César Caneda: “Ser futbolista profesional es la mejor profesión del mundo”

César Fernández de las Heras Caneda (Vitoria, 10 de mayo de 1978) ya es historia del fútbol español. El veterano defensa central puso fin a 28 años de carrera profesional el pasado domingo en el duelo entre SD Logroñés-Atlético Baleares (1-2). Fue el último de sus 935 partidos, en los que ha vestido las camisetas de 13 clubes: Aurrera, Bilbao Athletic, Athletic Club, Salamanca, Sevilla, Racing de Santander, Eibar, Cádiz, Alavés, Guijuelo, Mirandés, UD Logroñes y SD Logroñés. Se despido un hombre apasionado por “la mejor profesión del mundo”.

Después de 28 años de carrera futbolística ha anunciado su retirada.

Sí. Era algo que llevaba pensando durante todo este último año. Lo he meditado y lo he consensuado con la tranquilidad de haber disfrutado y de haberlo dado todo por los equipos en los que he jugado y contento por lo que he conseguido.

¿Cuándo decidió que era el momento de dejarlo?

El hecho de que mi protagonismo haya bajado algo en el terreno de juego, el sentirme superado por momentos por la categoría y contar con dolores recurrentes que no se me pasan han sido decisivos. Además, el momento futbolístico que está viviendo la sociedad me pareció bonito para dejarlo. No ha sido una decisión fácil.

Ha jugado número 935 partidos en su carrera. Son muchos encuentros, muchos equipos… ¿Cuál ha sido el momento más importante de su carrera?

Quizás el momento más bonito, por lo que significaba para la ciudad de Miranda de Ebro y para todos los que formábamos aquella plantilla del Mirandés, sería aquel día de Copa del Rey frente al Espanyol. Conseguimos el pase a semifinales, con gol mío en los últimos minutos. Fue algo grandioso. Seguramente, esté entre los recuerdos más destacados. Luego están los debuts en Primera División y en Champions League. Momentos muy bonitos para el recuerdo.

Y, en el caso contrario, ¿cuál es su peor recuerdo? ¿Puede que sea la retirada?

No, la retirada no me supone tanto como los descensos que sufrí con grandes equipos como el Cádiz, el Eibar o el Alavés, el club de mi tierra. Pasé un año allí y fue desastroso. Descendimos con todo lo que supuso para la ciudad, mis vecinos, mis amigos,… Fue un año para olvidar.

En una carrera tan larga, ¿dónde encontraba la motivación para continuar cada temporada?

R. Al final, el fútbol es un trabajo. De hecho, creo es de los mejores trabajos que puede haber. Nos pagan por jugar al fútbol, por hacer deporte, por estar con los amigos,… La motivación se puede encontrar en disfrutar de los pequeños momentos, siempre siendo consciente de que eres un afortunado. Es la mejor profesión del mundo.

¿Tiene alguna espina clavada?

No. Me siento muy orgulloso de todo lo que he vivido. Al final, son experiencias que te hacen madurar como persona y como jugador. No quitaría ninguna. Si me dieran la opción de volver atrás, seguro que cambiaría alguna cosa. Pero creo que tenemos que quedarnos con la evolución de las personas frente a las adversidades. Estoy orgulloso de todas las decisiones que tomé como profesional.

En una trayectoria tan larga le ha dado tiempo incluso a enfrentarse a su hijo. ¿Cómo fue aquella experiencia?

Se dieron los condicionantes necesarios para que ocurriera. Él está en el Alavés y fue convocado con el filial en pretemporada. Jugamos un amistoso que estaba programado y pudimos disputar 20 minutos juntos frente a frente. Fue algo muy bonito que quedará grabado para toda la familia.

Cada vez hay más futbolistas que alargan su carrera hasta los 40 años o más. ¿Cómo explica que los deportistas alarguen tanto su trayectoria?

Lo primero es la cabeza, la mentalidad. Gente como Modric, Sergio Ramos o los mismos Cristiano Ronaldo o Messi son gente privilegiada. No solo a nivel técnico o físico, sino también a nivel mental. No los conozco, pero deben ser superhéroes. Ahí creo que está la clave para poder aguantar. Luego está el cuidado personal, la alimentación y el descanso. A nivel quirúrgico, antes te lesionabas de gravedad de la rodilla y casi tenías que retirarte porque las técnicas eran diferentes a las actuales. Ahora ha evolucionado tanto el fútbol que, en unos años, habrá más casos de futbolistas longevos. Al final, la edad es un número y, haciendo las cosas bien, se pueden conseguir logros importantes.

¿Cuál ha sido el delantero al que más le haya costado defender? ¿Y al que más ilusión haya tenido por enfrentarse?

El más difícil, sin duda, Ronaldo Nazario. Me tocó defenderle unos minutos en el Santiago Bernabéu y cundía el pánico cada vez que cogía el balón. En cuanto a ilusión, enfrentarte a antiguos compañeros con los que has tenido una buena relación es bonito. No me quedaría con ninguno, porque han sido muchos y muy buenos a todos los que me he enfrentado.

Y a partir de ahora, ¿cómo vislumbra César Caneda su futuro? ¿Seguirá vinculado al fútbol?

R. Hace unos años montamos en Vitoria un centro de entrenamiento personal que se llama Thefitsports. Lo monté junto a Aitor Ocio y Alfonso Boadilla, un doctor de Vitoria. Es un mundo que me apasiona y donde cada vez paso más tiempo. Quizás me meta más de lleno en ese mundillo, que me encanta. No sé si seguiré unido al fútbol. Me tomaré un tiempo para reflexionar cuáles son mis sensaciones, qué ofertas se me ofrecen y decidiré.