De La Torre a Alfafar, 12 meses y 15 millones de reconstrucción
Salvador Gomar, presidente de la FFCV: “El fútbol ha salvado al fútbol en Valencia”. Muchos de los campos afectados por la tragedia ya han sido reconstruidos.


El Terrer de Paiporta se ubica a tiro de piedra del Barranco del Poyo y su terreno de juego está varios metros por debajo del nivel de su muro de contención. Lo qué pasó cuando se desbordó queda claro. “Esto era un lago de fango, solo veías coches flotando; es un milagro que hayamos vuelto a jugar aquí solo un año después”, comenta Daniel Sánchez, director deportivo del E1 Paiporta. Lo mismo piensan en Alfafar, cuyo campo se transformó en una escombrera con toneladas de residuos y que hace solo unos días se reinauguró.

El plan. La Federación Valenciana, con su presidente Salvador Gomar a la cabeza, ideó desde el día siguiente de la dana un plan de reconstrucción. Contó con la implicación de Luis Cervera (director general de deportes) y de la Fundación Trinidad Alfonso. El fotógrafo de la FFCV Carlos Ortí recorrió en los días posteriores a la tragedia los campos de las zonas afectadas para registrar los desperfectos y comenzó una rueda de llamadas con los clubes para hacer balance de sus necesidades. 15 campos quedaron completamente destruidos y 75 dañados, además de material perdido (balones, equipaciones...) y familias sin vehículo para desplazarse. Se ajustaron los horarios en los campos ‘sanos’ para entrenamientos y partidos, Trinidad Alfonso sufragó material y autobuses (2M€) y la Federación, los arbitrajes. Así se pudo reanudar la competición a las pocas semanas.
Inversión. El campo de La Torre fue el primero de los 15 arrasados en reinaugurarse. Después el fútbol fue regresando a las Encrucijadas de Aldaia, Sedaví, Benetússer, Carlet, Jaume Ortí de Aldaia, Mundial 82 de Catarroja... El Villarreal CF (2M€) ha costeado la reforma de siete campos; el Valencia CF y LaLiga (1,2m€), cuatro; la FFCV pagó El Terrer y Osasuna (0,4M€) ayudó en Massanassa.
Gomar: “El fútbol ha salvado al fútbol”
El presidente de la Federación de Fútbol de la Comunitat Valenciana atiende a AS en su despacho. A Salvador Gomar se le nota preocupado por los tres campos que todavía están por reformarse, aunque satisfecho del trabajo realizado hasta la fecha. El fútbol valenciano se ha levantado del golpe que supuso el devastador paso de la dana hace un año e inclusive confiesa que está “hoy” más fuerte. “Tenemos más fichas federativas... aunque hay clubes que han perdido jugadores, aunque estoy seguro que en un año todos volverán a su sitio”.
Minuto y resultado de la reconstrucción.
Pues para lo que fue la DANA… el fútbol valenciano está sano. Las competiciones regresaron al 100% y solo quedan tres campos por reformar: Paiporta, Algemesí y Bugarra. Digo solo por lo mucho que había que hacer, aunque no pararemos hasta que estén todos en funcionamiento.
¿A cuánto asciende lo invertido?
Así por encima… unos 15 millones hasta la fecha y calculamos que llegaremos a los 20 millones. Un gran porcentaje ha sido capital privado, de entidades como la Fundación Trinidad Alfonso y de clubes como el Villarreal, Valencia, Levante, Osasuna y LaLiga. Y de los fondos de la Federación Valenciana. Al final la frase de el fútbol salva al fútbol es real.

¿Cómo recuerda aquellos primeros días?
Había desesperanza, de no saber qué pasaría. Los campos eran cementerios de coches. Pocos presidentes pensaban que volverían a jugar en sus campos. Pero , a partir del 13 de noviembre, en sintonía con Luis Cervera (Director General de Deportes) y de Luis Miguel Gómez (Trinidad Alfonso) nos pusimos a trabajar. Ahora veo las fotos de cómo estaban los campos y parece mentira que, salvo los tres que te he dicho, estén ya en funcionamiento. Entre todos hemos conseguido eso.
“Veo las fotos de cómo estaban los campos y parece mentira que, salvo tres, estén ya el resto en funcionamiento”
Salvador Gomar
¿Cuántas llamadas recibía en esos días?
Menos de las que yo hice. La gente de los clubes bastantes problemas tenían en sus casas y en sus negocios. Era yo el que les llamé en los primeros días para decirles que estuvieran tranquilos, que les ayudaríamos en todo y que estábamos ya con gestiones.
¿Se ha reducido en el número de licencias por la incertidumbre?
Al contrario. En global, hemos crecido en licencias. Lo que sí que se han visto afectado han sido algunos clubes en concreto, porque muchas familiares no tuvieron paciencia y se marcharon a escuelas de pueblos menos afectados o con los campos ya reformados. Pero la temporada que viene volverá todo a su sitio, estoy seguro.
¿Qué le queda a El Palleter?
Es un campo que pertenece a la Real Federación Española de Fútbol y que hay que reconstruirlo entero. El proyecto ya está, con gradas y vestuarios nuevos. El Ayuntamiento quiere ampliar una calle que pasa por su fachada principal, aunque se han cedido unos metros al otro lado. Estamos en conversaciones con la Española y confiamos en que en noviembre se empiece a mover la obra.
“Queda la normalidad social, y ahí el fútbol es una vía de escape para la gente que tan mal lo ha pasado”
Salvador Gomar
¿Qué queda por hacer?
Queda la normalidad social, ya no el fútbol en sí, porque éste está en marcha. Pero la normalidad social, el día a día de la gente, el reflejo de tristeza en sus rostros… eso aún no está olvidado. Y ahí el fútbol tiene que ayudarles, tiene que ser una vía de escape.
¿Salva Gomar en qué ha cambiado?
Me ha servido para darme todavía más cuenta de que en la vida hay que insistir, insistir e insistir hasta conseguir las cosas. Llevo ocho años de presidente, pasamos el Covid y después la DANA… solo nos falta un terremoto.
Esperemos que no…
Eso espero yo también, claro.
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