¡España hace historia!

La Selección rompió con la estadística para siempre y fue capaz de ganar por primera vez en su historia a Estados Unidos. Cuando más complicado se le puso el asunto a este equipo supo dar la cara. Lo hizo el otro día ante Suecia con un empate y en Pamplona logró la guinda del pastel ante la mejor selección de todos los tiempos. España no daba crédito. La Roja construida por Vilda a golpe de decepciones, con 15 jugadoras fuera por decisión propia, con todos los focos encima esperando una goleada ante las americanas, se impuso a la mayor potencia futbolística del mundo. Laia Codina abrió el marcador y Esther sentenció en un encuentro para la historia.

Para este segundo choque de la ‘nueva’ España cambió el planteamiento. Vilda apostó por un nuevo sistema de 5-3-2, con tres centrales y dos carrileras con libertad. Enfrente estaba la campeona del mundo. Lo más llamativo es que Athenea esperó en el banquillo. Le tocaba descansar de inicio a la mejor jugadora del equipo. Por contra, tuvieron su premio Maitane y Oroz y Laia Codina. El Sadar se vistió de gala para el primer partido de la Selección. Nunca antes había visitado una selección española este campo. La acogida fue muy buena, con colorido y cánticos hacia La Roja. Y es que además hubo doble celebración ya que se batió el record de asistencia de un partido de La Roja: 11.209 espectadores vibraron en El Sadar.

Misa vivió unos primeros sobresaltos por la intensidad con la que salió Estados Unidos al choque. Antes de los 10 minutos tuvo que salir a rechazar un pase que dejaba a Horan sola delante de la portería. Lo que parecía un imposible sucedió. La Roja comenzó a tocar y llevar el peso del choque. Oroz tenía ganas de demostrar ante sus paisanos y cogió la iniciativa. Carmona y Oihane se animaron por las bandas. España comenzó a llegar. Laia tuvo la primera ocasión de cabeza. Pero faltaba algo. El ataque no conectaba, por mucho que Esther bajaba a recibir. A falta de llegada, Zornoza lo intentaba desde lejos.

Con Rapinoe y Rodman desaparecidas, la que se peleó contra el mundo fue Smith. Ivana, Codina y Rocío lograron mantener el pulso a la delantera estadounidense. Fue la Selección la que dio con la tecla en un córner botado por Zornoza que tras un barullo aprovechó Codina para mandar el balón al fondo de la red. La blaugrana, que debutaba, lo celebró por todo lo alto. Sus compañeras y el banquillo explotaron.

La tónica en la segunda parte no varió demasiado. Incluso se vio a la megaestrella Rapinoe achicando balones en su área. La entrada de Athenea dio un plus más. Esther, en un centro medido de Oihane, pudo ampliar el marcador. La más clara vino de las botas de Olga Carmona. La sevillana se atrevió esta vez a probar con un centro-chut que tuvo que despejar la guardameta estadounidense con una gran estirada. Tanto acercamiento tuvo su recompensa. Esther remató al fondo de la red con seguridad un centro de Oihane.

Un partido y un resultado para la historia. Un mensaje para los incrédulos. España está viva. España quiere el Mundial. España es más que un grupo selecto de jugadoras que hoy deberían reflexionar sobre lo sucedido.