TERRITORIALES
La policía registra la sede de la Federación Catalana de Fútbol
Los Mossos d’Esquadra entraron en la sede e impidieron el acceso de los trabajadores. La actuación tiene que ver con las últimas elecciones.
A las ocho de la mañana, una dotación de los Mossos d’Esquadra se ha presentado en la sede de la Federación Catalana de Fútbol para proceder a un registro de la sede situada en la calle Sicilia de Barcelona.
La policía autonómica evitó que los trabajadores de la Federación se incorporaran a sus puestos mientras duraba el registro. Los agentes, que actuaban como policía judicial, tomaron los datos a los trabajadores a medida que iban llegando a la sede, les identificaron y les pidieron que estuvieran localizables.
El registro parece que tiene que ver con las presuntas irregularidades en el último proceso electoral, que se tuvieron que repetir al ser impugnadas después del triunfo de Joan Soteras, al que se acusa de presunto fraude. No obstante, no se saben más detalles porque el caso está bajo secreto de sumario.
El candidato perdedor de los comicios, Juanjo Isern, denunció el proceso al considerar que había sido ilegal. Las elecciones se impugnaron el 22 de mayo de 2022 y se tuvieron que repetir en abril del 2023 y de nuevo fueron impugnadas por Isern. En ambos casos, Soteras resultó vencedor.
En aquel momento, Soteras se defendió diciendo que el proceso había sido legal, pero que el candidato Isern impugnaba el proceso “para conseguir conseguir información privilegiada para su uso personal en el caso Soule”. El Caso Soule es el que le costó el cargo a Ángel María Villar como presidente de la Federación Española de Fútbol.
Por su parte, Juanjo Isern argumentaba que las elecciones debían de declararse nulas al haberse roto “la mayoría de los principios del derecho electoral, como el principio democrático, de transparencia, de neutralidad, de igualdad entre candidatos, de representatividad y de seguridad jurídica”. El candidato reclamaba que se declarara “inelegible” la candidatura de Soteras.