Iris Ashley, la 9 revelación de La Fábrica
La delantera alcarreña, de 18 años, es la cuarta máxima goleadora del equipo blanco. “Estoy muy contenta de poder entrenar con las mejores, es un sueño”, afirma.
A falta de Bruun, paso adelante de Iris Ashley Santiago (Guadalajara, 9-11-2007). La baja de la danesa en la enfermería del Real Madrid por una cefalea que no termina de remitir hizo que Pau Quesada empezara a dar minutos a la joven alcarreña, que ha respondido con entereza: lleva cuatro goles que la sitúan como cuarta máxima anotadora del equipo blanco por detrás de Weir (10), Redondo (7), Linda (6) e igualada con Däbritz (4). “Es mi primer doblete, estoy muy orgullosa”, dijo ante las cámaras oficiales del club tras su actuación ante el Espanyol (0-4) en octavos de Copa. Con 1,73 metros de altura, promete ser una 9 de garantías.
Y así lo dejaba entrever de niña, cuando se curtió en los campos de fútbol de la Comunidad de Madrid defendiendo las camisetas del RSD Alcalá (2011-15), Rayo Vallecano (2015-17) y Madrid CFF (2018-22).
Desde el equipo blanco y rosa dio el salto al juvenil del Real Madrid, un camino que también hicieron sus compañeras Pau Comendador o Silvia Cristóbal. Precisamente junto a ellas fue campeona del Torneo Juvenil de la RFEF en 2025 al ganar la final al Barça. Y también con Pau, Iris fue subcampeona del mundo Sub-17 en 2024.
En esa campaña, la 2024-25, la alcarreña dio un salto en su carrera deportiva, pasando de jugar en categoría juvenil a hacerlo en Primera RFEF (Segunda).
Todas las mañanas acudía a sus clases en el instituto Newton Salas de Villanueva de la Torre y su madre la recogía para llevarla a Valdebebas a entrenar. En el trayecto en coche, de unos 40 minutos, le daba tiempo a comer, pero los deberes quedaban para la vuelta a casa.
Ahora ha dejado eso, pues en esta campaña 2025-26, Iris está en dinámica de un primer equipo en el que ha irrumpido con fuerza por la baja de Bruun.
Su debut de la mano de Quesada fue el 14 de septiembre, ante el Madrid CFF, y su estreno anotador, de ensueño: en San Mamés, con un golazo que cerró el triunfo de las suyas (1-4).
El sábado, anotó un doblete al Espanyol en Copa y sus números lo dicen todo: 379 minutos y cuatro dianas (un gol cada 94 minutos).
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“Los entrenadores y las compañeras me ayudan. Estoy mejorando mucho gracias a ellas. Estoy muy contenta de poder entrenar con las mejores, es un sueño”, declaró una Iris que luce el 43, pero quiere ser la 9 del Madrid del futuro.
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