Lado Chikhradze, de la Academia al sueño de acompañar a Kvara
El delantero ha entrado en la prelista de Georgia para la Eurocopa Sub-21. Jugó en el Juvenil del Atlético y se entrenó con Simeone. Tras Recreativo y Extremadura, hoy milita en el Samgurali.
Georgia va a por todas en su Eurocopa Sub-21. Una competición que se disputa en el país, conjunto con Rumanía, y que ha llevado a Ramaz Svanadze a citar a Khvicha Kvaratskhelia y a Giorgi Mamardashvili como cabezas de cartel de una nueva generación que viene pisando fuerte. Ambos son ya estrellas de la absoluta, pero por edad todavía podían formar parte del torneo que da derecho a los próximos Juegos Olímpicos. Y, en la prelista, además de varios futbolistas importantes de la liga francesa o la presencia de Giorgi Gagua, del Real Unión, también hay un viejo conocido de España y del Atlético. Lado Chikhradze, actualmente en el Samgurali, formó parte de la Academia rojiblanca en la temporada 2018-19.
El delantero de 21 años se ha ganado un sitio en la prelista gracias a su acierto de cara a puerta, con siete tantos en 15 partidos, pero en tan solo 313 minutos (uno cada 44 minutos). Y Lado atiende a AS para recordar su paso por España, donde también militó en el Recreativo de Huelva y Extremadura, y sus esperanzas de futuro. “En noviembre de 2017 hago pruebas con el SPAL de Italia y con el Atlético. En ambos estuve a examen durante una semana y los dos me llamaron. No me costó decidir la opción del Atlético. Llegué en agosto de 2018 y jugué durante una temporada, una de mis mejores experiencias en el fútbol. Pude entrenar varias veces con el primer equipo, compartir campo con Griezmann, Koke, Saúl, Lemar, Diego Costa, Godín, Giménez y era una locura para un chaval de 17 años. Es la mejor experiencia que he tenido en el fútbol”, comienza explicando Lado.
“Recuerdo mi primer día con el primer equipo como si fuese ayer. Nos llamaron a varios canteranos para entrenar con el primer equipo y cuando bajé al campo estaba en shock. No controlaba las emociones, Simeone me tocó el hombro, me puse a temblar, me dijo algo pero no pude entenderle bien, todavía no manejaba el español. Es bastante guay entrenar con esos jugadores y ese entrenador. Una experiencia que nunca voy a olvidar, ojalá repetirlo”. Y si hay un nombre que destaque por encima del resto es el de Antoine Griezmann. “Es un jugador con un nivel altísimo. En los entrenamientos cuando empecé a subir me quedaba pasmado viéndole hacer magia con el balón. Luego intentaba hacer lo que le veía en los entrenamientos”.
Tras un año de rojiblanco, alternando entre el Juvenil, el B y los entrenamientos con el primer equipo, el georgiano salió del Atlético y firmó por el Recreativo de Huelva. “No pude debutar durante un tiempo en juveniles y luego llegó la pandemia y se complicó mucho todo. Me quedé un año más en el Recre entrenando en el primer equipo y jugando en el filial, se produjo el descenso a Tercera y llegó el momento de salir al filial del Extremadura”. Allí tampoco fue fácil. “Hice una buena pretemporada y empecé a jugar y sumar minutos con buenas estadísticas, me llegó la atención del primer equipo, entrenar con ellos a los dos meses de llegar. Subí con ellos y participé en el partido histórico contra el Irún (con solo dos jugadores del primer equipo y el resto de las categorías inferiores)”, recuerda. Pero el Extremadura desapareció en marzo de 2022 tras no poder hacer frente a sus deudas y quedar descalificado de la Primera RFEF por no presentarse a dos encuentros.
“Llevaba mucho tiempo en situaciones difíciles. Tras lo del Extremadura ya pensaba que era el momento de volver a casa y empezar de nuevo. Todo está yendo bastante bien, logré generar interés por parte de equipos españoles y de otros países y espero seguir así e intentar entrar en la última lista de la Eurocopa Sub-21. Regresé a Georgia porque en el horizonte venía esta oportunidad. Kvaratskhelia, Mamardashvili, Mikoutadze... solamente quería entrar en esta selección y volver al nivel alto para estar allí. Hay mucha competencia. Llevo mucho tiempo conociendo a estos jugadores, compartiendo vestuario en las categorías inferiores de la selección, quería estar con ellos. Tengo muchas ganas de entrar en la lista, demostrar en los entrenamientos que merezco estar en la última convocatoria y espero conseguirlo”.
Su país vive un boom con una nueva generación de oro. “Georgia es un país de fútbol, amamos el fútbol y con el nivel de Kvara aún más. Seguimos muchos equipos españoles, especialmente Madrid, Barça, Atleti y Sevilla”. Esa explosión de Kvaratskhelia ha sido una de las grandes noticias del año en Europa, aunque Lado ya lo preveía. “No me ha sorprendido su nivel. Llevo muchos años compartiendo vestuario con él, es un chico humilde, que trabaja mucho, dedica mucho tiempo al fútbol y tenía toda la pinta de que iba a llegar muy alto. Ha sacado el nombre del país a Europa, está haciendo cosas maravillosas para su equipo, selección y los futbolistas de aquí.
Hay mucho talento aquí, es un país pequeño pero que ama con locura el fútbol. Muchos niños empiezan a jugar, es difícil salir de sus ciudades, hay pocas opciones de estar a gran nivel del fútbol aquí y muchos diamantes se pierden por el camino. Por eso creo que si hay mucha más atención al país se van a encontrar muchas perlas aquí. Kvara es un ídolo aquí, ya teníamos a Kaladze, que ganó la Champions, y Kobiashvili y muchos jugadores más que son leyenda aquí, pero Kvara para los niños es de otro nivel. Solo necesitaba la oportunidad que le dieron en Nápoles y lo está haciendo maravilloso. Su futuro es decisión suya, queremos lo mejor para él. Tendrá sus preferencias, pero por nivel estoy seguro que si algún día llega a España lo romperá”.
Lado Chikhradze también conoce de primera mano a Mamardashvili, una de las grandes sensaciones de LaLiga y uno de los porteros a tener muy en cuenta en el futuro. “A él le conocí más tarde que a Kvara, pero tenemos relación desde 2018. Antes de ir a Madrid coincidimos, pero el verano de 2019 fue cuando más tiempo pasamos juntos, porque yo hice la pretemporada con su equipo para estar en la mejor forma. La vida le dio la oportunidad de jugar contra buenos equipos con las clasificaciones de torneos europeos, contra Dinamo de Moscú y Granada lo hizo muy bien y demostró al mundo que merecía la oportunidad. Llegó al Valencia y desde entonces solo evoluciona hacia adelante. Le deseo lo mejor”.
Ahora Lado mira al futuro y se centra en ese torneo Sub-21, donde España también es una de las candidatas en una lista de Santi Denia que cuenta con los rojiblancos Rodrigo Riquelme, Manu Sánchez y Sergio Camello. “Con los tres compartí vestuario y ya se les veía el nivel de cracks que están demostrando. Les deseo los mejor, solamente puedo decir que son unos chavales que son grandes compañeros y a un georgiano que nadie conocía les recibieron muy bien y me trataron fenomenal. Sigo sus pasos cada finde y espero algún día poder volver a compartir vestuario con ellos o compartir campo”. Eso sí, si es en este Europeo, “me encantaría reencontrarme con ellos, pero que gane Georgia (risas)”.
El torneo europeo se presenta como un escaparate para el país. “Es una oportunidad muy grande de hacer grandes cosas en el torneo y es lo que trataremos de lograr. Es una de las mejores selecciones de Georgia en la historia y en la absoluta también hay muchas ganas de afrontar los partidos para clasificar para la Eurocopa y Nations League”. En cuanto a Lado, el jugador de 21 años se define como “un delantero al que le gusta marcar goles. Físicamente fuerte, no significa que me guste jugar como un 9 clásico. Prefiero moverme mucho, recibir el balón al pie, al espacio e intento tener varios registros y recursos en los partidos. Me fijo en Griezmann, Benzema… y también sacar las mejores cosas de Lewandowski y otros arietes. Finalizar bien, saber cuándo y dónde tirar”.
Su vuelta a Georgia ha sido un paso atrás con el sueño de dar dos hacia adelante. “Me gustaría volver a España. Tengo bonitos recuerdos de la vida, el fútbol, amo el país, los sitios donde he vivido, tengo amigos y creo que no he tenido la oportunidad de demostrar el nivel que tengo. He podido jugar en varios equipos, pero no he tenido continuidad para demostrar lo que puedo hacer sobre el campo. Voy a internar hacer todo lo que pueda para volver a España y demostrar mi nivel. Siempre he seguido la liga española y también la inglesa. Son las dos ligas que sigo desde niño y amo mucho ambos tipos de fútbol y sería un sueño poder debutar en primera división de cualquiera de estos dos países”, sentencia. El primer objetivo es poder participar en ese Europeo Sub-21 que es todo un sueño para Georgia. Ya es una de las candidatas al título.