VII TORNEO INTERNACIONAL LALIGA PROMISES
El Atleti sigue mandando
Eric y Hugo permiten a los rojiblancos revalidar el título y prorrogar su hegemonía ante un gran Espanyol. Cerezo llamó a sus jugadores para desearles suerte.
Nunca dejó de creer el Atlético y revalidó su corona en Orlando. Allí los rojiblancos se transforman, como si se contagiaran de la magia de Disney y sus films. Su presidente, Enrique Cerezo, quiso ser partícipe de esta película y llamó a sus chicos durante el calentamiento para darles ánimos. Surtió efecto.
El Espanyol desplegó desde el principio una de sus principales cualidades, la seguridad defensiva. Los rojiblancos trataban de encontrar la grieta por la que colarse con un Lucas especialmente activo, pero les estaba costando. García lo intentó con una lejana falta que terminó en las manoplas de Joan. A la salida de un córner, Eric marcó el 0-1 desde el punto de penalti. Sin duda, el mejor regalo para su cumpleaños. El gol provocó el delirio de la grada, donde Ismael, Raúl, Luisma y Daniel, los familiares colchoneros, transportaron a los allí presentes hasta el Metropolitano con sus cánticos.
Los pericos no se daban por vencidos y buscaban el empate. Gerard Solsona tuvo el 1-1, pero el balón se perdió demasiado alto. Es más, el descanso le dio más gasolina para salir a morder a los madrileños, cuya defensa salvó bajo palos una arremetida espanyolista. Se habían intercambiado los papeles. El Espanyol lanzaba los golpes y el Atlético los esquivaba, hasta que los rojiblancos lograron zafarse y salir de su esquina en busca de la sentencia.
Joan detuvo una doble ocasión de los de Iván Trapero en un balón parado y Daehan Lee acarició la igualada, con una pelota que despejó Diego. Ahora el muro era rojiblanco. También el sufrimiento. Y cuando más negro parecía todo, el Atlético creyó y Hugo apareció para poner el 0-2. Los jugadores rojiblancos fueron los superhéroes en Disney. Ni los de Marvel, ni Harry Potter, ni los Transformers. Nadie más. Ellos, los colchoneros, siguen mandando en Orlando...
Un trallazo de Fabián deja al Betis tercero
El Betis tuvo recompensa a su gran torneo y se colgó la medalla de bronce en esta séptima edición de la Promises, gracias a un trallazo de Fabián. El equipo blanco se mostró más activo durante la primera parte. Sin embargo, no consiguió materializar sus ocasiones. David tuvo un disparo que se marchó demasiado cruzado y Thiago a punto estuvo de abrir el marcador, pero se topó con los guantes del guardameta bético, Iker Naranjo. El descanso espoleó a los andaluces, tanto es así que se impusieron gracias al impresionante disparo de Fabián. Los madrileños buscaron la remontada, pero se toparon con un Betis que acarició la sentencia en el último minuto.