La ‘otra’ gran distancia entre Barça y Madrid: apuesta, cantera, historia...
Blaugranas y blancas se enfrentaron por decimocuarta vez con victoria final para las culés. Estas son algunos de los factores que siguen marcando distancias entre ambos.
El último Clásico en versión femenina y el 0-3 a favor del Barcelona evidenció que al Real Madrid todavía le queda mucho trabajo que hacer para poder entonar el “no hay distancia”. Esa fue la frase que Alexia Putellas pronunció en agosto de 2020, después de caer en semifinales de Champions ante el Wolfsburgo por un ajustado 1-0, para destacar que las blaugranas ya podían competir de tú a tú con los grandes equipos europeos. Unos meses después, en 2021, ganaron su primera Champions. Y esas son las palabras que estén deseando poder decir en Valdebebas de los enfrentamientos ante su eterno rival, pero todavía queda lejos. Estos son algunos de los otros factores que también alejan ambos proyectos deportivos, más allá del verde, donde el balance es de 49 goles para el Barcelona y 6 para el Real Madrid.
El peso de la historia
El Barcelona femenino nació de forma oficial, ya integrado dentro del club, en junio de 2002, mientras que el Real Madrid, tras completarse la compra del Tacon, lo hizo en junio de 2020. Dieciocho años después. Para las blancas es imposible no sentir el peso de una historia que, en el caso culé, va mucho más allá de principios de este siglo...
Y es que los orígenes del equipo blaugrana se remontan a 1970, cuando, gracias a una iniciativa de la jugadora Imma Cabecerán, se disputó en el Camp Nou el primer partido del Barça femenino, con la UE Centelles como rival y el exportero azulgrana Antoni Ramallets de entrenador. Al año siguiente, la Selección Ciudad de Barcelona cambió su nombre por el de Peña Femenina Barcelonista, y recibió apoyo material y económico por parte del club catalán y el 26 de junio de 1994 el Club Femenino Barcelona (nuevo nombre de las azulgranas) conquistó la primera Copa al derrotar en la final al Oroquieta Villaverde de Madrid por 2-1. Finalmente, el 26 de junio de 2002 el Club Femenino Barcelona pasó a ser una sección más del Club, y se denominó FC Barcelona femenino, profesionalizándose en el verano de 2015... Y hasta hoy.
“Tenemos cuatro años de historia, esto no son los chicos”
Mientras, su eterno rival apareció en la máxima categoría femenina en junio de 2020, después de una temporada de transición en la que el Tacon, que sería absorbido, ya entrenaba y jugaba en las instalaciones del Real Madrid. El club fundado por Ana Rossell habría cumplido 10 años en este 2024. “Tenemos cuatro años de historia, esto no son los chicos”, ha recordado Alberto Toril en sala de prensa esta misma temporada.
Estructura
Dentro de la estructura de las propias secciones también hay diferentes que, en la práctica, acaban marcando diferencias entre ambos proyectos. En el Real Madrid, Begoña Sanz, adjunta a la dirección, es la máxima responsable de la sección, y Ana Rossell, fundadora y presidenta del extinto Tacon, la directora deportiva. En su estructura hay cuatro equipos: el primero, que compite en la máxima categoría; el filial, que lo hace en Segunda RFEF; un juvenil y un cadete, ambos en preferente.
Por su parte, en el Barcelona el directivo responsable es Xavier Puig, habitual en el palco y los viajes del equipo, y la dirección deportiva está a cargo de Marc Vivés, que cogió el testigo de Markel Zubizarreta. En su estructura tienen a ocho equipos. Además de las mayores, vigentes campeonas de Liga, Supercopa y Champions, hay dos filiales, un juvenil-cadete, dos infantiles y dos alevines, estos últimos compitiendo con equipos masculinos.
En número, el Barcelona tiene el doble de equipos femeninos de fútbol que el Real Madrid, además de contar con una Masia mixta. Alba Caño, Berta Doltrafill, Clàudia Riumalló, Judit Pujols, Laura Coronado, Lucía Corrales, Martina Fernández (habitual con el primer equipo), Ona Baradad y Meritxell Font fueron las pioneras de la residencia blaugrana en 2021.
Filial potente
Precisamente cinco de las futbolistas mencionadas en el párrafo anterior forman parte en la actualidad de un Barcelona B que la temporada pasada ya fue campeón de Segunda división, la Primera RFEF, y que en la actual también comanda la clasificación con 58 puntos, los mismos que un Deportivo que ascendería de forma directa de acabar así. Además de las futbolistas de nuestro territorio, el Barcelona viene fichando en los últimos tiempos a perlas internacionales como la italiana Dragoni, que fue al Mundial con Italia, la estadounidense Onyeka Gamero o la noruega Martine Fenger.
“El Barça lleva muchos años trabajando en una dirección, creo que es ejemplar, desde arriba a abajo, con jugadoras jóvenes, el filial líder en Segunda, hay muchísimas cosas detrás que se están haciendo bien y es responsabilidad del resto de equipos seguir dando pasos adelante”, analizaba el propio Giráldez ayer, que esta campaña, debido a la plaga de lesiones, ha echado mano de futbolistas del B en muchas ocasiones. Martina y Vicky López son habituales mientras que otras como Dragoni, Ari Arias o Corrales también han tenido minutos, y muy buenos.
“Es responsabilidad del resto de equipos seguir dando pasos adelante”
También Toril ha tenido que usar a futbolistas del filial durante el periodo más difícil de lesiones que ha sufrido esta temporada el Real Madrid, que llegó a tener disponibles solo a 13 jugadoras de campo. Olaya, Marisa y Pau Comendador han ayudado al equipo blanco en Liga F y Champions. Sin embargo, que el filial blanco se quedase sin ascenso a la categoría de plata la temporada pasada, con dolorosa derrota en el derbi y subida del Atlético de por medio, hace que las diferencias de ritmo competitivo con las futbolistas del primer equipo sean palpables. Eso sí, esta campaña no se les debería escapar el ascenso a Primera RFEF, pues el Real Madrid B es líder del grupo Norte con seis puntos de ventaja con respecto al segundo, el Atlético Baleares de Virginia Torrecilla.
Presupuesto
Además de en la apuesta histórica y deportiva, también hay diferencias económicas entre Barcelona y Real Madrid. El equipo blaugrana apunta a cerrar en positivo esta temporada, con una previsión de 2,3 millones de superávit que viene condicionado por un nuevo aumento en el volumen de negocio, que ascendería a los 17,6 millones de euros.
Mientras, el cuadro merengue asume un gasto de 8,6 millones de euros de presupuesto para la presente temporada 2023-24. Con esa cifra, el proyecto madridista se sitúa ya en las cifras que manejan los grandes equipos europeos femeninos, aunque continúa muy lejos del volumen económico del Barcelona.
Afición
Para terminar, también hay que hablar de la afición. En este punto también influye el propio peso de la historia, que hace que el Barcelona haya generado en estos años una gran afición, casi fenómeno fan (véase las firmas de autógrafos organizadas por el club), que ha llevado a que el Camp Nou registrara el récord de asistencia a un partido femenino de fútbol hasta en dos ocasiones, superando su propia marca (91.648 ante el Wolfsburgo y 91.553 ante el Real Madrid en 2022), que tengan la mejor asistencia media de la Liga F o que casi 10.000 personas se desplazaran a Eindhoven a la final de la Champions el año pasado.
Mientras, el Real Madrid sigue intentando crear más afición en la cuarta temporada de la historia del equipo femenino. Las máximas asistencias registradas en el Di Stéfano se han producido precisamente al recibir la visita del Barcelona: 5.126 espectadores el año pasado. Este domingo fueron 4.947 personas.
Queda claro que, además de la del campo y las grandes estrellas que tiene en plantilla, el Real Madrid debe recortar distancias en muchos otros aspectos con el Barcelona...
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