El Real Valladolid Promesas ya es equipo de playoff
El filial blanquivioleta dejó sellado matemáticamente el objetivo a una jornada para el final de la Segunda RFEF.
El Real Valladolid Promesas ya es equipo de playoff. El filial blanquivioleta disputará la promoción de ascenso a la Primera RFEF después de dejar sellada la clasificación con una jornada de adelanto respecto al final de la Segunda RFEF. Para ello, necesitó depender de los resultados de terceros; concretamente, de las derrotas del Zamora y del Real Oviedo Vetusta, ya que fue incapaz de ganar al Ourense.
El filial blanquivioleta se puso por delante en el marcador en dos ocasiones, ambas en los primeros 15 minutos, en los que Chuki golpeó dos veces. En la primera, a los dos minutos, cazó un rechazo del portero en el área a respuesta de un disparo de Pozo. Después de recibir el empate un par de minutos más tarde, de nuevo el talentoso mediapunta vio puerta, con una buena combinación en tres cuartos que culminó con un latigazo a la escuadra.
El buen inicio, a pesar del gol encajado, se constató con las ocasiones de Cédric y de Pozo, en un mano a mano y en una falta directa, ambas, repelidas por Marqueta, portero ourensano. Sin embargo, el cuadro gallego, que necesitaba puntuar para depender de sí mismo en la última jornada en su intento por evitar el descenso, se mantuvo vivo en el partido, primero, sostenido por su cancerbero, y después, por la rebeldía propia del necesitado.
En el segundo tiempo, el Promesas no encontró cadencia en su juego, recordando por momentos a lo sucedido en el anterior partido en casa, ante el Compostela, que levantó dos goles adversos en Los Anexos. Así, el Ourense aculó en algún tramo a los pupilos de Julio Baptista, que encontraron apenas alguna tímida salida con Pozo. Todo hasta que al final, Amin, con el tiempo cumplido, hizo el empate y provocó el impás propio de quien tuvo que esperar a saber qué sucedía en otros campos.
Como quiera que el Zamora y el Real Oviedo Vetusta perdían en sus respectivas salidas, a Avilés y a Luanco, y bastaba con que ambos empataran también, todo parecía hecho. Así quedó al confirmarse sus respectivas derrotas, consiguiendo el filial, de este modo, un objetivo clasificatorio complementario al promulgado de la formación. El último partido, en casa del Langreo, será el que decida la posición final. Allí el Promesas defenderá la tercera posición ante un rival que todavía podría caer al playout.
“La temporada de los chicos es increíble”
Conseguida la clasificación, Julio Baptista, entrenador del filial, atendió a los medios de comunicación, ante los que valoró la temporada del equipo como “increíble a nivel de números y de formación”. No ocultó el técnico que le habría gustado mantener un mayor “nivel de juego” en algunos partidos y, sobre todo, “ganar los partidos de casa” que se le han resistido recientemente. Sin embargo, recordó que el Promesas llega a la última fecha encadenando ocho partidos sin perder.
“Cuando se inició el curso, nosotros no teníamos planteado el objetivo del playoff; el objetivo era dar la mejor versión del Real Valladolid y ser siempre reconocibles, y lo hemos sido en muchos momentos de la competición”, argumentó Baptista, contento de que el equipo haya dejado escapar tan pocos puntos en la segunda vuelta, en la que solo han perdido ante Avilés y Arenteiro, los dos primeros. “El equipo es muy joven, pero ha tenido constancia. El crecimiento es acorde al trabajo que hay detrás”, aseveró el técnico.