XXX LALIGA PROMISES
Dos gemelos surcoreanos reman en el ‘barco’ del Espanyol
El técnico Marc Olivet procede de familia de pescadores y utiliza muchos símiles en sus charlas con los niños. Minguk Lee y Daehan Lee son claves.
Camina con paso firme el Espanyol hacia la fase final de LaLiga Promises. El conjunto perico sólo necesitó dos partidos para colarse en cuartos de final. Ahora, sueñan con llegar lo más lejos posible y pelear por un título que se les resiste desde 2011. El secreto de este Espanyol es que su vestuario es un barco en el que todos reman contra viento y marea. No es un tópico, es la pura realidad. La vida de Marc Olivet, su entrenador.
El técnico perico procede de familia de pescadores. Su padre lleva una vida sacrificada en la que madruga cada día desde hace décadas para vivir de la pesca de arrastre. Olivet lo tiene claro. Desde niño, ha mamado lo que supone cada día embarcarse. Por eso, en sus charlas previas y en su día a día utiliza muchos símiles pesqueros. “Somos como un barco. Cuando las cosas van bien y hay viento a favor, todo es fácil. Pero cuando las cosas no van del todo bien, hay que remar”, asegura Olivet a AS. Su vestuario, repleto de chavales, ha captado el mensaje a la primera. Cuando se gana, los emoticonos de ‘remar’ y la ‘piña’ adornan las fotos de celebración. “Aquí somos una familia. Utilizo comparaciones pesqueras para que también entiendan el sacrificio que supone cada día dormir poco y salir a pescar”, matiza Olivet.
El Espanyol está liderado en esta Promises por un bloque compacto y alegre en el que dos gemelos surcoreanos tiran del carro. Minguk Lee y Daehan Lee le ponen la nota exótica a los pericos. Ambos llevan en la escuela desde hace tiempo aunque uno de ellos tuvo que salir para regresar años más tarde. “Están muy integrados. Tienen inculcada esa filosofía de trabajo y autoexigencia. Muchas veces tengo que decirles que no pasa nada por fallar”, asegura su entrenador.
En el cuadro perico también sobresale Arnau Skufca, su dorsal ‘3′. Es uno de los jefes de la defensa del Espanyol. Pero a Arnau se le da tan bien el fútbol como el tenis. Cuando no está con el cuadro perico, compite con la raqueta. Hasta está federado y ya ha ganado algún título en Cataluña. Sabe que tarde o temprano tendrá que elegir, pero de momento le da para todo. Así es el ‘barco’ del Espanyol.