El árbitro alemán Patrick Ittrich sugiere cambios en las reglas
Entre sus propuestas, tres minutos fuera del campo en caso de lesión, 10 minutos de reflexión por gritar al árbitro y la expulsión en caso de que los jugadores se agolpen entorno a él.
Por si fuera poca la polémica que despierta normalmente el arbitraje, Patrick Ittrich, colegiado del Mümmelmannsberger SV de la Asociación de Fútbol de Hamburgo, ha sorprendido por sus propuestas. El alemán de 44 años defiende sancionar con un tiro a 17 metros de la portería cualquier falta táctica que se produzca en el mediocampo, con la intención de reducir este tipo de interrupciones del juego.
También es partidario de apartar del campo tres minutos a cualquier futbolista que ruede por el suelo tres veces durante un partido y necesite un doctor. “¿Cuánto tardaría el jugador en levantarse, de esta forma?”, se pregunta. Asimismo, plantea hacer algo parecido a lo que ya se lleva a cabo en balonmano: sacar del verde durante diez minutos a todo jugador que grite o insulte al árbitro, a fin de que se relaje y vuelva al terreno de juego pasado el tiempo establecido. Eso sí, tras efectuar un breve calentamiento. El alemán propone la bicicleta para entrar en calor.
Con todo, su medida más llamativa es expulsar a todos aquellos futbolistas que se acerquen al trencilla, en grupo, con la intención de presionarle. “¿Cómo puede ser que a un árbitro le rodeen diez jugadores? En mi opinión, boom, boom, boom, tres tarjetas rojas. A jugar siete contra diez ahora. Eso estaría bien para mí”, apunta.