Del Cata a Lenglet: los 19 centrales fichados en la era Cholo
Cuando llegó Simeone al Atlético, Godín y Miranda eran los centrales del equipo, pero no eran ni mucho menos las leyendas en que se convirtieron después. Para darles competencia estaban Domínguez y Perea. Con aquel póquer, el Cholo enderezó el rumbo, conquistó la Europa League e inició una era que aún continúa. “Para salir campeón necesitas una buena defensa”, explica el técnico. Para reforzarla, los últimos en llegar son Le Normand y Lenglet, dos nombres más en una lista con éxitos, decepciones e incluso inéditos.
Lenglet (2024, Barça)
Clément Lenglet (Beauvais, Francia, 1995) fue la solución que encontró el Atlético al agujero del perfil izquierdo de la defensa y al entender el club que otros objetivos como Hincapié y Hancko eran inabordables. El francés llegó cedido por el Barça en la última semana de agosto y hasta la 9ª jornada de Liga no se estrenó. Titular en San Sebastián y uno más en la pugna por ser uno de los defensas de confianza del Cholo.
Le Normand (2024, Real Sociedad)
La gran apuesta del verano para la defensa. El Atlético pagó más de 30 millones por el central de la Real Sociedad y la Selección. Le Normand (Pabu, Costas de Armor, Francia, 1996), con contrato hasta 2029, se ha acoplado rápidamente al plan, sin acciones espectaculares pero con una sobria solidez, y forma un tándem con Giménez que le hace mucho bien al Atleti. Un traumatismo en la cabeza que le causó un hematoma subdural le ha obligado a parar.
Gabriel Paulista (2024, Valencia)
El fichaje del brasileño fue un visto y no visto en el Atlético. Paulista (São Paulo, 1990) firmó en enero de 2024 hasta final de temporada y no se le renovó. Como rojiblanco, participó solo en cinco partidos, de los cuales ganó uno. No convenció, pese a los apuros en la zaga. En total jugó 405 minutos. Ahora está en el Besiktas.
Söyüncü (2023, Leicester)
Un caso similar al de Paulista. Si uno estuvo en una mitad de la temporada 23-24, el otro estuvo en la otra. Söyüncü (Esmirna, Turquía, 1996) llegó con la carta de libertad tras años de altibajos en el Leicester y la apuesta no salió bien. Como rojiblanco jugó nueve partidos (214 minutos solo), pero no fue titular hasta diciembre. En los dos partidos que entró en el once, Athletic y Lugo, fue cambiado en el descanso. Simeone perdió (aún más) la confianza, el central se fue cedido al Fenerbahçe y, después, traspasado por 8,5 millones.
Azpilicueta (2023, Chelsea)
César Azpilicueta (Zizur Mayor, Navarra, 1989) llegó también sin traspaso, liberado por el Chelsea. Un jugador de vestuario, de fondo de plantilla, que le ha resuelto problemas a Simeone en varias posiciones de la zaga y es prácticamente un capitán. El sentir general en el entorno rojiblanco es el de que ojalá hubiera llegado antes. Durante su primera temporada jugó 34 partidos y en la actual, cinco. Termina contrato en junio de 2025.
Mouriño (2023, Racing Club de Montevideo)
Otra apuesta de futuro, pero por el momento lejos del Atlético. Santiago Mouriño (Montevideo, Uruguay, 2002) fichó por el equipo rojiblanco en julio de 2023. El central hizo la pretemporada con el primer equipo rojiblanco, pero se optó por una cesión al Zaragoza. Para este curso, el procedimiento fue similar. Trabajó en verano a las órdenes de Simeone y se fue al Alavés traspasado por unos 2 millones con opción de recompra. Con el Atlético solo jugó amistosos, pero nunca un partido oficial.
Reinildo (2022, Lille)
Oportunidad de mercado que aprovechó el Atlético. Reinildo Mandava (Beira, Mozambique, 1994) terminaba contrato con el Lille en junio de 2022 y el club rojiblanco se lanzó a por su fichaje en enero. Por tres millones se adelantó al resto de pretendientes. O Rei era uno de los laterales izquierdos más destacados de la Ligue 1 y Simeone le encontró acomodo como central izquierdo, donde brilló hasta que una lesión de rodilla en febrero de 2023 truncó su trayectoria.
Witsel (2022, Borussia Dortmund)
Axel Witsel (Lieja, Bélgica, 1989) llegó con la carta de libertad tras cuatro años en el Dortmund. El Atleti lo fichó como el 5 que ansiaba Simeone, pero el día de su debut fue central. Lo que pareció una situación puntual, no lo era en realidad. El belga ha jugado más de sus partidos en la línea defensiva y verlo en el centro del campo ha sido lo extraño. Pese a las limitaciones de no conocer el oficio y de haber perdido velocidad, fue uno de los rojiblancos con mejor rendimiento en la 23-24.
Mario Hermoso (2019, Espanyol)
El Atlético revolucionó la plantilla en 2019 y tocó reconstruir la defensa. Para el perfil que dejaba Lucas, el club rojiblanco buscó a Hermoso (Madrid, 1995), canterano del Madrid que brillaba en el Espanyol y por quien hubo que pagar 25 millones. El zaguero podía jugar como central y como lateral, aunque sus mejores momentos llegaron con la línea de cinco y con su aportación en la salida del balón, especialmente en la conquista de la Liga 20-21. En 2024 terminó contrato y se marchó libre a la Roma.
Felipe (2019, Oporto)
El reto de sustituir a un mito como Godín le correspondió a Felipe, del Oporto. El Atleti pagó 20 millones (Mogi das Cruzes, Brasil, 1989) por el brasileño, que pronto se mostró como un central poderoso en el área. En su primer curso, hasta el parón por el coronavirus, dio un rendimiento sobresaliente. Después, luces y sombras. Tras tres años y medio y una Liga en su palmarés, se marchó al Nottingham Forest.
Montero (2018, Atlético B)
No fue un fichaje, pero sí echó una mano al Atlético en la 2018-19. Simeone tenía problemas en defensa, propiciados en parte por las lesiones de Lucas, Savic y Giménez, y echó mano del central del filial. Montero (Sevilla, 1999) disputó 14 partidos con el primer equipo en aquella temporada. Después salió cedido al Depor, en Segunda, y al Besiktas. Tras pasar también por el Hamburgo y el Arouca, ha vuelto a España para jugar en el Racing.
Nehuén Pérez (2018, Argentinos Juniors)
El Atlético fichó a Nehuén cuando apenas tenía 18 años (Hurlingham, Argentina, 2000) como una apuesta de futuro. De hecho, tras abonar 2 millones por sus derechos, lo dejó cedido unos meses en su equipo. Y luego enlazó cesiones al Famalicão, al Granada y a Udinese, que lo compró en 2021. Nunca llegó a vestir la rojiblanca en partido oficial. Ahora es jugador del Oporto.
Savic (2015, Fiorentina)
Al término de la 14-15 se marchó João Miranda y el Atlético firmó a Stefan Savic (Mojkovac, Montenegro, 1991), central de la Fiorentina, en una operación en la que Mario Suárez acabó en el equipo italiano. Defensa contundente, tuvo una reñida competencia con Giménez hasta el punto de que el montenegrino fue titular en la final de Champions 2016. Más tarde formaron tándem en la zaga y Savic se despidió en 2024 tras 297 partidos y como uno de los jugadores más queridos en el Atleti por su rendimiento y su compromiso.
Lucas Hernández (2014, Atlético B)
Uno de los mejores canteranos que ha tenido el Atlético en la era Simeone. Debutó en la 14-15, primero teniendo minutos en Copa y luego ya en Liga e incluso Champions. Lucas (Marsella, Francia, 1996) no tardó en hacerse un sitio en la primera plantilla y en el once, tanto como central izquierdo como en el lateral. Su velocidad al corte le llevaba a realizar acciones espectaculares en defensa. Como jugador rojiblanco llegó a la selección de Francia, con la que ganó el Mundial en 2018. El Bayern lo compró en 2019 por 80 millones.
Velázquez (2014, Danubio)
El Atlético buscó en Uruguay una operación similar a la de Giménez y, en 2014, pagó 1 millones de euros a Danubio por Emiliano Velázquez (Montevideo, Uruguay, 1994). Fue cedido dos años al Getafe, luego al Braga y finalmente al Rayo, que en 2018 se lo quedó en propiedad. Pese a hacer varias pretemporadas con el Atleti, no llegó a debutar. Ahora está en Uruguay, en Nacional.
Alderweireld (2013, Ajax)
En una operación exprés, el Atlético fichó a Toby Alderweireld (Wilrijk, Bélgica, 1989) por unos 7 millones tras haber venido a Demichelis al Manchester City. A la sombra de Godín y Miranda, jugó 22 partidos en la 13-14, marcó el gol decisivo al Málaga en la penúltima jornada y fue campeón de Liga. Ese verano se marchó cedido al Southampton y, al siguiente, vendido al Tottenham por 16 millones.
Giménez (2013, Danubio)
En abril de 2013, el Atleti confirmó el fichaje de Giménez (Toledo, Uruguay, 1995), un defensa de apenas 18 años y un puñado de partidos en la liga uruguaya por quien pagaba 1 millón de euros. En su primer curso en el equipo rojiblanco solo jugó dos partidos, uno de Liga y uno de Copa. Es uno de los jugadores más importantes del Atlético y de Uruguay en la última década y solo las lesiones le han impedido ser aún más histórico. Lleva 328 partidos como rojiblanco.
Cata Díaz (2012, Getafe)
El primer central que llegó al Atlético de Simeone fue Cata Díaz (San Fernando del Valle, Argentina, 1979). El club rojiblanco pagó 1 millón al Getafe por el veterano defensa, que jugó 22 partidos entre Liga, Copa y Europa League y acabó encarándose con un grupo de hinchas rojiblancos en el Calderón antes de marcharse a Boca Juniors.
