Paulo Futre
El ídolo eterno. Firmado como cabeza electoral de Jesús Gil en 1987, año en el que quedaría como Balón de Plata, el portugués dejó imágenes icónicas con la publicidad de Marbella al pecho y el brazalete de capitán. Uno de los mejores jugadores de la historia del Atlético, vivió dos etapas como futbolista y acabó con 215 partidos disputados y 52 goles anotados.