La profesionalización llega a las amonestaciones: multas 45 veces más altas
La RFEF aplica desde la jornada 2 de la Liga F (la primera no se disputó) el artículo 52 de su Código Disciplinario, relativo a las sanciones económicas en competiciones profesionales.
De profesionalizada a profesional. La máxima competición femenina de fútbol ha vivido un cambio histórico en esta temporada 2022-23. La nueva LPFF, bajo la denominación de Liga F, celebró el fin de semana pasado todos los partidos de la jornada 2 tras la suspensión de la primera por el parón arbitral. Pero una vez resuelta la profesionalización de las árbitras y sin convenio de coordinación entre el ente que preside Beatriz Álvarez Mesa y la RFEF, un nuevo conflicto ha estallado entre las partes.
Los clubes han recibido la notificación de las sanciones económicas relativas a las tarjetas amarillas y rojas con las mismas cuantías que se aplican en la Primera División Masculina, esto es, han pasado de multas de 4 y 9 euros, a 180 y 350€ respectivamente. El incremento es del 4.400% en el caso de las amonestaciones, ahora con una multa 45 veces más elevada.
Estas sanciones están recogidas en el Código Disciplinario de la RFEF, aprobado por la Comisión Directiva del Consejo Superior de Deportes en su sesión del día 7 de julio de 2022, que en su artículo 52 se refiere a que estas sanciones de carácter económico podrán imponerse “a todos/as los/as que intervienen o participan en las competiciones de carácter profesional”.
“La sanción de amonestación de directivos/as, futbolistas, entrenadores/as y auxiliares llevará consigo, para el club de que se trate, multa accesoria en cuantía de 180 euros cuando se trate de equipos adscritos a Primera División (...). La sanción de suspensión conllevará multa por importe de 350 euros (...)”, detalla el punto 3 del citado artículo 52.
Además de estas multas “para el club de que se trate”, en este mismo punto la RFEF recoge “con independencia de la sanción pecuniaria que corresponda al club, una multa en cuantía de 600 euros” para “jugadores/as, técnicos/as, directivos/as o auxiliares con contrato profesional e inscritos en competiciones de carácter profesional”.
Así, los costes de la competición para los clubes se verán también muy afectados por este incremento de las multas. Solo en la jornada 2 se mostraron un total de 17 tarjetas amarillas y una roja.
Reacción de las jugadoras
“¿Un banco de confianza para pedir un crédito para pagar un gasto extra este año?”, preguntaba la capitana del Valencia Marta Carro en su cuenta de Twitter, acompañando la frase de un emoticono amarillo y otro rojo. Sandra Hernández, del Granadilla Tenerife, también dio su opinión: “¿Nos estamos volviendo locos o qué pasa? ¡Es lo que faltaba! ¿Cabeza y comparaciones salariales en esto se puede exigir?”.