ASCENSO A SEGUNDA | ELDENSE 3 - CASTILLA 3
Vinicius Tobias denuncia racismo en Elda: “Lo más triste, era un niño...”
Un joven de unos 12 años le gritó “mono” desde la banda. “No es ni la primera, ni la segunda vez que ocurre; pasa diariamente. Y no os imagináis cuánto duele”, escribe.
Segunda parte del Eldense-Castilla, con la eliminatoria al rojo vivo y el filial atacando. Vinicius Tobias, que había entrado al campo por la lesión de Obrador, recoge un recoge un balón en la línea de banda y se dispone a sacar, cuando un niño se le acerca corriendo y le insulta por la espalda. “Mono”, se lee en sus labios. Una imagen que está dando la vuelta al mundo y sonrojando, otra vez. Un chico de apenas 12 años, lanzando un insulto racista. Algo que Tobias, de primeras, dejó pasar, concentrándose en el partido... pero poco después sí quiso denunciar en redes.
“Lo más triste... es que jamás esperas que algo así pueda salir de un niño. ¡Un niño gritando ‘mono’!”, escribió en Instagram, compartiendo la secuencia televisiva en la que el suceso se aprecia con notable claridad. Para seguir: “Es triste ver a jugadores sufriendo este tipo de prejuicios. No es ni la primera, ni la segunda vez que ocurre; pasa diariamente. Y no os imagináis cuánto duele. Tiene que acabar, se han sobrepasado los límites. El color de piel no significa nada, todos somos iguales. Queremos respeto. ¡Lo mínimo!”.
La ola de apoyos se desató ipso facto. Y uno de los mensajes más aplaudidos procedió de Iker Bravo, su compañero: “Hermano, sé que son momentos difíciles, sé fuerte. Nadie merece ser insultado ¡y menos por racismo! Mucha fuerza, tanto a ti como a los que lo han sufrido. Te quiero mi brasileño. Bailad mucho, Vinicius Tobias y Vinicius Júnior. Siempre con alegría”.
“¿Tobias también provocaba?”
Todo sucede apenas unos días después de que dos de los tres jóvenes que fueron detenidos como presuntos autores de los insultos racistas a Vinicius (Mestalla), admitieran que realizaron gestos al delantero, pero como respuesta a “provocaciones”. Reconocieron gestos, pero negaron insultos verbales. “¿Tobias también provocaba?”, ha sido la línea del alud de mensajes, que busca alejar el foco de las víctimas.