Sala de máquinas sin capitán, pero con piezas sobre las que construir
Villares, Isi Gómez y Olabe tienen contrato y ofrecen un buen punto de partida para el centro del campo del Deportivo, que tendrá que reforzarse todavía más tras la retirada de Bergantiños.
El Deportivo necesita ponerse las pilas en el mercado después de varias semanas en las que apenas ha podido concretar avances en la planificación de la próxima temporada. Porque si bien es cierto que tiene muchos jugadores con contrato, tendrá que reforzarse en todas las parcelas, incluida el centro del campo. La sala de máquinas blanquiazul ha perdido a Rubén Díez y también a Álex Bergantiños, cuya retirada no sólo se notará sobre el césped, sino también en el vestuario. Eso sí, al menos tiene piezas sobre las que construir con Villares, Isi Gómez y Roberto Olabe.
Los tres futbolistas tienen contrato y todos fueron importantes la pasada campaña con más o menos continuidad en el tiempo. El de Vilalba fue uno de los pilares del equipo, rozando los 2.500 minutos y ganando cada vez más peso en la caseta. Su condición de jugador de la casa hace que esté llamado también a coger el relevo de Bergantiños como uno de los capitanes y su presencia, un año más, será indispensable.
También contó con una alta participación Olabe. Se fue hasta los 2.280 minutos y durante tramos del campeonato fue indiscutible para Óscar Cano. No terminó bien la temporada y sus problemas con las tarjetas parecieron pasarle factura a nivel anímico. Acabó mejor Isi Gómez, que tuvo en los problemas físicos el gran lunar de la campaña. Le faltó continuidad y se quedó en 1.398 minutos, pero dejando la sensación de que puede ser todavía más importante.
El número de refuerzos, pendiente del entrenador
Con este escenario, un punto de partida en el que hay tres jugadores con contrato en vigor, el número de refuerzos para el centro del campo dependerá de la idea del entrenador. Deberían llegar al menos dos para cubrir las salidas de Díez y Bergantiños, permitiendo una rotación de cinco futbolistas. En caso de que la idea del técnico sea jugar con tres en la medular, la decisión estaría entre firmar un jugador más o contar con alguno de los jugadores de la cantera.