotas en la Premier League contra el Brighton y el Brentford. En el primer partido fue suplente, en el segundo disputó los 90 minutos y después fue clave en las cuatro victorias seguidas del Manchester United posteriores en las que ganó a equipos como el Liverpool o el Arsenal. El momento crítico se produjo el 2 de octubre, cuando el City goleó por 6-3 a su archienemigo y Halaand se lo merendó, provocando su sustitución por lesión en el minuto 40.
Tras ello, el United cosechó cuatro partidos seguidos sin perder, todos ellos con Varane de titular salvo el del Everton, el 9 de octubre, coincidiendo con la lesión que sufrió ante el City, justo antes de lesionarse en la pierna contra el Chelsea 13 días después. Aquel percance estuvo a un paso de dejarle sin Mundial. Se machacó con el fisioterapeuta y acortó plazos para llegar en plenas condiciones a la Copa del Mundo, donde no fue titular en el debut contra Australia, pero después jugó todos los partidos a un excelente nivel. Ante Marruecos buscará su segunda final consecutiva de un Mundial.