Julen Monreal, un gol postrero que frustró el ascenso del Amorebieta
El central del SD Logroñés amargó a los vascos, que ya festejaban el regreso a Segunda División, aunque pueden lograrlo la próxima semana en casa
Todo estaba preparado para el ascenso del Amorebieta en Logroño. Los de Haritz Mujika ganaban por 0-1 (gol de Ewan Urain, canterano del Athletic de Bilbao) al SD Logroñés y el Eldense no pasaba del empate sin goles en Soria. Los guipuzcoanos ya festejaban el regreso a Segunda División tras un año en Primera RFEF. Las redacciones de los periódicos ya preparaban los artículos para dar la noticia. Pero todo se frustró a última hora: Julen Monreal anotó el tanto del empate en el minuto 92 en Las Gaunas. Desilusión vasca y nueva esperanza para el Eldense. No obstante, el Amorebieta podría celebrar el ascenso el próximo fin de semana como local si vence al Nástic de Tarragona (sábado, 19:30 horas).
Julen Monreal (Pamplona, 1994) se ha convertido en el protagonista de la antepenúltima jornada de Primera RFEF. Villano para el Amorebieta; héroe para el Eldense, que sigue soñando con el ascenso directo, y para su equipo, el SD Logroñés, que sigue aspirando al playoff. Es cierto que lo tiene complicado (está a cinco puntos con seis por disputarse), pero cosas más extrañas se han visto. Y más en fútbol. Todavía le tocará pelear contra un histórico (Real Murcia) y tres filiales (Barça Athletic, Real Sociedad B y Osasuna Promesas) por la promoción.
A sus 29 años, Monreal ha desarrollado toda su trayectoria entre Segunda B y la actual Primera RFEF. A pesar de ser pamplonica, nunca pasó por la disciplina de Osasuna, sino que se formó en el modesto CD Pamplona en Tercera División. Su siguiente destino ya sería la categoría de bronce. La primera parada fue el Peña Sport (15-16) antes de continuar en el Mutilvera (16-17), Ontinyent (17-19), La Nucía (19-20), Llagostera-Costa Brava (20-22) y SD Logroñés (22-23). Ocho temporadas, con 190 encuentros y ocho goles, a media de uno por temporada. Una carrera deportiva digna pese a no haber pisado nunca el fútbol profesional. Sin embargo, le ha servido para hacerse un nombre entre los clubes modestos.
Julen Monreal vivió una situación curiosa militando en el Llagostera. El equipo catalán se fundó en 1947 en la pequeña localidad gerundense. Su denominación original fue Unión Deportiva Llagostera y así se conoció durante 74 años. Incluso logró un ascenso a Segunda con ese nombre en la temporada 13-14. Permaneció dos campañas en el segundo nivel nacional, todo un hito. A partir de entonces, sufrió una profunda crisis económica y dos cambios de denominación (Unió Esportiva Costa Brava en 2021 y Club de Fútbol Badalona Futur en 2022). Pues bien. Monreal vivió el primer cambio de nombre, que coincidió con el ascenso a la recién creada Primera RFEF. Por el contrario, ha experimentado cuatro descensos (Peña Sport, Mutilvera, Ontinyent y Costa Brava).
Ayer, el altísimo central navarro (1,94) marcó un gol que despertó emociones encontradas en Amorebieta y en Elda. Desilusión para los primeros, esperanza para los segundos. Pero a Julen solo le importaba lo suyo: hacer bien su trabajo al servicio del SD Logroñés.