El Villarrobledo denuncia impagos y caos en la directiva: “Nadie es capaz de solucionarlo”

Este viernes, la AFE (Asociación de Futbolistas Españoles) ha publicado un un comunicado en nombre de la plantilla y el cuerpo técnico del Villarrobledo, en el que se denuncian los impagos que sufren y asegurar sentirse indefensos y desamparados ante la situación de un club que milita en el grupo 18 de la Tercera RFEF.

Los jugadores y cuerpo técnico han hecho pública su situación tras meses de incertidumbre económica y problemas internos en la directiva. En un comunicado contundente, exigen una solución inmediata para garantizar unas condiciones de trabajo dignas. Desde el inicio de la temporada, los jugadores confiaron en el proyecto de la directiva, que aseguró tener el presupuesto cubierto. Sin embargo, según denuncian, “a día 10 de enero ya se nos adeudan dos mensualidades (noviembre y diciembre) y, sobre todo, sin expectativas de poder cobrar nada a corto plazo”. Además, señalan que a miembros del cuerpo técnico de la pasada temporada también se les deben las dos últimas mensualidades, acumulando así cuatro meses de impagos.

La sorpresa llegó en octubre con el anuncio de un nuevo grupo en la directiva para mejorar la situación económica. Los jugadores describen cómo esa misma mensualidad se pagó en tres plazos, “recibiendo el último pago a finales de noviembre”. Intentaron reunirse con el presidente para conocer la situación real, pero sus solicitudes fueron rechazadas hasta el 20 de diciembre, cuando en una reunión se les informó que “el club no tenía dinero” y se pidió aguantar hasta el 30 de diciembre. Propusieron que los directivos adelantaran al menos media mensualidad para afrontar la Navidad, pero “esto nunca sucedió”.

Llegado el 30 de diciembre, “no solamente no llegó ese dinero, sino que ni recibimos respuesta”. A pesar de la precariedad, el equipo volvió a los entrenamientos el 7 de enero. Ese mismo día, el presidente les comunicó que las opciones económicas habían fracasado y que abandonaba el club, dejando la gestión en manos del grupo de octubre, quienes plantearon medidas drásticas: “dar de baja a cinco jugadores y dos miembros del cuerpo técnico”, bajar los sueldos de los que se quedaran y trabajar sin recursos inmediatos.

Los jugadores rechazaron esta propuesta, prefiriendo seguir con la directiva original y pedir ayuda públicamente para encontrar a alguien dispuesto a invertir en el club. Sin embargo, el 8 de enero, se enteraron de que el vicepresidente, presente en las reuniones, había cambiado de postura, permitiendo la entrada del nuevo grupo directivo. Una hora después, el aún presidente comunicó otra decisión contradictoria: que este grupo ya no quería entrar y que “había encontrado una solución, sin darnos más explicaciones”.

Finalmente, el 9 de enero, la directiva decidió seguir adelante con el plan original, pero más tarde volvieron a retractarse, generando una indignación que los jugadores califican de “límite”. Por ello, hacen un llamamiento público: “Queremos que se sepa lo que estamos viviendo en el vestuario día tras día, y con el único fin de que alguien pueda aportar una solución a este gran problema que nadie de dentro ha demostrado ser capaz de solucionar”.

Los jugadores, que actualmente están empatados a puntos con el equipo que marca el playoff de ascenso, aseguran sentirse capacitados para competir por esos puestos, pero exigen “unas condiciones de trabajo dignas” para poder hacerlo.

El comunicado concluye agradeciendo el apoyo de AFE (Asociación de Futbolistas Españoles) y apelando a la afición: “Todos hemos de ser conscientes de la crítica situación del club y necesitamos de todos y todas para salvar al C.P. Villarrobledo”.

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