El Deportivo e Idiakez se la juegan lejos de Riazor
El equipo coruñés disputará tres de sus próximos cuatro partidos a domicilio y se las verá con los tres primeros: Ponferradina, Nàstic y Real Unión
El Deportivo vive un auténtico terremoto después de firmar su peor arranque en Primera Federación. Los coruñeses solo han ganado un partido en siete jornadas, están en puntos de descenso (7) y el liderato a nada menos que diez de distancia. Una situación que había encendido las alarmas y que se ha disparado tras enlazar dos derrotas consecutivas, a cada cual más dura. La primera en Fuenlabrada, donde ganaba 0-1 en el minuto 91 y dejó volar los tres puntos en el descuento de forma incomprensible (2-1). La segunda este domingo ante el filial del Celta (0-1) en su peor partido de la temporada y con el agravante que se produjo en Riazor ante 25.000 aficionados.
En esta delicada situación el conjunto coruñés afronta un mes de competición que puede hacer saltar todo por los aires, pero que también es una excelente oportunidad para resucitar. Los blanquiazules se van a enfrentar en las cuatro próximas jornadas ante los tres primeros clasificados (Ponferradina, Nàstic y Real Unión) que pueden hacerles crecer en la clasificación o bien aumentar exponencialmente una crisis que nadie podía imaginar a comienzos de temporada.
El reto para el Depor será doble porque tres de las cuatro próximas jornadas las disputará a domicilio. Este difícil camino comenzará este domingo con la visita al Toralín para enfrentarse a la Ponferradina (15 puntos), para jugar el siguiente sábado en la Nova Creu Alta ante un Sabadell que lleva los mismos puntos que el Deportivo, siete. Después los blanquiazules jugarán su único partido como local del próximo mes ante el Nàstic, actual líder con 17 puntos. El periplo culminará visitando al Real Unión (15 puntos), la sorpresa de la temporada y equipo con muy malos recuerdos para los coruñeses.
Muchos factores en la coctelera
Como no podía ser de otra forma, el nefasto inicio de liga del Deportivo señala directamente a Imanol Idiakez como principal responsable del equipo. Las cosas no han empezado nada bien para el técnico vasco, pero Fernando Soriano mantiene la confianza en él. En la balanza se introducen muchos factores, ya que la lectura no se limita a los puntos que ha sumado el equipo. Uno de ellos son las lesiones, empezando por la grave de Barbero, el ‘9′ fichado para suplir a Quiles; o la de un Yeremay que había arrancado la temporada a un nivel excepcional convertido en el auténtico líder del equipo.
En el club también hay enfado con varias decisiones arbitrales, todas ellas en contra y que han privado al equipo coruñés de varios puntos. Otro aspecto que se valora es la presencia de la cantera, que al fin parece real. Yeremay, David Mella o Barcia, son tres claros ejemplos, a los que se está sumando Ochoa. Nadie esconde que el equipo va de más a menos y que hay decisiones técnicas cuestionables, pero el resto de elementos también entra en la coctelera para seguir manteniendo la confianza. La situación de Idiakez es delicada y los próximos partidos dictaminarán si levanta el vuelo junto al equipo o se vuelve insostenible.
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