“Quiero conquistar Wembley”

Lucía García (Vizcaya, 1998) es una de las intocables en La Roja de Montse Tomé. La delantera de Rayadas sabe lo que es conquistar Wembley. Lo hizo cuando militaba en el United. Ahora va a por todas con España.

Sigue yendo a la Selección incluso desde México. ¿Hay nervios cuando la llaman?

Siempre los tengo, sí. Desde una semana antes. Además, la lista suele salir a las tres de la madrugada en México y me llama mi familia. En México nos despertamos muy pronto, a las cinco, así que ya me lo comentan.

“La lista suele salir a las tres de la madrugada en México y me llama mi familia”

Lucía

Y eso que su primera llamada fue en 2018…

Esos nervios no se van. Mi llegada fue muy random, con 18 años y por la lesión de una defensa… Desde ahí he venido casi siempre.

¿Cómo es esta España?

Hemos dado un salto de calidad en estos últimos tiempos, nos estamos conociendo más.

¿El ruido de fuera afecta?

Si le digo la verdad, yo no me entero de nada. También es cierto que vivo lejos y no miro las redes sociales.

Llega un partidazo, Inglaterra, un viejo conocido…

Recuerdo el partido ante las inglesas en la Euro de 2022, en Brighton, muy disputado. Pero por detalles o desajustes nos vencieron. También el ambiente que había con su público, era increíble.

Usted ya sabe lo que es jugar en Wembley… y marcar.

Tengo un recuerdo increíble, sí. Jugué allí la final de la FA Cup el año pasado con el United y marqué dos goles. Lo quiero repetir con España. Sé lo que es conquistar Wembley.

¿Cómo ven allí a España? Si advirtiera sobre una jugadora inglesa, ¿cuál sería?

Ella Toone. Está en un grandísimo nivel. Ha sido jugadora del mes muchas veces. También les avisaría de James. Pero todas son estrellas.

¿En Inglaterra se habla de las Alexia, Aitana…?

Claro, son referentes a nivel mundial. Suenan en el mundo entero, te preguntan por ellas.

De su paso por el United, ¿qué balance hace?

Tengo un recuerdo muy bonito, me dio pena marcharme, estaba muy feliz allí. No descarto volver. Estos días veré a amigas en Londres.

Pero le llamaron de México...

Tenía muchas ofertas de España, Inglaterra… Me surgió la oportunidad de ir a Rayados. Me apeteció probar. Llevo seis meses y estoy mucho mejor.

¿Cómo es Monterrey?

Es enorme, no salgo de casa a partir de las cinco por el tráfico. Es un caos: gente, coches.

¿La apuesta por el fútbol femenino allí es fuerte?

Sí, está creciendo muy rápido. Vemos como algunas españolas con cartel de campeonas del mundo se van allí. También el mercado masculino, mire el caso de Sergio Ramos. Están haciendo una apuesta enorme, en los próximos años se verá la repercusión.

¿La llegada de Ramos qué ha supuesto?

Ha sido increíble. Creo que va a dar un salto de calidad. Todavía no le he podido ver, pero me han dicho que es muy majo y muy buena persona. Con los otros jugadores españoles (Sergio Canales, Óliver Torres...) tenemos muy buena relación.

Jenni también fue un boom.

Cuando yo llegué ya estaban allí Jenni, Guerrero, Pereira, Paños… fue un plus para mí.

Vive en la misma ciudad que Jenni, son vecinas y rivales.

No la he visto, es tan grande que no coincidimos en nada. Nos vimos en el partido hace unas semanas y ya. Es muy difícil en México que te relaciones… la rivalidad es muy fuerte. Es un universo diferente, lo ven muy mal. Entre eso y que vivimos en la otra punta, no nos vemos.

“No he visto a Jenni... la rivalidad es muy fuerte”

Lucía

En Mánchester sí que compartió su vida con las del City (Aleixandri, Leila…).

Sí, allí vivíamos todas al lado, éramos una familia y compartíamos la vida.

¿Qué tal con Montse Tomé?

Volví porque me transmitió la confianza que necesitaba. Te dice las cosas como son, tanto lo bueno como lo malo.

“¿El Mundial? En su día fue... no pude verlo"

Lucía

Usted fue una de ‘las 15’ que se quedó sin ir al Mundial.

Ya lo he superado, es como cuando te dejan en una relación de muchos años. El tiempo lo cura todo. En su día fue… no pude ver el Mundial. Estuve de vacaciones y la gente me comentaba. Me dolió no estar, pero con el tiempo ya lo veo con otros ojos.

¿Cómo fueron sus inicios?

No tenía a nadie que siguiera el fútbol en casa. Y nacimos mis hermanos y yo, somos cuatrillizos, tres chicos y yo. Y a la única que le apasionaba el fútbol era a mí. No sé de dónde me surgió. Jugaba yo sola, o les tenía que engañar. Mis padres asumieron muy bien cuando empecé en un equipo, y se tragaban una hora de coche por las carreteras de Asturias. Han hecho esfuerzos grandísimos, por ellos estoy aquí.

¿Volvería a la Liga?

¿Por qué no?

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