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DEPORTIVO

El Depor no da con la tecla con sus fichajes ‘galácticos’ en Primera RFEF

Ibai se acaba de retirar del fútbol y Raúl Carnero no termina de arrancar. En 2020 fueron Beauvue, Borges, Uche, Rolan y Keko; se salvó Miku.

Beauvue no marca desde la primera jornada
Jesus Sancho (Sanchofoto)

Los aficionados blanquiazules todavía se están frotando los ojos con todo lo que ha sucedido con Ibai Gómez. El extremo vasco, tal y como avanzó AS, anunció ayer martes que se retiraba del fútbol cuando solo se han disputado once jornadas de liga. Con 226 partidos en Primera y 32 años, su fichaje levantó una enorme expectación que ha terminado en decepción. Ibai firmó con la intención de relanzar su carrera y el Deportivo, con la de dar un salto de calidad en su plantilla. Su clase no llegó a aparecer y se marcha en un acto de honradez tras jugar únicamente dos partidos de titular y acumular tan solo 184 minutos de blanquiazul. El otro jugador que ha llegado con un extenso currículo en Primera, Raúl Carnero (86 partidos), es titular indiscutible pero no termina de explotar, sobre todo en su aportación ofensiva a pesar de lograr el gol de la victoria en Mérida (0-1) en la segunda jornada.

La pasada temporada, la primera de Carlos Rosende y la nueva dirección deportiva, se apostó por un perfil casi puro de Segunda B y sin ‘galácticos’. El que más se aproximaba a este tipo de jugador era Ian Mackay, que regresaba al Deportivo después de ser elegido el mejor portero de Segunda. Su rendimiento fue muy bueno y esta misma semana, justo tras su lesión, también fue señalado como mejor meta de Primera RFEF. El otro futbolista que se acercaba a este perfil fue Álvaro Rey. Llegado en el mercado invernal tras jugar en Bolivia, tardó en coger la forma y luego lo castigaron las lesiones. Su impacto en el equipo fue casi nulo.

La temporada en la que el Deportivo miró más al mercado de jugadores de Primera fue en la 2020-2021 tras el descenso y con Richard Barral al frente de la dirección deportiva. Uno de los más llamativos fue Claudio Beauvue, que en enero abandonó a un Celta en Primera para jugar en Segunda. Ese año solo marcó dos goles en el famoso partido del ‘paripé’ ante el Fuenlabrada ya con el Depor descendido. En Segunda B marcó en la primera jornada su único tanto de la temporada. Beauvue llegaba a A Coruña con más de cien partidos en la Ligue 1 francesa y otros 51 en Primera.

Ibai, en su despedida del Deportivo.
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Despedida Ibai Gómez Deportivo de La Coruña.Jesus Sancho (Sanchofoto)Diario as

La lista de ‘galácticos’ de aquella temporada fue mucho más larga, con tres jugadores más que se quedaron tras el descenso a Segunda B (Bóveda, Keko y Uche Agbo) y dos fichajes (Borges y Miku). Bóveda (94 partidos en Primera) vivió de blanquiazul los descensos a Segunda y a Segunda B. El lateral vasco cumplió, pero no marcó diferencias. Keko (112 partidos) tuvo momentos de liderazgo, aunque cortos, mientras que Uche nunca se adaptó a la categoría de bronce y tuvo muchísimos problemas de lesiones.

El buque insignia era Celso Borges, que en poco más de una semana estará jugando el Mundial de Qatar con Costa Rica. El tico, que estaba en fútbol turco, regresaba como capitán a un Depor con el que había jugado 107 partidos en Primera. A pesar de sus indudables cualidades y calidad, tampoco se adaptó y nunca fue diferencial. Junto a él aterrizó un Miku al que le costó muchísimo coger la forma. No marcó hasta la jornada 17ª, pero de ahí hasta final firmó siete goles en los últimos ocho partidos. En la 2021-2022 realizó una gran primera vuelta junto a Quiles, logrando nueve goles. En la segunda bajó el rendimiento, las lesiones volvieron a castigarlo y solo hizo tres tantos más.

El caso Rolan y el ERE

A esta extensa nómina de jugadores con un importante pasado en Primera se unió el último día de mercado de 2020 el nombre más inesperado: Diego Rolan. El delantero uruguayo, fichado en 2017 y que no había podido jugar en el Deportivo por su elevado salario tras el descenso a Segunda dos temporadas antes, se encontró sin equipo y acabó en Abegondo jugando en Segunda B. Su caso se resolvió en el mercado invernal y fue traspasado al FC Juárez. Muchos de estos jugadores, con elevados salarios, tenían contratos de larga duración, lo que se convirtió en una enorme losa económica al no lograrse el ascenso. El problema, ya con Abanca al mando y con Antonio Couceiro en la presidencia, derivó en un ERE en el verano de 2021 que implicó la salida del club de todos aquellos ‘galácticos’.