Juanpa e Iturbe aguan la fiesta
Los dos guardametas salen vencedores en un duelo que acaba sin goles, pero con ocasiones para hacerlos. El Atleti tuvo dos mano a mano.
No siempre hay que fiarse del resultado. Un 0-0 no tiene por qué implicar un partido aburrido, y a buena muestra la segunda mitad entre Mérida y Atleti B. Solo Juanpa Palomares e Iturbe, porteros de ambos equipos, y la falta de contundencia rojiblanca impidieron que se rompiese un marcador que no deja a nadie contento, pero especialmente a la parroquia local que despidió entre pitos a sus futbolistas.
El Atleti de Tevenet también se marcha con un mal sabor de boca. Llegaba con ganas de resarcirse de la derrota por la mínima contra el Antequera y fue capaz de apretar en los últimos minutos, controlar el partido y tener dos ocasiones de oro para matar, pero ni Adrián Niño ni Guerrero fueron capaces de salir vencedores en el mano a mano.
El primero en una gran transición rojiblanca, sacando el balón jugado desde su área para mover al Mérida de un lado al otro hasta encontrar el desmarque del delantero, que remató desviado ante Juanpa. Y Guerrero tras la fantástica jugada personal de El Jebari, imparable en la conducción ni aún cuando le intentar hacer falta, y que encontró el desmarque del capitán, pero se topó con la pierna del guardameta.
RESUMEN
Atlético de Madrid B: Iturbe, Boñar, Marco, Mariano, Pablo Pérez (Joel Arumi 73’), Nabil T. (Diego Bri 83’), Gismera, S. Guerrero (Cala 68’), Ndiaye, El Jebari (Mestanza 83’) y Niño (Abde 68’).
Arbitro:
Fernández Buergo, quien amonestó a los locales Acosta (20’), Raúl Beneit (50’), Eliseo (74’), Prada (86’), Ismael (86’) y Padilla (89’) y los rojiblancos Gismera (82’) y Mestanza (90+4’).
Entre medias había sido Busi quien podía haber hecho el gol del Mérida, pero se estrelló con una mano salvadora de Iturbe cuando ya parecía batido. Un partido de ida y vuelta con ritmo, donde Tevenet intentó darle otra marcha con los cambios la mayoría de ellos con clara vocación ofensiva, un Cala siempre desequilibrante, Abde en punta también con Juanpa Palomares como gran pesadilla, Diego Bri o Mestanza, pero no hubo forma de hincarle el diente al guardameta local. El Mérida tampoco le encontró los huecos a un destacado Boñar, especialmente en la primera mitad, Marco y Mariano y la constante colaboración de Gismera.
El Mérida no escapa del abismo de los puestos de abajo y el Atlético se estanca en la pegada, con su segundo partido consecutivo a cero. Sin embargo, ambos entrenadores no se van de vacío. Al conjunto extremeño se le queda corta su producción ofensiva, pero tiene un portero que gana puntos. Y los rojiblancos siguen compitiendo en cada campo que pisan, generando ocasiones, mostrando personalidad y variantes, pero sin gol no hay paraíso. Un empate que no hace feliz a nadie.