Viaje de placer para el Barça

Una más para su histórico récord. El Barcelona sumó su victoria consecutiva número 51 en Liga en un Heliodoro con gran ambiente. Oshoala, con un hat-trick, lideró la goleada en un auténtico viaje de placer del equipo blaugrana a Tenerife. El Granadilla, con línea de cinco, no supo achicar espacios en un terreno de juego que se le hizo grande desde el primer minuto de juego, cuando la delantera nigeriana avisó con un remate al larguero. Ese fue el inicio del espectáculo. Las de Giráldez ofrecieron su ‘fútbol cava’ ataviadas con la recién estrenada camiseta de la Senyera.

Después de las rotaciones del miércoles, el Barça presentó un once mucho más cercano al que sería de lujo si las bajas se lo permitieran. Paños, Mapi León, Mariona, Aitana y Bronze regresaron a la titularidad y el cuadro blaugrana, hoy de amarillo y rojo, empezó el encuentro con velocidad de crucero. Oshoala iba a fallar la primera ocasión clara tras un jugadón de Mariona por la izquierda, pero iba a tener tiempo de empacharse poco después. Patri dirigía el juego con el criterio que la posiciona como una de las mejores pivotes del mundo y Aitana se movía con soltura entre líneas para pisar área cada vez que podía. Lo mismo que Pina, que no está tocada por una varita mágica sino que tiene una propia. Ahora lo ves. Ahora no lo ves. Eso hizo cuando recibió la entrega de Guijarro en el área: control con la derecha, definición con la izquierda. 0-1. Rumbo directo a la victoria.

Crnogorcevic, esa extremo suiza que ya podría pasar por catalana, estrelló un balón en el palo en el 7′. Y Oshoala, un minuto después, recogió un rechace de Noelia Ramos a un remate suyo para poner el 0-2. Lo del Barça en Tenerife ya cogía tintes de paseo placentero. El tercero no tardó en llegar: también lo firmó la nigeriana tras una asistencia de la suiza.

Aitana intentó la chilena en el 25′, dejando una prueba más de que el equipo catalán se estaba gustando y mucho sobre el césped del estadio tinerfeño. Las ocasiones caían una tras otra para desesperación de un Granadilla al que apenas le duraba la posesión y encima regaló. Pisco salvó el segundo de Pina antes de que dos malas entregas defensivas provocaran que el cuero acabase en pies de Oshoala ante la portera local: el cuarto. Un dudoso fuera de juego impidió que la estrella del continente africano sumara un nuevo gol a su cuenta particular poco después. Sí subió el quinto en la del Barça en el 45′: centro de Patri y remate de espuela, en forma de caricia, de Aitana. El partido estaba finiquitado.

Las futbolistas blaugranas entendieron el contexto de la segunda mitad y bajaron ligeramente el ritmo. Giráldez hizo lo esperable: dar descanso a algunas de sus estrellas. Entraron las jóvenes María Pérez, Emma Ramírez y Nuria Rábano. Minutos de rodaje en convivencia con la siempre competitiva Aitana, que estuvo a punto de marcar al menos otros dos goles porque las Thais, Marrero y Gavira seguían sin dar abasto. Tampoco una Natalia Ramos y una Paola Hernández contemplativas en el medio. Eso sí, ninguna dejó de correr para que, con las manos salvadoras de Noelia, el Granadilla solo encajara un tanto en la segunda parte. No lo anotó Pina en su maradoniana jugada del 91′, pero sí Bronze, en el último suspiro, a pase de Mapi. Así fue la victoria 51 del Barça en una Liga en la que no tiene rival.