Seguimos soñando

¿Es un sueño? Me he tenido que pellizcar con el pitido final y sí, estaba despierta. España ha hecho historia en Nueva Zelanda, lleva una semana haciendo historia. La Roja ya está en la final del Mundial, quién nos lo iba a decir después del año que hemos pasado. Polémicas, renuncias, críticas... España ha superado todo los obstáculos del camino para hoy poder decir que está en la gran final. Esa final que llevamos años soñando.

Jorge Vilda. Uno de los grandes artífices de este éxito es Jorge Vilda. El técnico ha estado en entredicho desde hace años, pero nada le ha desviado de su obsesión: ganar un gran torneo con España. Está ya a sólo un paso. Como todo seleccionador tiene que aguantar muchas críticas porque en el fondo todos tenemos un seleccionador dentro. Las aguantó con su idea y su método. Vilda cogió a La Roja en 2015, pero llevaba toda la vida trabajando con el fútbol femenino y en este Mundial se ha quitado todos los corsetes y ha sido él mismo, el que fue nominado a mejor entrenador para FIFA, el que ganó títulos con las categorías inferiores. Sí, todos tenemos críticas a sus convocatorias, juego o decisiones. Ni la presión externa ni la interna le han desviado. Porque se le pueden criticar muchas cosas, pero no su trabajo por el fútbol femenino desde que llegó a la Sub-17 hace ya 13 años. Un amor por este fútbol que el inculcó su padre Ángel, que a buen seguro está disfrutando con el éxito de su hijo. Porque gran parte del éxito de La Roja es de ellos, de los que lucharon cuando nadie creía en este deporte.

Salma y Olga. Salma es la chica de oro del fútbol español y quiere el triplete de Mundiales. Lo de Salma no tiene comparación. Tiene un don, es especial y lo volvió a demostrar. Porque, como hizo en cuartos ante Países Bajos, apareció cuando los penaltis se divisaban. Ayer era la prórroga lo que se veía de fondo cuando le cayó ese balón. Y no le temblaron las piernas para mandarlo a gol. Tampoco le tembló a Olga Carmona. La sevillana sacó su cañón en el 89′ para dar el pase a la final a España. Merecido para una luchadora, una ganadora nata. Olga y Salma ya son historia de España.

El Mundial de Tere. Callada y tímida, con esa sonrisilla que tiene delante de la prensa o los aficionados. Pero en el campo es otra cosa. La gallega se transforma en una jugadora total. Abarca muchísimo campo y llega a todo. Y el Mundial que está haciendo toca la perfección. Ayer robó nada menos que 15 balones, fue de las que más pases dio en el último tercio (11), más regates hizo en España, más centros puso y más entradas ganó. El pilar del centro del campo.

Qué nos quiten lo bailado. Quedan 90 minutos de nervios y a buen seguro lágrimas, esperemos que de alegría. Pero, pase lo que pase el domingo, nadie podrá olvidar este Mundial ni a estas 23 jugadoras. Nos han hecho disfrutar como nunca lo habíamos hecho, han enganchado a España al fútbol femenino y han convertido los madrugones en sonrisas. Sólo me queda darles las gracias por este increíble mes que nos están haciendo vivir.