La RFEF dibuja su hoja de ruta para tener presidente y evitar la suspensión

La Federación ya trabaja para tener un nuevo presidente y creen que esta vez lograrán sortear todos los bloqueos legales. FIFA y UEFA dieron este miércoles un ultimátum en el Consejo Superior de Deportes: o Gobierno y RFEF colaboran para tener nuevo presidente a finales de año o España será suspendida, lo que puede llevar a la expulsión de los clubes españoles de competiciones europeas y que peligre la organización del Mundial 2030. En la RFEF han dibujado varios posibles calendarios electorales para cumplir la exigencia. Aunque el nombramiento de un nuevo presidente puede retrasarse hasta enero. FIFA y UEFA aceptarán esos tiempos siempre y cuando en diciembre el proceso electoral esté encauzado y casi finalizado. Lo que supondrá el final de más un año de inestabilidad en la Federación Española de Fútbol.

Hay optimismo en la Federación de que por una vez por todas puedan convocar un proceso electoral que no sea tumbado por impugnaciones y denuncias. El Gobierno se comprometió este miércoles ante FIFA y UEFA de colaborar para acabar con esta situación de inestabilidad y de ayudar en los pormenores legales. El Gobierno fue claro ante FIFA y UEFA este miércoles: María de los Ángeles García ‘Yaye’, presidenta en funciones tras la inhabilitación de Pedro Rocha, es la encargada de convocarlas. Ahora esperan que el TAD también lo confirme y así evitar la impugnación ya anunciada que hará MIguel Ángel Galán, presidente de la escuela de entrenadores. Quien lleva más de un año presentando impugnaciones y denuncias contra la Federación.

Con la duda resuelta de quién debe convocar las elecciones, el siguiente pasó será anunciarlo. Aunque la Federación maneja varios calendarios electorales, espera hacerlo en dos semanas. El día 16 se publicará el censo (que también será elevado al TAD al ser otro posible punto caliente de hipotéticas denuncias) y el 17 iniciar el proceso. Las evolución de las elecciones pueden desarrollarse entre 60 y 90 días. Dependiendo de varios factores como las impugnaciones presentadas, alegaciones y el número de candidatos que se presenten a la presidencia. La Federación, que esta vez sí siente el respaldo del Consejo Superior de Deportes para solventar cualquier duda jurídica tras el ultimátum de FIFA y UEFA, no quiere cometer ningún error en el proceso que lo anule. Esto puede llevar a no llegar a tiempo al 11 de diciembre con un presidente electo. Fecha importante porque se celebra el Congreso de la FIFA que votará a España, Portugal y Marruecos como organizadores del Mundial 2030. FIFA y UEFA aceptarán que todavía no haya presidente en esa fecha siempre y cuando la Federación no se encuentre en la situación actual de bloqueo. Si el proceso electoral está encauzado por entonces, no se prevé ninguna sorpresa en la votación de la candidatura del Mundial 2030 ni que la UEFA sanciones con la expulsión de los clubes de las competiciones europeas.

Según los cálculos de la Federación, para el 11 de diciembre se espera tener ya una nueva Asamblea. Un paso que FIFA y UEFA tomarán con un síntoma de que la Federación sale de la inestabilidad. La elección de nuevo presidente puede ser algo más complejo. Si solo hay un candidato, este podría ser nombrado a finales de diciembre. Aunque si hay más de uno y se debe celebrar una votación, se podría retrasar hasta mediados de enero. Un mal menor, ya que de una vez por todas la Federación dejará atrás un año de inestabilidad, itinerancia y conflictos políticos. El contundente discurso de FIFA y UEFA en el CSD parece que ha supuesto un punto de inflexión para que la RFEF pueda dejar atrás esta crisis.

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