El Balón de Oro se decide

La final del Mundial de mañana se ha convertido en un Leo Messi-Mbappé casi más que en un Argentina-Francia. El duelo mide a las dos grandes estrellas del torneo, los máximos goleadores y mejores jugadores hasta ahora. El que gane se llevará la alegría inmensa de ser campeón del mundo. Para Messi sería la primera vez que pone la estrella en su pecho; para Mbappé, pese a sus 23 años, la segunda.

Sin embargo, la sensación que existe es que, además del Mundial, también está en juego el Balón de Oro. France Football fue muy claro al cambiar sus normas y pasar de valorar los años naturales a valorar las temporadas. En esta ocasión, al caer el Mundial en mitad de curso, hizo hincapié en que el torneo entraría a formar parte de la campaña 2022-2023. Es decir, ser campeón del mundo y haber cuajado un buen papel, como es el caso de ambos, supone muchas papeletas para que alguno de los dos pueda llevárselo.

Es más, al militar en el mismo club, el PSG, van a calcar lo que hagan a partir de ahora. Si son campeones de la Ligue 1 o de la Coupe de France, lo serán los dos; si lo son de Champions, también ambos. Únicamente les distinguirá el título del Mundial. Un desempate clave y que también les aventajará del resto. Incluso cayendo pronto en la Champions, la combinación Mundial-Liga-Copa, por ejemplo, puede ser suficiente para que el galardón vaya para uno de ellos.

Ausentes

Otros habituales en estos premios han visto mermadas sus posibilidades por lo ocurrido en el torneo. Salah, Mané, Haaland y Benzema ni siquiera han participado en Qatar. Otros grandes como Neymar, Modric, Cristiano o De Bruyne cayeron demasiado pronto en la cita mundialista.

De esta manera, la carrera se reduce casi automáticamente a Messi y Mbappé. El argentino tiene siete Balones de Oro y está en disposición de ganar un octavo; Mbappé aún no se ha estrenado pero está haciendo méritos de sobra. El Mundial dictará sentencia.