“Me veo levantando la Copa del Mundo”

Salma Paralluelo no tiene límites. A sus 19 años reconoce que se ve levantando la Copa del Mundo este verano en el Mundial de Australia y Nueva Zelanda. La delantera blaugrana ha visto cómo su carrera coge un ritmo imparable.

Y es que hace un año todavía estaba decidiendo entre el atletismo y el fútbol. De ahí a ser convocada con la absoluta para la Eurocopa y su fichaje por el Barcelona. En una entrevista para FIFA explica lo que es militar en el club blaugrana.

Incios: “Empecé ambos deportes cuando tenía siete años. Al principio era solo por diversión. A medida que crecía, comencé a darme cuenta de que estaba mejorando cada vez más. El atletismo me permitió estar sola, estar expuesto, entrenar sola y saber que todo lo que estaba haciendo era solo para mí. Implicó hacer un mayor sacrificio, pero eso fue lo que se necesitó. Con el fútbol, lo disfruté. Disfruté compartiendo algo con el equipo, con mi gente. Pasaron los años, las cosas iban muy bien, estaba muy feliz, estaba obteniendo buenos resultados, no veía por qué cambiar nada. Me encantaban ambos deportes. Siempre me vi alcanzando la cima en ambos. Por eso quería seguir haciéndolos. Sin embargo, supe que tendría que elegir. Escogí el fútbol pero del atletismo aprendí muchos valores como el sacrificio, la constancia y la disciplina”.

Categorías inferiores: “Es algo especial. Tomemos a Eva Navarro y Jana, por ejemplo: jugamos la Copa Mundial Sub-17 en Uruguay, la ganamos juntas. Estar con ellas en la selección absoluta es muy especial porque, aparte de que nos llevamos muy bien, es bonito seguir creciendo juntas después de todos estos años. Creciendo y ganando”.

Ganar el Mundial Sub-20: “Fue muy especial. No es algo que puedas experimentar muy a menudo. Allí vivimos muchas cosas con el equipo, lo pasamos muy bien. Entrenamos y dimos todo en el campo. Nos dimos cuenta de que era posible pasar a las siguientes rondas, porque teníamos ilusión y nos habíamos unido en el campo. Vencer a Japón en la final y llevarse el trofeo a casa fue la guinda del pastel. Ese día fue único. Cuando marcas, sientes adrenalina y euforia. Sabes que ese gol te puede acercar a ganar y, en ese caso, a la Copa. Lo más importante que aprendí fue a disfrutar el momento, disfrutar cada día, cada partido, no pensar más allá de cada partido, vivir la experiencia, porque como decía, son experiencias únicas. Solo hay que vivir el momento”.

Barcelona: “Es un privilegio. El Barça es un gran equipo con las mejores jugadoras del mundo. Entrenar cada día con ellas a tanta intensidad y con tanta exigencia te hace mejorar como jugadora cada día. Es un honor y un privilegio entrenar con ellas”.

Mundial: “¿Ganar el Mundial? Por supuesto. Siempre tienes que visualizar estas cosas. Lo primero que tenemos que hacer es centrarnos en la fase de grupos. No podemos mirar más allá de eso. Necesitamos tomarlo un juego a la vez y trabajar hacia nuestra meta”.