El Yeclano y el Atleti B se hacen regalos y Niño lo celebra

El Atlético B volvió a ser ese equipo poliédrico y, cuando la tarde se ponía gris, rescató un punto vital. Si en el Cerro se está acostumbrando a vencer y muestra madurez, en Yecla fue, a la vez, un bloque sin ideas ni chispa y otro con vocación ofensiva y ganas de imponer su calidad. El contraste fue total. En la primera parte no supo ni dónde estaba, a merced de un notable Yeclano; en la segunda arrojó energía, fútbol y ocasiones para acabar salvándose en el momento menos esperado. La fiesta de La Constitución se quedó a medias, Niño sigue con su racha de goles —cuatro en tres jornadas— y el filial se sostiene en ese vagón de cabeza.

A Torres le faltaban tres de sus centrocampistas (Serrano, Joaquín y Gismera, sancionados), lo que ya complicaba el plan. El Yeclano, instalado en un rocoso 4-4-2, preparó una telaraña en la que se enredó el filial desde que empezó el encuentro. Los rojiblancos no sabían por dónde entrar. Lo intentaron sobre todo por el centro, y perdieron prácticamente todos los balones. De vez en cuando por las bandas y no hubo ni desborde ni amenaza.

Mientras, los locales se limitaban a morder para robar o, a veces, simplemente esperar el fallo. En el minuto 14, Iturbe jugó en corto para Dani Martínez, que se hizo un lío con la pelota y se la dejó a Juanje, que aprovechó al regalo y, desde la frontal, batió al internacional Sub-21 con un disparo sutil y raso, casi un pase a la red. Un error en la salida de balón que costó carísimo al filial.

El Atleti B no chutó a puerta hasta pasada la media hora, un disparo manso de David Muñoz. Para entonces, el Yeclano, con su plan sencillo y eficaz, iba acumulando llegadas al área. No tanto ocasiones claras, pero se mascaba más el 2-0 que el 1-1. En clave rojiblanca, lo más destacable fue su original jugada de estrategia, con más de medio equipo esperando en el vértice del área para cargar en el córner botado por Rayane. La teoría parecía buena, la práctica salió mal.

La charla de Torres en el descanso funcionó y la segunda parte ya fue otra cosa, al menos en el arranque. El Atleti B sale convencido, metiéndole velocidad y chispa al juego. En cinco minutos tuvo tres llegadas peligrosas: Julio Díaz, que chutó arriba; Niño, a las manos; y Rayane, una rosca con la derecha al travesaño. El escenario, ya sí, se había trasladado al campo del Yeclano.

Los cambios terminaron de acercar el choque más hacia la portería de Iván que a la de Iturbe, aunque en verdad ninguno de los dos sufrían demasiado. Y llegó el otro accidente de la tarde. Si el 1-0 había llegado con un obsequio del Atleti B, el Yeclano fue tremendamente generoso y se lo devolvió. En un envío en largo del filial, Gabri le dio una patada al aire en su intento de despejar y dejó a Niño solo ante el portero. El pichichi rojiblanco no perdonó y definió por arriba. Y el equipo de Torres se vio entonces incluso con opciones de llevarse el partido. Un arreón sin demasiado ímpetu que no movió ya el 1-1. El Yeclano sigue fuera del descanso y el Atleti, en playoff.

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