Vero: “Sin nuestra lucha, seguramente no seríamos campeonas del mundo”
La mítica futbolista gallega, máxima goleadora de la Liga italiana en filas de la Fiorentina, analiza su gran estado de forma en AS y mira al pasado (Selección) y al futuro (banquillos).
Cuando juega hay que verla y cuando habla, escucharla. Vero Boquete (Santiago de Compostela, 1987) tiene gol, visión de juego y un fútbol que ha abierto camino en España y el extranjero. Con casi 20 años de carrera deportiva en la élite, hoy lidera la tabla de máximas anotadoras de la Liga italiana con ocho tantos marcados en una Fiorentina que es tercera en la tabla, puesto Champions, y está en semifinales de la Copa. Además, ha repartido cuatro asistencias, presentando sus mejores registros ofensivos de los últimos tiempos. Alejada de la Selección en su mejor momento (Eurocopa 2017) tras alzar la voz en el Mundial 2015, desgrana para AS su estado de forma actual, el de La Roja y sus próximos objetivos...
—Su nombre no deja de sonar, ¿cómo está?
—Esta temporada está yendo muy bien, me estoy encontrando también bien. El otro día después de 27 partidos descansé. Pero jugábamos en dos días, hay un montón de partidos. Por ahora la temporada va bien, tanto a nivel colectivo como a nivel personal.
—Ya ha superado sus registros ofensivos de la temporada pasada, ¿se lo había propuesto?
—Siempre antes de empezar la temporada, mi objetivo es continuar mejorándome a mí misma. Entonces sé que si juego mejor voy a ayudar más al equipo y normalmente eso se traduce también en números. Es cierto que este año, con respecto al año pasado o con respecto a otros, el nivel del equipo es mejor. Eso hace que pueda tener más libertad, que pueda jugar también un poco más arriba y en esa posición evidentemente puedo ayudar con más goles, con más asistencias y de ahí un poco a los números que podemos ver.
—¿Qué estilo de juego practican con Sebastián De La Fuente?
—Sebas es entrenador argentino, con lo cual los entrenadores argentinos se caracterizan por darte un poco más de estructura o de pautas a nivel defensivo y tener un poco más libertad de medio campo para arriba. Es un poco lo que somos esta temporada. Intentamos defender lo mejor posible, a veces incluso defender resultados en los últimos minutos, pero luego somos un equipo vertical, con jugadoras que transitan muy bien, que podemos encontrar tanto en bandas como por dentro. Así que es un poco una combinación de lo que sería un juego de posesión, pero a veces un poco más vertical, que también se adapta un poco a las características de la Liga Italiana.
—Llama la atención que en el staff hay cinco mujeres entre los 12 miembros...
—En los últimos años cada vez los clubes están metiendo más mujeres en sus estructuras porque cada vez están también más capacitadas, pero yo creo que especialmente la Fiorentina es un club que está mucho más concienciado con este tema. Quizás también por la propiedad, americana, por la visión de futuro también que tiene la sociedad (se refiere al club). Y sí, yo creo que la responsable del femenino es una mujer, en el staff médico tenemos también mujeres, yo creo que eso es algo que no es obligatorio, no es un cupo, pero se da con bastante normalidad, al menos aquí en la Fiorentina.
—¿De qué objetivos habla el vestuario: Champions, ganar la Copa...?
—El objetivo evidente y claro es el entrar en Champions. Sabemos que para eso tenemos que estar entre los tres primeros. A día de hoy tenemos 13 puntos con respecto al cuarto. Es un buen colchón, pero esta segunda parte de la temporada va a ser durísima porque pasas a la poule scudetto (los cinco primeros clasificados juegan cada fin de semana entre ellos). Entonces ahí puedes conseguir puntos, pero también puedes perder muchos. Y luego, sin duda, después de llegar a semifinales de Copa, tenemos el objetivo de intentar ganar un título. Sabemos que ganar el Scudetto es muy difícil por los puntos que hay de distancia con la Roma y por su nivel, pero la Copa es diferente y creo que podemos ilusionarnos con ello.
—Juegan semifinales, a ida y vuelta, contra la Juventus...
—Exacto. Nos viene una eliminatoria muy dura, después del parón de la selección. Sabemos que a priori la Juve es favorita por cómo ha ido la temporada, por cómo es a nivel histórico en los últimos años y por el potencial de su plantilla. Pero bueno, hemos perdido 1-2 en casa, hemos empatado 2-2 allí y tenemos muchas ganas de llegar a una final de Copa, así que lo vamos a intentar.
—Hace tiempo que renueva año a año, ¿ya ha decidido que seguirá jugando al acabar esta temporada?
—Sí, hasta antes de Navidad no quería pensarlo. Ahora ya en los últimos seis meses de temporada sí empiezo a ver, por cómo está yendo la temporada y cómo me estoy encontrando, que no tendría ni sentido irme a otro sitio, ni sentido el dejar de jugar. Siempre he dicho que mientras me encuentre bien y esté motivada intentaré seguir. Ahora sería un buen momento para ver qué opciones hay para la próxima temporada. Es cierto que personalmente todavía no he hablado con el club, pero imagino que pronto nos sentaremos y veremos si hay Vero para un año más o no.
—Y con el posible escenario de Champions, ¿más?
—Para mí tendría mucho significado volver a jugar la Champions y el hacerlo con la Fiorentina, porque al final es una apuesta del club, pero también es una mía. personal: decidir estar aquí, poder ayudar en un proyecto que pasa por ahí, volver a Europa y ser uno de los mejores clubes de Europa. A nivel personal volver a jugar la Champions me hace siempre especial ilusión y el poder hacerlo con la Fiorentina también me hace ilusión por cerrar un poco ese círculo y tener más satisfacción.
—Después, una de las Ligas que está apostando es Arabia Saudí, ¿iría a jugar a un país con denuncias por violaciones de derechos humanos de las mujeres y la comunidad LGTBIQ+?
—Italia es mi octavo país, así que nunca he tenido problema en ir a sitios nuevos donde las culturas son distintas, pero evidentemente como mujer, y además mujer muy feminista, el poder ir a algún país donde no tratan de la misma manera a la mujer sería difícil. Sé que en el caso de Arabia y de otros países están haciendo un esfuerzo por cambiar. No obstante, para saber la realidad del país solo puedes estar allí y ver si realmente puedes hacer algo por cambiarlo o no. Pero a día de hoy, plantearme el ir a Arabia o algún país de ese tipo, lo veo muy difícil.
“A día de hoy veo más seguro el volver a España en un banquillo que el volver para jugar”
—¿Y retirarse en España? Solo ha jugado aquí seis temporadas...
—Hace un par de años mi discurso era claro: que quería volver a España y mi ilusión era retirarme jugando en España. Pero es cierto que eso no se ha dado por unas u otras razones y ahora veo difícil el volver a un nuevo proyecto allí. No quiero tampoco volver cuando ya no esté bien. Entonces, bueno, nunca sabes lo que va a pasar en el fútbol en los próximos meses, pero realmente veo difícil el volver a España a jugar. Pero sé que en otro momento voy a volver. Será en un banquillo, a día de hoy veo más seguro el que sea en un banquillo que el que sea para jugar.
—Lleva casi 20 años jugando al más alto nivel, ¿sigue notando el gusanillo al ponerse las botas?
—Creo que eso es lo único que no ha cambiado. Sigo teniendo muchas ganas de entrenar, estando supermotivada para jugar, para mejorarme día a día, soy supercompetitiva... El día que eso cambie será el momento de dejarlo. Yo pienso en Vero hace 10 años, hace 15 y a nivel de mentalidad, de ganas, no ha cambiado absolutamente nada. Quizás hace un par de años mi ambición era ganar títulos y en los últimos años la he cambiado por objetivos un poco más pequeños, pero que en los equipos en los que estaba significaban como ganar una Champions. Sigo disfrutando del día a día, de los entrenamientos, de los partidos. Y creo que seguramente esa es la clave de estar a día de hoy donde estoy.
—Delantera, mediapunta, centrocampista... ¿Dónde se encuentra mejor?
—Sin duda en la posición de centrocampista ofensiva. Ahora mismo aquí jugamos más con un 4-2-3-1, entonces es esa posición de mediapunta pura, en la que estoy más cerca del área para el último pase, donde también puedo llegar para hacer gol, donde tengo la libertad para aparecer más como mediocentro y crear más juego. Ahí es donde el equipo aprovecha más mis cualidades. Es cierto que he tenido temporadas en las que he jugado más de delantera centro. Me he adaptado y he intentado dar el máximo. Temporadas en las que he estado más como interior, mediocentro puro. También me he adaptado y he hecho lo que el equipo necesitaba. Pero creo que por capacidad y por cualidades individuales, la mediapunta es la posición perfecta para mí.
“Por capacidad y por cualidades individuales, la mediapunta es la posición perfecta para mí”
—Su nombre aparece siempre entre las primeras referentes que tuvieron las que ahora son grandes jugadoras de la Selección o la Liga F, ¿cómo lleva ese peso?
—Para mí es un placer y una motivación. La motivación para seguir haciendo las cosas bien, porque sabes que hay gente que echa un ojo y que está pendiente de lo que haces y poder servir de buen ejemplo es siempre importante para mí. Me hace especial ilusión ver que ahora hay futbolistas que están en el mejor momento de su carrera, que ganan títulos, que consiguen grandes éxitos y que siempre o muchas veces dicen que cuando empezaban veían lo que hacía Vero. Yo eso de pequeña nunca lo tuve y siempre dije que el fútbol femenino lo necesitaba. Ahora, por suerte, tenemos muchos más referentes femeninos y las niñas crecen con las ideas claras, pero el saber que en una época en la que no había referentes pude abrir camino y ayudar de alguna manera para mí es una satisfacción y un lujo.
—¿Alguna vez ha sentido que por eso ha sido tratada como una jugadora retirada en lugar de en activo?
—Sí, evidentemente, sobre todo en los últimos años. Eres referente y en las entrevistas te preguntan por las jugadoras que están ahora y sí que puedes tener esa sensación de, oye, que yo todavía estoy jugando. Pero creo que la edad que tengo, la carrera que y la madurez en la que me encuentro, a mí no me supone nada, ni me siento mal. A veces las jugadoras de otras Ligas desaparecen un poco porque no las ves tanto. En Italia todo el mundo sabe que estoy en un gran momento, que esta siendo una temporada fantástica y quizás hay gente en España que le sorprende un poco porque no me siguen semana tras semana. Pero bueno, como digo, para mí no es un problema el que me consideren leyenda estando en activo. Creo que es hasta una cosa positiva. Disfruto de las dos cosas al mismo tiempo. Es un poco la misma sensación que tuve cuando le pusieron el nombre del estadio en mi ciudad. Normalmente cuando hacen eso es cuando ya no estás o has terminado tu carrera y yo tengo la suerte de disfrutar esto tanto en vida como en activo. Creo que es algo anecdótico, pero para mí es muy destacable.
—¿Ha ido a ver partidos del Compostela al Vero Boquete?
—Cuando todavía era San Lázaro, muchos. Con las letras de Vero Boquete, alguna vez, porque sin vivir allí es más complicado. Pero en ese estadio he crecido viendo el fútbol de máximo nivel, he disfrutado del Compostela en su nivel más alto, he jugado, he entrenado en el parking cuando no teníamos campos, el estadio está en mi barrio, es como todo muy especial...
“En ese momento fue necesario hacer lo que hicimos y las consecuencias que he tenido que pagar a nivel individual han sido altas, pero a nivel colectivo, como situación de mi deporte, creo que ha sido positivo”
—Siempre dice que la Selección es una herida cerrada que te dejó una cicatriz, ¿qué aprendizajes le dejó?
—Muchas cosas y distintas. Al final, como conclusión, para mí, creo que lo que he aprendido es que hay batallas que independientemente de las consecuencias, tienes que lucharlas y creo que esa fue una de ellas. Como digo, es una cicatriz, se podrían haber hecho las cosas de manera distinta, se podría no haber hecho ninguna lucha y seguramente a día de hoy no seríamos campeonas del mundo. Al final el tiempo pone en perspectiva todo y te da una visión mucho más amplia. La visión que tengo a día de hoy es que en ese momento fue necesario hacer lo que hicimos y las consecuencias que he tenido que pagar a nivel individual han sido altas, pero a nivel colectivo, como situación de mi deporte, creo que ha sido positivo. Entonces, bueno, si ponemos en relación el fútbol como deporte colectivo, creo que al final ha sido algo bueno para todos.
—Lucía García contaba en The Players Tribune que con la reivindicación de Las 15 le decían que iba a arruinar su carrera, ¿alguna vez se lo han dicho?
—Son momentos distintos y situaciones distintas. En el 2015 mi carrera no se podía arruinar porque yo no necesitaba a la Selección. Tenía el respeto internacional y el respeto del fútbol por lo que estaba haciendo también a nivel de clubes. Venía de ganar una Champions y España jugaba su primer Mundial. Yo no le debo tanto a la Selección. Creo que mi carrera ha sido más fuera de la Selección que en ella. Evidentemente la carrera como internacional te da un plus, el poder jugar Mundiales, Europeos, pero en mi época no eran tantos los que jugábamos. Entonces creo que evidentemente su situación es distinta a nivel de patrocinadores o repercusión mediática. Al final creo que también internamente cada uno tiene unos principios y unas motivaciones que van mucho más allá de lo que te pueda decir la gente de fuera.
—Hablando de principios, ¿entiende la posición de jugadoras como Patri o Mapi exijan más para volver a la Selección?
—Sí, claro que entiendo que exijan más. Yo creo que ahora no son solo ellas las que lo exigen, creo todas exigían más. Luego, evidentemente, cada una a nivel individual ha decidido lo que creía que debía de hacer. En el caso de las que no han vuelto, especialmente de Mapi y de Patri, creo que el tiempo les está dando la razón en todo. Pero eso no quita a que día de hoy ellas no son campeonas del mundo, el precio que han tenido que pagar es altísimo. Espero y realmente creo que con los cambios que se han dado y los que pueden y deben de venir en el futuro, ellas regresen a la Selección. Eso no les va a devolver el Mundial de Australia y Nueva Zelanda, pero creo que todo lo que ha pasado en este último año, sin duda, les ha dado la razón. Luego esperemos que los cambios se produzcan y que ellas puedan volver a la Selección y a encontrar las condiciones que creen que son justas para el nivel en el que están.
“Las futbolistas españolas son tan buenas que hacen bueno a cualquiera”
—¿Cómo ha visto el cambio de Vilda a Tomé?
—Creo que el cambio era necesario después de todo lo que había pasado. Creo que la elección de la nueva seleccionadora sigue un poco una línea continuista y de manera de trabajar de la RFEF, al menos hasta ahora. No sé si es la más capacitada o la mejor, pero lo que está claro es que eso no va a cambiar de aquí a después de los Juegos Olímpicos. Con ella yo creo que a nivel de grupo se ha mejorado un poco y se ha continuado esa línea de buenos resultados, salvo esa excepción de Italia. Así que creo que independientemente de quién esté en el banquillo, las futbolistas españolas son tan buenas que pueden hacer bueno a cualquiera. Entonces, si además en el staff técnico le dan una mano, tenemos una Selección que es prácticamente imposible de que no gane.
—¿Y la semifinal de la Nations League ante Países Bajos?
—A España siempre la veo bien y favorita. Es fácil decirlo ahora que es campeona del mundo, pero lo dije antes, que España tenía una Selección B que aún así podía ganar el Mundial. Hay una base muy fuerte del Barça, que se entrenan juntas diariamente, que tienen un nivel altísimo, tanto individualmente como colectivamente. Tienen futbolistas del Real Madrid y otros equipos que las completan y creo que en estos últimos partidos han sufrido bastante porque han tenido partidos complicados como el de Suecia, en un entorno que no era el mejor y han conseguido ganar el partido. Han sufrido y perdido contra Italia, que quizás ha sido el único partido que no han encontrado la manera de darle la vuelta, pero incluso en el último partido, cuando la cosa iba mal, han conseguido el volver a practicar el fútbol al máximo nivel. Y cuando están a ese nivel... no hay ninguna selección que pueda ganarles. Entonces, si pensamos en una Final Four, en un título posible de por medio, que además es el primero de la historia, creo que pocas cosas pueden motivar más a una selección que viene de ganar un Mundial. Además, jugando en casa y con el billete a París en juego es perfecto para ver la mejor versión de España. Esté quien esté, falte quien falte, independientemente del rival.
—Hablaba antes de su futuro en los banquillos, ¿ve su regreso a la Selección pero como entrenadora?
—A mí me encantaría ser entrenadora al máximo nivel y evidentemente entrenar a una selección que lucha por títulos sería una de las opciones. Entrenar en cualquier Liga de Primera división, tanto femenina como masculina, sería una de las opciones. Intentaré llegar lo más alto posible, que pueda solo lo va a dar el tiempo y el conocimiento que tenga de este deporte.
—Una última, habiendo jugado con muchas de las mejores futbolistas de la historia, ¿diseña para AS a la jugadora perfecta?
—Marta, sí o sí, sería una parte de esa mejor futbolista, para mí ha sido la mejor de la historia. Dzsenifer Marozsán, que es una de las más talentosas con las que he jugado, técnicamente exquisita, un golpeo también fantástico... también la escogería. A nivel de gol y remate de cabeza, cogería a la brasileña Cristiane. Y luego tiro un poco para casa: a nivel de profesionalismo, tenacidad, compromiso y competitividad, una parte de esa futbolista también sería de Irene Paredes. Luego haría una mezcla también de jugadoras españolas para completar con Jenni Hermoso, Aitana y Alexia porque son tres de las futbolistas con más talento solo de España sino a nivel internacional. Me saldría la mejor futbolista de la historia de todos los tiempos, ganaría todos los premios individuales.