QATAR 2022 | TCHOUAMENI
Descomunal Tchouaméni
La selección francesa venció por 2-0 a Marruecos y se clasificó para su segunda final consecutiva del Mundial. Tchouaméni fue un rodillo en el mediocampo.
La selección francesa se clasificó a su segunda final consecutiva de un Mundial después de derrotar por 2-0 a una combativa Marruecos. Los de Deschamps buscarán repetir estrella ante Argentina, el domingo a las 16 horas en el estadio de Lusail, en Doha. Théo Hernández adelantó a la actual campeona del mundo y Kolo Muani, que apenas llevaba cinco minutos en el campo, sentenció. Analizamos uno por uno la actuación de los galos con un espectacular Tchouaméni en el centro del campo.
Lloris: su primer tiempo fue brillante. En el minuto 9, repelió un gran disparo de Ounahi con una buena estirada. También evitó un gol para la historia de los Mundiales de El Yamiq de chilena al final del primer tiempo. Es, con diferencia, el mejor portero de la historia de la selección francesa. Transmite seguridad en cada acción, sobre todo en el juego aéreo.
Koundé: correcto, como siempre. Es central y se nota. No se incorpora al ataque, apenas da desdoblamiento a Dembélé, pero siempre está bien colocado y ofrece mucha seguridad en defensa. En el segundo tiempo Marruecos le pilló la espalda en el comienzo, pero luego corrigió a las mil maravillas. Se entiende a la perfección con Varane.
Varane: inició, con un buen pase vertical, el primer gol de Francia, dejando a Griezmann en ventaja. Mientras Konaté era el central que salía de zona con los mediapuntas rivales, Varane guardaba la posición en el área. En el primer tiempo, concretamente en el minuto 34, remató alto con la pierna izquierda una segunda jugada de un córner. Su segunda parte es espectacular. No dejó ni una sola opción a Marruecos de atacar y cortó cada balón que pasó por su zona. Está a un nivel excelso en el Mundial.
Konaté: el mejor central francés en la primera parte. Evitó que Ziyech se fuera de Théo Hernández, sacó, con serenidad, varias situaciones límite y con la pelota estuvo bien, salvo un pase vertical al lateral izquierdo que fue interceptado. 53. En el segundo tiempo, cortó una gran cantidad de balones y se complementó muy bien con Varane. No se notó la baja de Upamecano.
Théo Hernández: empezó el partido de la mejor forma posible, aprovechando en el minuto 4 un rechace de un disparo de Mbappé. Después, sobre todo en el primer tiempo, fue un dolor de muelas para Ziyech. Pudo cometer penalti en una acción en la que Boufal vio la amarilla tras ser arrollado por el jugador del Milan. En el segundo tiempo, estuvo correcto, conteniendo a Ziyech tras un mal inicio en la reanudación.
Tchouaméni: inconmensurable. Su primer tiempo fue espectacular. Corrigió continuamente a Fofana, fue un torbellino en cada zancada y dejó solo a Mbappé, al borde del descanso, solo contra el portero en una ocasión flagrante para Francia. Está en todos los lados. Roba, genera, da pases al espacio... puede dominar el centro del campo de Francia durante la próxima década.
Fofana: se le notó nervioso, sobre todo cuando tuvo que hacer coberturas en banda a Théo Hernández. Tuvo la suerte en el primer tiempo de que Tchouaméni estaba en todos los lados y podía cubrirle la espalda. En el segundo tiempo estuvo más comedido a la hora de salir al corte ya que Francia fue poco a poco replegando.
Griezmann: en el minuto 4 ya fue decisivo. Aprovechó un error de El Yamiq para anticiparse a su marca y poner un centro peligroso que se convertiría, tras un rechace de un disparo de Mbappé, en el 1-0 de Giroud. Su partido, defensivamente hablando, fue una exhibición. En los peores minutos de Francia cortó dos acciones peligrosas de Marruecos en su propio área y después oxigenó a los mediocentros franceses. Hay pocos delanteros, por no decir ninguno, que atesoren un talento defensivo como él.
Dembélé: tiene un don para hacer partidos muy buenos y otros en los que desespera a su propio equipo. Aunque comenzó con muchas ganas, generando peligro a Mazraoui y siendo solidario en las tareas defensivas, estuvo poco fino en los controles y en el último gesto. Acabó sustituido por Kolo Muani tras una actuación irregular.
Mbappé: da igual el partido que haga, que su momento en el partido llega, aunque sea al final. No tuvo su mejor noche el delantero del PSG, pero la primera vez que pudo darse la vuelta, olió la sangre y ahí no hay un mejor depredador. Hizo un eslalon marca de la casa y asistió a Kolo Muani para que marcara el 2-0 a placer. Acabó de 9 con la entrada de Thuram.
Giroud: no fue su mejor día. Estrelló en el palo una ocasión clarísima después de un error de Dari y a falta de diez minutos para el final del primer tiempo erró un rechace de un disparo de Mbappé que sacó un defensa en la línea. En el segundo tiempo, con una Francia mucho más defensiva, Deschamps le quitó para dar entrada a Thuram y colocar a Mbappé de 9.
Thuram: su entrada le permitió a Mbappé colocarse de 9. Entró con mucho ímpetu y Francia lo agradeció, generando dos oportunidades, una clara de Fofana. Aportó verticalidad y mucha mordiente ofensiva.
Kolo Muani: en 2019 era un desconocido en la cuarta división francesa. Irrumpió con una fuerza atronadora en el Nantes y eso le valió para jugar, tres años después, la Champions con el Eintracht. Después le llamó Deschamps para jugar el Mundial, marcando en las semifinales de este miércoles ante Marruecos. Aprovechó un gran pase de Mbappé y cumplió un sueño imposible de predecir hace meses.