España ya conoce cuáles serán sus primeros rivales en la Copa del Mundo de 2026, que tendrá lugar en Estados Unidos, México y Canadá. La vigente campeona de Europa ha quedado encuadrada en el grupo H y se batirá el cobre contra Uruguay, contra Arabia Saudí y contra Cabo Verde. Rivales, a priori, que invitan a pensar que pasará el primer corte. Y precisamente por ello es pertinente la siguiente pregunta: y después de la primera ronda, ¿qué?

La respuesta la tendrá la posición de los de Luis de la Fuente dentro del grupo, porque eso les hará ir por un lado del cuadro o por otro. Poniéndonos en el mejor escenario, en el que España sea primera del grupo H, jugaría la ronda de dieciseisavos de final contra el segundo clasificado del grupo J. Es decir, el grupo de Argelia, Austria, Jordania... y Argentina. En otros términos, si ‘La Roja’ no es líder de grupo, se cruzaría con la actual campeona del mundo si ésta sí que termina primera de su respectivo grupo.

Volviendo al supuesto en el que la Selección Española sea líder del grupo H y que supere su cruce de dieciseisavos, se enfrentaría en octavos al segundo del grupo K o contra el segundo del grupo L. Aquí aparecen selecciones como Colombia, Portugal, Inglaterra o Croacia. En ningún caso jugaría contra un líder, pero con total probabilidad saldría de ahí un rival para los de De la Fuente.

Si continuamos avanzando en la ruta, España disputaría los cuartos, presumiblemente, contra dos primeros de grupo: el primero del grupo D (donde jugará el ganador de la Repesca C de la UEFA, en la que se jugará el billete mundialista la Turquía de Arda Güler) y el primero del grupo G (el grupo de Bélgica). En semifinales, ‘La Roja’ ya tendría en su camino a auténticos cocos como Alemania, Francia u Holanda. El buen hacer o no de estas selecciones en el torneo les pondrán, o no, en el camino de la Selección hacia su segunda estrella.

Y en ese final del camino, en ese horizonte está, precisamente, la final de Nueva York del 19 de julio. Debido a que ha caído en el H, España evitaría a Brasil hasta la gran final. También esquivaría a Argentina (aunque, como hemos recalcado antes, si ambas selecciones hacen los deberes y lideran sus respectivos grupos). La suerte está echada y España ya puede intuir cómo será su ruta hacia la Copa del Mundo.

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