Laia Codina, la periodista de La Roja

Uno de los nuevos fichajes de La Roja nació hace 23 años en Campllong. También es una de las promesas de La Masia. Una jugadora de referencia, una defensa con estilo 100% Can Barça. Es Laia Codina.

Hace unos meses dio el salto a la absoluta y no pudo ser mejor: debutó ante Estados Unidos en El Sadar y su actuación maravilló al mundo por su marcaje a jugadoras de renombre como Morgan, Rapinoe o Lavalle, y porque anotó el gol que dio la victoria histórica. Por primera vez se logró ganar a la campeonísima. Por supuesto convenció a Vilda, lo que ha provocado que esté a un paso de tener el billete para la cita mundialista.

La catalana, sin embargo, es cauta aún sobre su posible sueño del Mundial. Prefiere hablar maravillas de sus compañeras y disfrutar cada minuto que pasa con ellas estos días: “Es un lujo, por eso hay que disfrutar de cada instante y de cada momento con ellas, que son las mejores del mundo. Creo que se puede hacer algo grande”.

Su trabajo desde hace meses en la plantilla del Barcelona, ya como profesional, lo compagina como puede con otra de sus pasiones, el periodismo: “Me queda alguna asignatura, porque desde que estoy en el primer equipo es muy difícil compaginar el ser profesional con los estudios universitarios. Me decanté por el periodismo. Es algo que quiero seguir haciendo, porque me encanta y creo que es vocacional. Disfruto comunicándome. Quiero hacerlo”.

Incluso, Laia se decanta por un medio en concreto. “Me encantaría trabajar en la radio, creo que es mi medio. Me sorprendió cuando tuve que hacer prácticas en la Uni. Me sorprendió lo que me gustaba la radio. Deportes no lo tengo claro, no lo sé. Creo que esa rama la voy a tener, la experiencia de haber sido futbolista creo que me daría siempre un hueco. Así que me gustaría probar otras cosas como los informativos”, dice.

Competencia en el Barça

Esa osadía ante un micrófono la tiene cuando pisa un terreno de juego. Y fue en parte por su ídolo desde bien pequeña: Carles Puyol. Ahora, en el Barça, tiene por delante a dos de las mejores centrales del mundo, Irene Paredes y Mapi León. Aun así, no se rinde: “No me doy por vencida nunca, soy muy peleona. Sí es verdad que en Barcelona tengo por delante a Irene y a Mapi, pero lo bueno es que estoy aprendiendo mucho de ellas. Mira, Irene no llegó al Barça hasta los 29 o 30 años...”.

Una jugadora con garra que además tuvo las cosas claras desde bien pequeña: “Siempre he sido defensa. Y eso que la tónica es empezar arriba e ir retrasando la posición poco a poco. Pero a mí siempre me gustó esto. Empecé con cuatro años, y mi referente siempre ha sido Puyol. Desde que se retiró no he tenido a nadie más. Él me marcó. Me fijé mucho en él, como era en el campo y también en sus valores. Esto es muy importante, porque primero de todo somos personas. El fútbol solo nos dura 15 años, luego seguimos siendo personas. Me fijé mucho en cómo lo hizo él”.