NewslettersRegístrateAPP
españaESPAÑAchileCHILEcolombiaCOLOMBIAusaUSAméxicoMÉXICOusa latinoUSA LATINOaméricaAMÉRICA

INGLATERRA

Las cifras más locas del mercado del Chelsea

El fichaje de Enzo Fernández dispara el gasto de los ‘Blues’, entre los mercados estival e invernal, por encima de los 600 millones de euros. Suman 16 fichajes en tan solo dos ventanas.

Londres (Inglaterra)
Las cifras más locas del mercado del Chelsea

No existe un precedente así en la historia del Chelsea. Todd Boehly llegó a Stamford Bridge con el objetivo de, para bien o para mal, grabar su nombre en el recuerdo de los aficionados Blues. Si los más de 300 millones que han gastado los londinenses en el recién concluido mercado invernal parecen disparatados, una vez se confirmó la incorporación de Enzo Fernández, procedente del Benfica, como el fichaje más caro de la historia de la Premier League, si sumamos la inversión realizada por el Chelsea tambén en los meses de verano, hay quienes podrían llegar a asustarse. Sin contar los 30 millones de euros de variables acordados en el traspaso de Mykhailo Mudryk, el desembolso de Todd Boehly en sus dos primeras ventanas de fichajes como máximo mandatario del cuadro londinense se disparo por encima de los 610 millones de euros. Una locura. En tan solo una temporada, el Chelsea ha introducido en el top 10 de altas más caras en toda la historia del fútbol inglés: en verano, los 80 millones de euros de Wesley Fofana y ahora, en invierno, los 121 millones que pagará en seis plazos por Enzo Fernández.

Para ponernos en contexto, y teniendo en cuenta ambos mercados estival e invernal de la presente temporada 2022/2023, entre todos los equipos de LaLiga española han gastado en torno a 560 millones de euros. Por su parte, el desembolso de la Bundesliga apenas supera los 550M€. Algo más se invirtió en la Ligue 1 (700M€ aproximadamente) y la Serie A (casi 800 millones). Es decir, tan solo el Chelsea, y en apenas cinco meses de mercado, ha gastado más dinero que dos de los cinco grandes campeonatos europeos en su conjunto. Más de 600 millones de euros entre Enzo Fernández, Wesley Fofana, Mykhailo Mudryk, Marc Cucurella, Raheem Sterling, Benoit Badiashile, Kalidou Koulibaly, Noni Madueke, Malo Gusto, Carney Chukwuemeka, Andrey Santos, Pierre-Emerick Aubameyang, David Datro Fofana, João Félix, Gabriel Slonina y Denis Zakaria. Y es que en Inglaterra, y particularmente en Stamford Bridge, juegan en otro liga.

Pero es que el despilfarro de dinero protagonizado por Todd Boehly desde su llegada es inusual hasta para el propio conjunto londinense, un club que, durante la etapa de Roman Abramovich como presidente del Chelsea, había acostumbrado a hacer importantes inversiones económicas casi cada campaña. Y si no existe ningún precedente parecido es porque, hasta los más de 610 millones de euros de este curso, el mayor gasto de los Blues en una temporada tuvo lugar en la 2017/2018. Esa temporada, jugadores como Álvaro Morata, Tiemoué Bakayoko, Danny Drinkwater o Antonio Rüdiger aterrizaron en Stamford Bridge. En total, un gasto de 260 millones de euros. Elevado, sí, pero nada comparable comparable a lo de este curso. Cifra parecida a los casi 250 millones desembolsados por el Chelsea hace dos temporadas, cuando, entre otras incorporaciones, pagaron en torno a 80M€ al Bayer Leverkusen por Kai Havertz. Exceptuando el año en el que la sanción de la UEFA impidió fichar a los Blues, el gasto medio durante los últimos años había rondado siempre entre los 100 y 200 millones.

En lo que va de siglo XXI, los primeros grandes desembolsos del Chelsea en los mercados de fichajes se producen a partir de la llegada de Roman Abramovich a Stamford Bridge en junio de 2003. De repente, un equipo acostumbrado a invertir en torno a 50 millones de euros entre los meses de verano e invierno, vio cómo, durante dos campañas seguidas, su inversión se disparó hasta los 170 millones de euros. Temporadas, la 2003/2004 y 2004/2005, en las que jugadores, y leyendas, como Hernán Crespo, Claude Makélélé, Didier Drogba o Ricardo Carvalho recalaron en el cuadro londinense. Pero ni aún así, el estreno del magnate ruso fue siquiera parecido al de su homólogo y sucesor en el cargo norteamericano.

Según la web Transfermarkt, desde la temporada 2000/2001, primera completa del siglo XXI, no ha habido un equipo en el mundo que haya gastado más que el Chelsea. Ni siquiera el Real Madrid o el Manchester City. Aunque conforman el ránking de los cinco primeros clasificados, como 5º y 2º respectivamente, el equipo de Stamford Bridge les aventaja en varios miles de millones de euros. Desde dicho año 2000, el Chelsea ha incorporado hasta 554 jugadores, en los que ha gastado más de 3.000 millones de euros. Comparándolo, por ejemplo, con el conjunto blanco, los del Santiago Bernabéu se sitúan por debajo de la Juventus de Turín con un gasto de casi 2.300 millones en 278 incorporaciones. Aunque lo que más diferencia a Blues y madridistas es el balance total, y es que el Chelsea cuenta con una desfase negativo de más de 1.600 millones de euros. Mucho fichaje caro, pero demasiada poca venta elevada, ya que en lo que a número de jugadores se refiere, no existe diferencia: 554 altas frente a 553 bajas. Tampoco otros equipos que ostentan los primeros puestos de dicha clasificación se han acercado a los 610 millones de euros del conjunto Blue. Mientras que el equipo de Pep Guardiola, en su temporada más derrochara, gastó casi 320 millones de euros entre el verano de 2017 e invierno de 2018, el Manchester United viene de protagonizar, en la 2022/2023, el desembolso más elevado de su historia: más de 240 millones de euros.

Los 121 millones que ha puesto finalmente el Chelsea encima de la mesa del Benfica han hecho del argentino, ni más que menos, el fichaje más caro de la historia del club, el más elevado de la Premier League y el centrocampista más caro del mundo. Casi nada. Un futbolista que viene de proclamarse, con tan solo 22 años, campeón del mundo con la selección argentina en Qatar 2022, donde además fue elegido ‘Mejor Jugador Joven’ del torneo. Los motivos por los que el Chelsea podía estar muy interesado en su fichaje son evidentes, pero ya el exjugador del Benfica tendrá ahora la difícil tarea de demostrar sobre el terreno de juego que los Blues acertaron pagando semejante suma de dinero. El problema del cuadro de Stamford Bridge es que la de Enzo Fernández no ha sido la única incorporación realizada en la 2022/2023 cuyo precio se ha terminado disparando. Teniendo en cuenta los 30 millones de variables del fichaje del extremo ucraniano, tres de los cinco mayores traspasos de la historia del Chelsea se han producido este curso: Enzo Fernández (121M€), Mykhailo Mudryk (70+30M€) y Wesley Fofana (80M€). Un ránking en el que se cuelan Romelu Lukaku y Kai Havertz.

Todos, a excepción del belga, jugadores con tiempo por delante para dejar su huella en Stamford Bridge. Sin embargo, y como suele ser habitual, las comparaciones son odiosas, sobre todo cuando se trata de echar la memoria atrás y pensar en el precio de algunos de los futbolistas que más y mejor impacto tuvieron en el Chelsea. Hasta el mercado de la 2010/2011 hay remontarse para recordar el último gran fichaje alejado de la “era moderna” de los Blues. Casi 60 millones de euros pagaron al Liverpool por Fernando Torres, un fichaje que después no tuvo el rendimiento esperado, sobre todo por las expectativas generadas. Cada vez más lejos quedan ya los más de 40 millones de euros que pagó Roman Abramovich por Andriy Shevchenko en 2006, o los 38M€ que le costó el traspaso de Didier Drogba procedente del Olympique de Marsella. Dos emblemas del club londinense que actualmente ocupan los puestos 16º y 20º en la lista de transferencias más caras en la historia Blue.