La venganza de los desterrados

Como la ley del ex se queda corta, esto pasa a ser la venganza de los desterrados. Más tajante, más cruel. Tal vez más peliculera, pero más real. Esteban Aparicio y Rafa Llorente, antaño de La Fábrica, han sido los verdugos de un Castilla que acabará la jornada, mínimo, antepenúltimo (Sanluqueño y Fuenlabrada se enfrentan a las 19.30h, así que uno le superará). El primero abandonó Valdebebas este verano y el segundo, en 2023. C’est fini, no iban a dar más. Abran paso a los siguientes y sigan sus carreras fuera. Pues han terminado en Alcorcón y, allí, firmando este KO. Es caprichoso el destino, pero, sobre todo, lo es el guionista de este deporte. Recuerdos de Vietnam en Santo Domingo. Eterna pesadilla madridista.

Y eso que no fue un mal partido del Castilla, pero sigue teniendo esas cosas del Castilla. Y así se resume. Mandó durante toda la primera media hora y perdonó más que el responsable de un confesionario. Primero Gonzalo, después Pol Fortuny y, por último, Ayesa voló para sacar una mano izquierda prodigiosa, otra vez a Pol. Melodía de lamentos: uy, uy y uy. Santo Domingo pitaba tímidamente a sus jugadores. Impaciente. Nervioso. Había runrún.

Un error de Ribes

Y en esas, gol. Rayco, el mejor de los locales con diferencia, puso un balón por encima de la defensa... y no hizo falta más. Con una zaga más endeble que una gelatina, es difícil en esta categoría. Esta vez, culpa de Ribes, al que Aparicio ganó la espalda, regateó a Fran González y marcó por bajo. La ley del ex: salió este verano del Castilla, tras disputar únicamente 387′ y no tener vistas de primer equipo. Por si alguien lo dudaba, celebró. Brazos en alto y puños cerrados.

El golazo de David Jiménez

Pero reaccionó el Castilla en el descanso, hallando el empate en un golazo de David Jiménez. ¿Qué quién tira las faltas en el Castilla? El lateral derecho. ¿Qué por qué? Porque tiene un guante. He aquí la prueba. Se la pidió, una desde la frontal y escorada para un zurdo. Daba igual. Tres pasos, suspiro y silbatazo. Pum. Golpeó, el balón sobrevoló sobre la barrera, lo rozó Ayesa y entró. Celebración comedida. Pero mensaje al primer equipo, pues es de los jugadores que se postulan para subir al primer equipo, ante la baja de Carvajal. Él, Loren o Fortea.

Y una obra de arte

A partir de ahí, volvió a mandar el filial. Tiránico por momentos. Creció el murmullo en Santo Domingo y atisbó la victoria el Castilla. Pero fue palo y zanahoria. Justo cuando más apretaba, golazo de Rafa Llorente. Es la jornada 9 y se puede asegurar, sin temor, que será uno de los mejores de la temporada. Así, para que se hagan una idea. Otro jugador que La Fábrica dejó salir (2023) y que ahora, hace sangre. Controló en la banda derecha, se perfiló hacia dentro y soltó un misil, con la zurda, al segundo palo. Imparable para Fran González. Y para cualquier mortal. Fiebre Amarilla en Alcorcón. Locura.

‘Amuleto’ maldito

El Castilla se echó al ataque con todo y tuvo una en el último minuto. Literal. En el 99′. Fue de Jéremy de León, quien jugaba prácticamente sus primeros minutos de la temporada (ha encadenado un esguince de grado alto y una sobrecarga) y del que Raúl no tiró hasta el 85′. Pero la tuvo. Centro desde la izquierda, control en el segundo palo y de repente, solo, completamente solo dentro del área pequeña. Era hasta insultante, desde el punto de vista futbolístico, que un delantero controlase así en un minuto como ese. Más de medio gol. Pues fusiló al segundo palo y la tiró fuera. Manos al rostro. No se lo creía. Nadie lo hacía. Tampoco en la grada local. Una santidad en Santo Domingo.

Silbatazo de Manrique Antequera y final. Ganó el Alcorcón, que escapa –al menos, provisionalmente– de los puestos de descenso y deja herido –aún más– al Castilla. Los de Raúl, incluso en una mañana sin una mala imagen, perdieron. La falta de consistencia en las áreas es pecado capital en la categoría de la picaresca. El filial terminará la jornada, mínimo, antepenúltimo. Va cuesta abajo y sin frenos. Si la alerta era amarilla, ya es naranja.

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