Quiles: “Lo único que quiero es ascender y jugar con el Deportivo en Segunda”
Alberto Quiles habla con AS del derbi con el Celta, su situación contractual, el polémico cambio en León, sus goles, la situación de Óscar Cano...
Alberto Quiles Piosa (Huelva, 27/04/1995) es el pichichi del Deportivo con diez goles, a lo que añade cinco asistencias. El delantero andaluz analiza la situación del equipo después de la derrota en el Reino de León y la próxima visita a Riazor del Celta B. Hay crítica hacia el rendimiento del equipo fuera de casa, pero también mira con optimismo al futuro. Habla sin tapujos de la polémica por su cambio ante la Cultural Leonesa, su situación contractual y rompe una lanza a favor de Óscar Cano.
¿Han digerido ya la derrota en el Reino de León?
Miramos las cosas malas que hicimos para corregirlas, aunque también hubo cosas buenas. No en el gol que encajamos, que es un error de todos, del primero al último. Era un saque de banda y dimos unas facilidades increíbles. Tenemos culpa todos y no puede volver a pasar. Somos humanos y habrá fallos, pero deben ser los mínimos. No nos pueden meter un gol tan fácil.
El momento del equipo no es bueno, por primera vez en la temporada han enlazado tres partidos sin ganar.
No había caído en ese dato, pero llevas razón. Pues hay que tomar con más ganas todavía el siguiente partido para conseguir la victoria. Hacía tiempo que no perdíamos y hay que levantarse con tres puntos de esa derrota.
¿No estaba corriendo demasiados riesgos el equipo al fiarlo todo a Riazor y conformarse a veces con empatar fuera?
No lo creo porque fuera de casa nunca salimos a empatar. Jamás hemos tenido la mentalidad esa de ganar en casa y empatar fuera. Siempre vamos a por los tres puntos porque tenemos equipo para ganar en cualquier campo. Sí es cierto que tenemos que mejorar mucho fuera. Llevo tiempo diciendo que parecemos un equipo en Riazor y otro a domicilio. Eso no puede ser.
¿Hay que cambiar algo fuera de casa para encontrar la fórmula?
Sí, sí, está claro que sí. No podemos ser un Depor en Riazor de 9, 10 y que no bajé nunca de 8,5 y fuera dé un día un 6, otro un 4 o que el máximo sea un 7. Sé que es complicado, que los rivales aprietan más, presionan, la afición celebra un balón arriba ganado por su delantero como si fuese un gol… Tenemos que darle una vuelta para ser un equipo, no sé si de 10, pero sí de 8. Hay que conceder poco y las que tengamos, meterlas. Seguro que si nos ponemos 0-1 la cosa cambia.
Estuvieron muy cerca del liderato, a un punto, pero ahora han caído a cinco. ¿Cómo se lleva mentalmente este retroceso?
Hay que llevarlo bien porque todavía quedan 30 puntos, tiene que venir a Riazor el Alcorcón y no creo que haga como el Racing el año pasado y gane siempre. Tenemos que tener un equilibrio y sacar los máximos puntos, todavía está en nuestra mano.
Después del partido en León habló en zona mixta y sus declaraciones, diciendo que no entendía el cambio, levantaron bastante polémica.
Sí, ya he visto que han levantado polémica y lo puedo entender. Vienes de una derrota, comentas que no entiendes tu cambio y la gente ya se piensa que no estoy con Óscar Cano. Para nada es así. Si solo dije que me sorprendía el cambio porque yo me veía bien y, sinceramente, pensaba que no me iba a cambiar. Pero no hay nada de algunas de las cosas que he leído como que el vestuario está roto, que Quiles no quiere al míster, le está haciendo la cama… que va, que va. Estoy con el míster y le estoy muy agradecido, cuando él llego fue justo cuando empecé a meter goles.
De hecho, usted solo se perdió el partido del Castilla por sanción y empezó uno en el banquillo, el del San Fernando en Riazor, por molestias físicas.
Sí, me acuerdo, tenía un golpe en el pie. Nunca voy a poner un mal gesto o mala cara, ni protestar porque me cambien. Al final, también es una falta de respeto a mis compañeros, al que entra por mí y al que no juega. Si solo dije que me sorprendía el cambio, nada de que estuviese en desacuerdo, ni que me no podía cambiar porque soy el mejor.
¿Qué pasará si lo cambian el domingo?
(Risas…). Nada, a ver si ahora el míster no me va a poder cambiar. Fue solo que me veía bien, íbamos perdiendo y en mi cabeza estaba jugar los noventa minutos.
La afición que viajó pidió la dimisión de Óscar Cano. ¿Cómo ve al míster?
Supongo que lo de León no fue agradable para él, pero lo veo como siempre. Ya está preparando el partido del Celta B con la misma intensidad que nos mete siempre. Lo veo con muchas ganas y si pudiese jugar mañana estaría encantado. Lo veo con ganas de que llegue el domingo.
El partido se las trae por la clasificación y por el rival, el filial del eterno rival. ¿Es de esos días en los que hay mucho más que perder que ganar?
Sí, sí. Ya sabemos el partido que es, no hace falta que diga nada, sabemos lo que significa. Ellos van a ir a full y nosotros tenemos que ir a full. El estadio va a estar casi lleno, incluso puede que haya más gente que contra el Castilla. Será un partido bonito de jugar del que hay que salir con los tres puntos sí o sí. También está la clasificación, pero en estos partidos da igual. Si el Celta hubiese venido último, también sería especial. Ellos están ahí pegados, pero nosotros tenemos que ir a por el Alcorcón.
¿Qué tipo de partido espera?
Espero que esa media hora que hicimos ante el Castilla la repitamos durante 70, 80 minutos o todo el partido. Yo lo vi desde la grada y dije ‘buff, nos los estamos comiendo’. Sabemos que ellos son buenos y que tendrán su momento en el partido; ahí nos tenemos que hacer fuertes. No podemos dejarles pasillos interiores, que es donde tienen más calidad.
¿Ve al equipo tranquilo y mentalizado para este derbi?
Lo veo tranquilo y con muchas ganas. Este tipo de partidos, como el del Castilla o el del Córdoba, son los que todo el mundo quiere jugar. Esta semana se percibe un plus en los entrenamientos, todo el mundo aprieta porque quiere estar en el once.
Hablaba antes del error colectivo en el gol de la Cultural. Además de ese fallo en defensa también les está costando marcar fuera.
Sí, sí, nos está faltando definición y tampoco estamos teniendo fortuna. El día del Linense mandé un cabezazo al larguero, en León otro remate al palo, el portero me para una y el rechace le cae a Lucas pero muy encima y no le da tiempo a rematar, Pepe tira fuera otra tras un rechace de un saque de esquina porque le viene muy rápido, el portero le hace una buena parada a Mario… No estamos teniendo esa fortuna, pero sabemos que tenemos gente de calidad y en el momento que se meta un gol, seguro que llegan más. Hay que estar tranquilos y tener la cabeza fría.
¿Cómo está usted en lo particular respecto al gol?
Quiero meter, claro que quiero meter. Pero la verdad es que me veo bien, tranquilo, estoy a gusto. El otro día me lo pasé bien jugando y cuando disfruto jugando es cuando hago mi mejor juego. Este año estoy sorprendido porque estoy dando muchas asistencias de gol, no había dado tantas en mi vida.
Usted renueva automáticamente si se asciende, en caso contrario acabaría contrato en junio. ¿Le pesa mentalmente o le descentra un poco su situación contractual?
Para nada. Es un tema que se habló a principio de temporada, no se llegó al acuerdo y ahora hay que estar centrados en ascender, quedan solo diez partidos. Estoy muy tranquilo, muy bien y confío en que se ascienda porque lo único que quiero es seguir aquí en Segunda. Quiero jugar en Segunda con el Depor, es lo que quiero desde que llegué aquí. Lo voy a repetir, aunque es una perspectiva en la que no me quiero poner. Jamás he dicho que me iría si no se asciende. Si ocurre, lo primero que haré es hablar con el Deportivo. Es que estoy muy bien aquí, la gente me quiere, a gusto con el club, mis compañeros… Soy feliz, ¿por qué cambiar? Pero vamos a ascender y voy a estar aquí en Segunda.