Upamecano, la nueva roca de Francia

Dayotchanculle Oswald Upamecano lleva bastantes años sentado en la mesa de los centrales con mejor porvenir del fútbol europeo. El central, de 24 años, representa el liderazgo de una selección francesa en la que encarna el poderío físico y la superioridad aérea en todos los sentidos. Tras varias temporadas sin regularidad, fruto de sus continuos errores de concentración, además de su falta de contundencia fuera del área, el jugador del Bayern está realizando un año que roza la perfección.

El fornido defensa de 1,86 fue fichado en 2015 por el Salzburgo, que desembolsó 3 millones por un jugador que venía de ser una pieza importantísima en la Francia sub17 que barrió a Alemania en 2015 en la final del Europeo. Cedido en su primera temporada al Liefering, el filial del equipo de la Red Bull, su exuberancia física avanzaba muy por encima de los chicos de su edad. Era, en definitiva, un telón de acero en los duelos al que le faltaba moldearse y asimilar conceptos tácticos para ser considerado un jugador de élite.

“Recuerdo su personalidad, muy humilde, un poco tímido, por supuesto, pero siempre muy concentrado. Tenía confianza en él. No es alguien que regatea, es realmente un defensor, con una buena recuperación, fuerte en los duelos pero también con esta técnica. Los mejores defensas del mundo ven antes que los demás y tienen esa sensación de anticipación. Jugó por primera vez en mi equipo a los 16 años y medio en un torneo con el Leverkusen, el Werder Bremen y el Valencia. Recuerdo que ganó todos los duelos, ya era muy fuerte en la recuperación”, comenta en Le Parisien Peter Zeidler, el entrenador que se hizo, en coche, un enorme trayecto para ficharle en Valenciennes.

Tras una etapa exitosa en Austria, donde jugaba prácticamente contra juveniles, Upamecano dio el salto a la Bundesliga. Su destino el Leipzig, que en 2017 buscaba un central de forma desesperada y encontró en el d e Évreux el complemento perfecto a otro francés que, como él, está en el Mundial: Ibrahima Konaté. Nageslmann, técnico con ideas tácticas revolucionarias, implantó un sistema de tres centrales en el que Upamecano era el primer centrocampista, el jugador por el que pasaban todos los balones y el que organizaba cada ataque de los alemanes para atraer, dividir en conducción y generar espacios libres para sus compañeros.

A pesar de su físico, irrefrenable, los problemas del joven defensa radicaban en sus problemas de concentración. Después de brillar, contra el Atlético de Madrid, en la final a ocho de Lisboa, en plena pandemia del coronavirus, Nageslmann, el entrenador que le tuvo en Leipzig y que suplicó por su fichaje a los dirigentes del Bayern, añadía que sus despistes y sus problemas de concentración eran un hándicap: “Está en el radar de los grandes clubes, pero tiene ese defecto de concentración”, dijo.

Ya intento defender bien, mi posición no está en el medio. Cuando el adversario deja espacio, puedo avanzar, puedo romper líneas. Lo más importante para mí es defender bien, no atacar. Para un defensa esto es lo fundamental”, reconocía en rueda de prensa este jueves. Jugador con más porcentaje de pases progresivos en la fase de grupos del Mundial (pase que supera línea), por delante de jugadores como Griezmann, Messi o Kane, además de defender muy bien, el exjugador del Valenciennes es un defensa con un porcentaje altísimo de acierto de pase y capaz de romper líneas con bastante facilidad.

Upamecano seguía poseyendo unas características idóneas para ser el mejor central del mundo, pero en el fútbol, el físico, que es importante, no lo es todo. Desarrolló muchos años entre la espada y la pared en Leipzig, consciente de que tenía que dar un paso al frente para asentarse en la élite. En 2021, Nagelsmannn lo fichaba para el Bayern después de estar en el radar de Chelsea y Liverpool. Su potencial era indudable. Su rendimiento, no tanto. Faltaba algo, un plus, unas décimas de segundo, un poco más de sosiego, para que cumpliera las expectativas que se habían generado en torno a su figura.

En la selección francesa, Upamecano debutó hace dos años, concretamente un 5 de octubre de 2020, en la victoria por 0-1 ante Suecia en la Nations League. Desde entonces ha sumado 10 internacionalidades, nueve como titular, 974 minutos y un gol. Como bien comentó en rueda de prensa, también vivió malos momentos con la selección. Desde octubre de 2020 hasta octubre de 2021, cuando jugó la final de la Nations League ante España, el central no fue convocado. Su irregularidad en Alemania pesaba mucho. Sin embargo, no tiró la toalla y continuó trabajando hasta que recibió su premio con la convocatoria de Deschamps para el Mundial de Qatar.

“Pasé malos momentos con la selección. Pero no sólo recuerdo los malos momentos. Nunca pensé que se había acabado, seguí trabajando en el Bayern y con mi entrenador. Dije que volvería”, reconocía en rueda de prensa. La constancia, la perseverancia y, sobre todo, la regularidad no solo le han devuelto a la selección, sino que es titular por encima de jugadores como Saliba o Ibrahima Konaté, su excompañero del Leipzig que ahora es pieza clave en el Liverpool.

Upamecano ha sido titular en tres de los cuatro partidos de Francia en el Mundial. En el único en el que fue suplente, contra Túnez en la jornada 3 de la fase de grupos, la actual campeona del mundo perdió. Acumula un 94 % de acierto en el pase, 96 % en campo propio y un 91 % en campo rival, estadísticas espectaculares para un defensa. En términos defensivos, hace de media 3 tackles por encuentro, roza el 80 % de duelos aéreos ganado y supera el 70 % en los duelos en general. El sábado se medirá a Harry Kane, uno de los mejores delanteros del mundo que le someterá a un duelo en el que le obligará a salir de zona continuamente. El partido, sin duda, más importante de su ya larga carrera.