Baptista abre la puerta a su continuidad
El técnico del Real Valladolid Promesas hace balance de la temporada tras la eliminación en el playoff de ascenso y se muestra dispuesto a seguir.
El Real Valladolid Promesas despidió este domingo la temporada con la decepción de la eliminación en el playoff de ascenso a Primera RFEF, legible en el rostro de los jugadores del filial, que, una vez consumada la derrota ante el Atlético Sanluqueño, fueron pasto del dolor y las lágrimas sobre el mismo césped. “Estamos muy tristes por no conseguir pasar. Los chicos tenían presión después de haber descendido el año pasado. Ellos querían ascender”, reconoció después Julio Baptista en rueda de prensa, donde hizo balance del curso.
En opinión del técnico, el equipo fue “de menos a más” y ha ido madurando “de manera importante”, algo que, a su juicio, evidencia el hecho de que en la segunda vuelta de la competición el Promesas consiguiera unos resultados más ajustados que en la primera, en la que solo lograban ganar o perder, “ante jugadores muy experimentados” y “teniendo la iniciativa en muchos partidos”. Tanto es así que los blanquivioletas se plantaron en la promoción de ascenso encadenando una racha de nueve jornadas sin perder, rota en Sanlúcar de Barrameda.
Con todo, el entrenador se definió “muy contento y orgulloso” del periplo con sus jugadores, en lo estrictamente deportivo y porque, dijo, además también está “formando hombres”. No obstante, y aunque su valoración es buena, dejó en manos del club su continuidad, a la que se mostró abierto. “Yo me imagino que sí”, aseveró, al ser preguntado por si seguiría, aunque dejando claro que deberá sentarse con el club para ver “cuál era la idea marcada previamente y si se ha cumplido”.
En este sentido, cabe recordar que hace meses en este periódico el técnico explicó que tanto él como su familia se sienten muy a gusto en la ciudad, algo que puede jugar a favor de su permanencia en Zorrilla. Así se refirió a su situación personal este domingo: “Yo cada día me noto más preparado; también estoy pasando por un proceso importante. Cuando vas entendiendo la cultura del club, entiendes por qué se respira así: es un club histórico, que la gente siente de verdad y donde la gente quiere ganar siempre, y yo también”.
En el club, Baptista percibe “gente implicada para crecer cada día” y una mejora respecto al Real Valladolid que conoció a su llegada. “Este club es mejor que hace cuatro años, y siento que va en la línea adecuada para lo que se quiere hacer”, expuso, que no es otra cosa que fomentar el talento propio. “Para mí sería una alegría tremenda que hubiera siete y ocho jugadores en el primer equipo”, indicó respecto de algo que, en sus propias palabras, “antes no pasaba”. “Tener tantos chicos arriba demuestra que se están formando bien, y esta es nuestra labor”, agregó horas antes del choque del Pucela en Almería, donde seis jugadores con ficha del filial estuvieron a las órdenes de Pezzolano.